Amando tu recuerdo [España X Imperio Azteca] CountryHumans (concluida)

Capítulo 10: te descubrí

FBI había llevado a su pareja hasta su habitación y lo lanzó a la cama.

-entonces, te doy mi apoyo durante todos estos años ¿Y tú solo dejas que otro te ponga las manos en cima?- dijo molesto mientras se quitaba su clásica chamarra

A ONU claramente esto le molesto ¿Ahora resulta que él tenía la culpa de aquello? -¡¿Cómo te atreves a hablarme de ese modo?! ¡¿Me ves cara de ser una puta?!-

-¡¿Entonces por qué no lo golpeaste?! ¡Eres la ONU, debes darte a respetar!- recriminó la inteligencia

-¡¿Golpeándolo?! ¡Yo fomento la paz, Imbecille! (Imbécil en italiano) ¡No estoy de acuerdo con la violencia!- era increíble que siendo ONU menor que FBI fuese más maduro

-¡Abre los ojos! ¡El mundo no funciona así! ¡Hay que pelear por lo que se quiere!- FBI le arrancó la camisa a ONU.

-¡¿Que haces?!- ONU estaba asustado, jamás había visto así a su pareja.

"¿Piensas que no defenderá su territorio? sigue siendo el hijo de una nación"

Esa voz resonando en la cabeza del diplomático era inconfundible. Discordia estaba por conseguir lo que quería.

-¡Detente idiota!- ONU trataba de sacarse de encima a FBI, pero era obvio que dedicarte a la política no podría superar al entrenamiento del policía.

-Voy a enseñarte a no dejar que te toquen- ese tono violeta en sus ojos no era normal

La ropa de ONU quedó atrás, con enojo había sido arrancada y lanzada por todo el lugar -¡Basta! ¡FBI!- no quería que lo tomara así, porque lo hacía con odio, no con amor.

-Cállate- FBI cayó las quejas de ONU con un beso apasionado.

Ese beso era tosco, y en más de una ocasión sus dientes habían chocado, tan desesperado estaba el americano que no tenía ni cuidado.

Sin anticipación dos dedos invadieron la delicada zona de ONU.

-¡Ahh! ¡痛い! (duele en japonés)- ese no era su pareja, estaba siendo poseído por otra cosa. Pero por más que pidió en varios idiomas que se detuviera y que le dolía no paró el ritmo de esos dedos invasores.

FBI se despojó de toda su ropa y sacó sin pena ni gloria sus dedos -Esto te va a enseñar a no jugar conmigo- se acomodó entre las piernas de ONU

-¡No te atrevas! ¡Si lo haces da lo nuestro como te...! ¡Ahh!!- No pudo terminar su amenaza pues FBI había entrado de un solo movimiento.

Un gruñido de placer y rabia salió de los labios del mayor justo antes de empezar a moverse como desesperado.

-¡Ahh! ¡Ahh! ¡No, basta ya!- ONU estaba sufriendo, su cuerpo no había sido preparado, y no es como si ambos lo hubieran hecho tantas veces antes como para decir que estaba acostumbrado.

Los movimientos no se detuvieron, y ONU odiaba el hecho de que estuviera empezando a gustarle lo que le hacían ¿Pero por qué? Pues porque era simple sexo por odio, no estaba siendo querido, estaba siendo usado.

Viendo lo inútil en sus palabras solo tomó una almohada y se cubrió el rostro, esperando a que esa tortura se acabara, deseando recobrar la cordura y no dejarse llevar por esa situación.

Los gemidos de ambos llenaban el lugar, FBI estaba por terminar, y no pensaba salir.

Un par de estocadas más y terminó. ONU nunca había sentido aquello, su pareja siempre había usado condón, y aún si él también pudo llegar al clímax, no pudo disfrutarlo a causa del ardor en su entrada.

-No vuelvas a dejar que nadie te toque- FBI salió del interior del contrario y se tiró a la cama, se quedó dormido el muy maldito.

-Claro, no digas nada- adolorido, pero no gravemente herido ONU se levantó para ir directo al baño. En ningún momento perdió su semblante, nunca se había derrumbado antes, y no lo haría ahora y menos por alguien que resulta no valía la pena.