Renaciendo en un artista

9

Se despertó al otro día, boca abajo. La cobija lo cubría hasta la mitad de su espalda desnuda.
Miró a su costado y estaba vacío. De hecho, se encontraba en el centro de la cama.
¿Dónde estaba Taehyung?

Abrazó la almohada, aspirando sus aromas mezclados, trayendo los recuerdos de la noche anterior.
Sonrió ante esto, porque no había sigo un sueño, ¿verdad? Taehyung realmente le había dicho que le gustaba, ¿cierto?
Entonces, ¿dónde estaba Taehyung ahora?

¿Tal vez se había arrepentido?
Es posible, pero un así él mismo no se arrepentía.
¿Tal vez no quería volver a verlo?
Está bien, si eso quería, se alejaría. Pero esperaba realmente que no lo haya dejado varado en Seúl, ya que no tenía cómo volver.

Rodeó su cabeza con la almohada, pegando un grito que ésta amortiguó. Estaba sulfutado con todo lo sucedido.

¿Estaba bien o estaba mal?
¿Debió dejarse llevar o no?
¿Valía la pena siquiera seguir luchando por éste tonto sueño?

Todo pensamiento se escapó de su mente cuando sintió un peso extra posarse sobre él y seguidamente unas manos colarse por debajo de las cobijas, entre el colchón y su piel.

—Kookie~ despertaste... —Taehyung franeleó su nariz en la nuca del pelinegro.

Apartó la almohada de su cara y miró por sobre su hombro. Sonrió —Tae, ¿donde estabas? —preguntó cómo niño chiquito, casi en reproche.

Rió un poco travieso — Estuve ocupandome de un último paso. —salió de encima y se sentó a su lado. Jungkook se apoyó en sus antebrazos y lo miró.

—¿De qué?

—Logré que Yoongi-nim me ayudara a grabar tus covers en su estudio.

—¿Perdón? —se sentó y las cobijas bajaron, dejando en descubierto su parte baja. Estaba desnudo y se cubrió rápidamente, dando un salto por la punzada que sintió debido al brusco movimiento. —¡Mierda!

—Oh… ¿te duele aún? —Taehyung acarició su brazo.

—Pues, no han pasado mucho, Tae...

—Qué pena, porque viajaremos en unas horas —apretó los labios — pero si quieres, puedo cambiarlo para mañana

—¿En avión? —preguntó algo temeroso.

—Dijiste que estaba bien —puchereó.

Jungkook se inclinó hacia él y dejó un beso en su labio. —Lo dije, ¿crees que le tengo miedo a las alturas? Pfff. No bromees.

Cayó de rodillas al suelo y aspiró el aire de su ciudad natal fuertemente.

Estoy en tierra, estoy en tierra, estoy en tierra.
Se repetía.

—¿Kookie, seguro estás bien?

—¡Claro que sí, lindura!

—Pero estás en medio del aeropuerto, la gente te va a pisar.

—Ah, sí. — se levantó con sus piernas aún temblando. — Sólo fingía.

—Tienes saliva ahí. —señaló Taehyung.

Jungkook se limpió la boca. —Es sólo un reflejo fisiológico, no te fijes.

—Un reflejo ante el miedo.

—¿Miedo? ¿Yo? Cierra la boca.

—Miedo a las alturas.

El pelinegro soltó una risa altamente forzada —Yo no le temo a las alturas, lindura. Mejor deja los chistes para después. Seguro Yoongi nos espera

—Éste es el pizzero. — fue lo primero que dijo Yoongi al abrir la puerta de su casa.

—Buenos días, Yoongi-nim —saludó Taehyung

—No me dijiste que era el pizzero. — siguió con su tema.

—Porque no soy pizzero, soy repartidor —contestó Jungkook

—Mmm, touche. Pasen —se movió de la entrada para darles paso.
El par entró y Taehyung cerró la puerta tras él.
—Hyungie, llévalo al estudio y prepara todo, en un rato iré. —se alejó, dirigiéndose al baño.

Jungkook miró a Taehyung —¿Hyungie? ¿Qué tan cercanos son?

—Así de cercanos —Taehyung cruzó su índice y dedo mayor, moviendolos frente al rostro de Jungkook. — Sólo tenemos una buena relación, camina ya, celoso —empujó suave su espalda, guiandolo hasta el estudio.

—No son celos, estaba chequeando información.

—Mh... —A penas entraron, Taehyung lo tomó por los hombros, haciéndolo girar para quedar frente a frente. — No tienes porqué ser así. No salí del closet por Yoongi-nim, lo hice por ti, ¿está bien? —dejó un pequeño beso sobre sus labios. Jungkook hizo una mueca — Pregunté si estaba bien.

—Sí, señor. —mordió su labio para ocultar la sonrisa.

—Taehyung, no has preparado nada —renegó Yoongi al entrar.
El par se separó y él mismo comenzó a preparar todo. —Repartidor, ve detrás del cristal. Taehyung, indícale dónde ubicarse.

—Ya lo hice anoche —susurró a Jungkook traviesamente.

—¡Taehyung! —el pelinegro le dio un empujón.

—TMI, Hyungie —negó el pelirrojo

Taehyung rió y acompaño a Jungkook, acomodandolo para que pudieran comenzar a grabar.
Una vez preparado, dejó otro beso en su mejilla y fue junto a su maestro.

— Listo. —estaba ansioso. —¿Ya tienes la pista que te mandé?

—Ya. — apretó un botón. —Ok, chico, cuando veas la luz roja y oigas la música, empezaré a grabar.
No te preocupes si algo sale mal o no te gusta como suena. Siempre se puede empezar otra vez, pero trata de hacerlo bien de todos modos. — Taehyung sonrió y palmeó el hombro de su hyung. Él podía ser rudo, pero era alguien muy bueno.

La luz se encendió y el sonido empezó.
Jungkook inició.

— Please, don't see just a boy caught up in dreams and fantasies. 🎶
Please, see me reaching out for someone i can't see 🎶

Yoongi amplió la mirada.
Cuando Taehyung le dijo que por favor le diera un espacio a Jungkook para subir una canción en sus canales, él creyó que sólo era otra tonta obra samaritana que el castaño pretendía hacer. Mas quedó impresionado al instante en el que Jungkook dijo please.

— Take my hand, let's see where we wake up tomorrow 🎶
Best laid plans sometimes are just a one night stand 🎶
I'll be damned. Cupid's demanding back his arrow, so let's get drunk on our tears 🎶

—Diablos —comentó Yoongi. — Taehyung, éste chico es bueno. ¿Qué carajos hace de repartidor?

—Se llama Jungkook, hyung.

—Yo lo llamaré artista.

— And God, tell us the reason, youth is wasted on the young. 🎶
Is hunting season, and the lambs are on the run, searching for meaning 🎶
But, are we all lost stars, trying to light up the dark? 🎶🎶

Taehyung sonrió ampliamente. Si Yoongi decía que Jungkook era un artista, pues lo era.

Jungkook tuvo muchos problemas y trabas que no permitieron al mundo oír su voz; incluso él mismo se había detenido y dejado su sueño a un lado. Pero Taehyung estaba decidido a llevarlo donde pertenecía.

Si Jungkook decía que ya estaba cansado de intentar y se había rendido ante las cenizas del fracaso, entonces él lo ayudaría a renacer de esas cenizas.

Jungkook renacería como un artista