𝘓𝘐𝘉𝘙𝘈𝘙𝘠 𝘔𝘖𝘜𝘚𝘌 》》 𝘊. 𝘉𝘌𝘖𝘔𝘎𝘠𝘜

𝟔

Evitando
Capítulo seis.
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Me encontraba sentada en un cojín, con mi espalda apoyada en la librería y con un libro nuevo entre manos. Milagrosamente, la mesa que siempre ocupaba está vez no estaba vacía, se encontraba un grupo de chicas haciendo un trabajo, y no iba a molestarlas para sentarme a solamente leer, mientras que ellas podían perder una calificación.

Grandiosamente, en el resto de los días siguientes después de mi salida con Beomgyu, había podido ignorar por completo la presencia de mi "hermanastra" Aunque claro, teníamos que fingir llevarnos bien en frente de mamá. Pero, a pesar de poder ignorar su presencia, ahora pasaba más pegada a Beomgyu, impidiendo que este me pueda, aunque sea, saludar.

- Prometiste que no vendrías a la biblioteca e irías a pasear conmigo -se escuchó la voz de Leejun cerca de donde yo estaba-, es más ¿No ves qué ella no está aquí? ¿Y no te has dado cuenta que está ignorando por completo tu existencia?

- Leejun ¿Podrías dejarme un rato? Además, ya dije que no venía a verla...

- Te espero afuera, no tardes -su voz se escuchó firme y decidida.

La verdad, es que sí, también he estado evitando un poco a Beomgyu, a veces lo veía solo, pero simplemente no me acercaba. No es qué Leejun me diera miedo, es tan sólo qué algo me ha hecho sentir la necesidad de evitarlo. Estúpido ¿No?

Dejé el libro en mis piernas, y rápidamente saqué mis auriculares, colocando cada uno en el oído correspondiente. Puse play a la primera canción que ví, y me dispuse a seguir con mi lectura

No me gustaba mucho leer con música, me distraía con ello, pero tan sólo sería por un momento. Hasta que Beomgyu se fuera de la biblioteca.

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Había perdído la noción del tiempo, me había quedado dormida y Huening me había encontrado, por lo cual me despertó y es la razón por la cual también estaba frente a mí.

- ¿Huening? -el chico tan sólo asintió, miré a mi alrededor y sentí algo cálido en mis piernas, debido a que un abrigo reposaba en ellas- ¿Qué hora es?

- No es muy tarde, los talleres extraescolares aún les queda medía hora para terminar.

- Gracias -el chico tan sólo me sonrió para incorporarse y extenderme su mano, acepté su mano logrando que me ayudara a levantarme, haciendo que el abrigo, el libro y mis auriculares cayeran al suelo.

Tomé mis cosas para último recoger aquél abrigo desconocido para mí- Es el abrigo de Beomgyu Hyung.

Me quedé observando a aquél abrigo unos segundos largos, para después sacudirlo y doblarlo, ya mañana se lo entregaría. Le sonreí al menor para después encaminarme con él -en un silencio que no incómodaba a ninguno de los dos- hacía la salída del establecimiento. Una vez afuera, me despedí del chico para caminar hacía la parada del bus que me llevaría en dirección a mi hogar.

Al caminar a pasó lento, le echaba una que otra mirada a la chaqueta en mis manos, se sentía cálida, y el típico olor del castaño brotaba de ella, llegando hasta mís fosas nasales provocándome una sensación de tranquilidad.

Me detuve un momento y desdoble el abrigo, lo miré fijamente para después llevarlo a mí naríz e inhalar con parsimonia, aquél agradable olor logrando que me sintiera un poco culpable por el haberlo evitado todo estos días. Sonreí con amargura al abrazar el abrigo; fuí tan estúpida al haberme escondido de su presencia. Retomé mi camino en dirección a la parada, y con cada pasó que daba, abrazaba cada vez más aquélla prenda ajena.

Una brisa se hizo presente logrando que desordenara por completo mi rubia cabellera, provocando que algunos mechones se me introdujeran en la boca. Me cansaba esto, siempre se me metía en cavidad bucal y era asqueroso.

- Quizás ya sea tiempo de cortarlo -murmure al quitar cada ebra rubia que estaba en mís labios.

- Te verías distinta, pero no quitaría el hecho de que te siguieras viendo bien -levanté mi vista a la vez que detenía nuevamente mi caminar, sentía cómo mis manos empezaban a sudar. Quería salir corriendo- ¿Te llevas mi abrigo? Puedes darmelo

- ¡No! -me aferré más a aquélla prenda, logrando dejarlo un tanto sorprendido. Me di cuenta de mi acción y rápidamente empecé a sudar más de lo normal- D-digo, te lo entrego mañana se tuvo que haber ensuciado, así que pensé en lavarlo...

¿¡Qué estás haciendo Sookja?!

Empezó a reír dejándome un poco desconcertada- Si quieres llevarte el abrigo, tan sólo dilo, no pongas excusas.

Mis mejillas empezaron a calentarse, las escondí con su abrigo a la vez que trataba de mirarlo por la vergüenza que me había ocasionando.

- ¿Estaría bien si te invitó una taza de café? -lo observé para ver cómo me sonreía con ternura y a la vez qué me extendía su mano.

Me quedé observando su palma para después ver sus ojos, con lentitud e inseguridad empecé a estirar mi mano hasta que diera con la suya. Me dió un jalón para acercarme a él y abrazarme, sentía los latidos de mi corazón acelerarse y golpetear fuertemente mi pecho, como si tuviera la necesidad de salir de su lugar.

Mis brazos temblaban, pero aún así correspondí el abrazo enterrando mis dedos en la chaqueta del uniforme, para así empezar a deleitarme con aquella fragancia que desprendía de él, provocando una paz en mi interior.

Creo que estoy perdida.

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OK, quise actualizar rápido, porque si, no se fue como no se. Ay ni siquiera yo me entiende, pero como son ya varios capítulos tengo como tres escritos por mi, quiero hacer el proceso lo más rápido posible.

En otras noticias, tengo una cuenta donde yo estoy escribiendo una historia en este caso de BTS y pues tal vez puedan pasar a ver que tal, solo si quieren @_ipurpleblink aquí les dejo la cuenta.

Y pues otra vez agradecerles por todo el apoyo que esta recibiendo este fic, les prometo dar mi mejor esfuerzo. 💞💞