태형Japón. Abril . 2018
El nivel de trabajo era tan excesivo que el ocultar su acercamiento se había vuelto fácil. Pensó que quizás traspasar la barrera de amigos de forma clara para ambos, complicaría las cosas pero fue todo lo contrario. Lo estaban haciendo funcionar bien, se podría decir.
No sería fiel a la realidad si sostuviera la idea de que la incertidumbre no les acechaba en ocasiones.
Aun así, cada mirada, cada momento a hurtadillas y cada risa que se deslizaba en medio de las noches que compartían les recordaban por qué estaban dispuestos a enfrentar ese desafío. Optaban por vivir en el presente. Encontrando refugio en el amor que habían construido fuera de los márgenes de sus vidas profesionales.
En ese pequeño mundo que habían creado, a veces se proyectaban sombras oscuras. Jungkook con frecuencia tenía temores, dudas las cuales transmitía y él intentaba aplacarlas. Por el contrario, Taehyung mantenía la esperanza por ambos de que, algún día, seria mas sencillo para ambos. Quizás en otro contexto, en otro país, en otro mundo diferente al que ellos pertenecían podría serlo. Sin embargo por ahora, se sentía en la obligación de resistir por ambos. Estaba dispuesto a echar todo el peso en sus hombros con tal de que Jungkook no sufriera.
Sus interacciones comenzaban a ser obvias, a pesar de las advertencias de sus managers y sin dejar de ser profesionales. Ya era imposible cantar según que canciones sin dedicarle las frases. El público, en lugar de juzgar, comenzó a aplaudir esa conexión entre ambos, lo que les alentaba a continuar. Tenían momentos que eran suyos y de nadie más. Quiso gritarlo muchas veces, mas no podía.
Ya quedaba muy poco para terminar su tanda de fanmeetings en Japón. Seguían en el backstage cuando decidió incordiar a YeonJoo mientras terminaba de maquillar a Jungkook. Con una sonrisa juguetona, se valió de la ocasión para hacer bromas, plantear preguntas incómodas y, de paso, tratar de sacar algún cotilleo. Por alguna razón, ella tenía el don de enterarse de todo y muchas veces lo compartía con él en petit comité.
—Como sigas sin dejarme trabajar te llamo a las cámaras para que te tranquilices Taehyung.—Exclamó la maquilladora cuando a su vez retocaba el rostro en sus manos.
—Oh, vamos, solo estoy tratando de ayudarte y animarte con mi presencia. ¿Cómo puedo resistirme a intervenir en esta obra maestra en proceso? —contestó Taehyung.—Aunque no se como sigues teniendo trabajo en BH. Mira esa cara, ya es perfecta.
YeonJoo, a pesar de sus amenazas, no pudo evitar carcajearse ante su elocuencia y su tono bromista. Levantó la vista intentando llamar la atención de alguno de los cámaras — ¡Venid por aquí ''V'' quiere decir unas palabras! —Para su mala suerte no tuvo éxito.
Taehyung dramatizó, llevándose una mano al pecho en señal de conmoción. —La amenaza más efectiva que me han hecho nunca. Ya me callo, lo prometo. —Declaró, cogiendo una silla para si mismo acercándola a donde estaban ellos para poder sentarse. —Libéralo ya Noona. Igualmente le pondrán un traje gracioso en breves.
YeonJoo le dirigió una mirada que claramente comunicaba dos posibilidades: ya sea que cumpliría su promesa de exponerlo públicamente o que recibiría una colleja. Él prefería sin duda la última opción. Enfrentarse a las cámaras, como ya era obvio, significaba no acercarse a Jungkook y contenerse. Le relajaba saber que ahora Namjoon y Seokjin formaban parte de la grabación, dándole un respiro.
—Tenias que haber empezado conmigo y dejarlo a él para el final. Parece que no lo conocieras.—Sugirió Jungkook riendo con complicidad a la par que YeonJoo rodaba los ojos.
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Are You Calling Me A Sinner ?
Lãng mạnSolo ellos dos se enfrentan a la realidad de la imposibilidad de sus sentimientos en un mundo que aún no está preparado para ello.