CHAPTER TWENTY-SEVEN.

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Hera metió las manos dentro de su campera mientras continuaba con el camino hacia el bosque

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Hera metió las manos dentro de su campera mientras continuaba con el camino hacia el bosque. Desde que abandonó su hogar, no había dejado de temblar en ningún momento, estaba más que segura de que esa noche era su muerte. Continuó caminando, hasta que llegó en un punto donde no tenía idea de a dónde ir, pues quien fuera el desconocido, no le había dado muchas indicaciones. 

Sacó su celular de su bolsillo, dándose cuenta de que tenía muy poca señal y cientos de mensajes de Jughead y Archie. No hace falta decir que ignoró a ambos, porque volvió a meter dentro de su pantalón su celular para así girar alrededor de su propio eje y ver si alguien estaba por ahí. No vió nada, sin embargo, sentía que estaban viéndola tan fijamente que eso podía incomodarla. Una sombra hizo acto de presencia ante sus ojos, un hombre, bastante menudo estaba frente a ella, completamente de negro y con un pasamontañas que no permitía que se vea nada más que dos orbes azules.

─Hera Cooper. ─su voz era robótica, posiblemente monitoreada con algún dispositivo que tuviera oculto. La chica lo observó, tragando saliva.

─¿Qué es lo que quieres conmigo? ¿Por qué me acosas?

─Te hemos visto desde antes de que te fueras de Riverdale. Pero nadie más que yo sabe el verdadero motivo por el cual abandonaste a tu familia y corriste a unas vacaciones en Francia.

─¿De qué estás hablando?

─FP Jones y tú, Hera. ─le dijo, ella continuó sin hacer ninguna expresión. Si algo aprendió de las películas de acción es no demostrar que eres débil─: ¿A cuántas personas han herido por encuentros completamente ilegales?

─No sé de qué estás hablando.

─Debo ser honesto, me sorprendió demasiado que lo vieras detrás del Drive-in. Pero eso simplemente consiguió que sienta curiosidad, es decir, ¿qué escondería la chica más linda e inocente del pueblo? ─Hera relamió sus labios mientras lo observaba sin decir ni una sola palabra─: Después de eso, también los había visto irse juntos del baile. Tenías un hermoso vestido rosa que se ceñía a tu cuerpo, te quedaba tan bien que sentí celos de pensar que él podría quitártelo y hacerte sentir en las nubes. ─sus declaraciones sin dudas estaban poniendo sus pelos de punta, maldijo mentalmente por no haberle dicho a nadie a dónde iba.

─¿Es eso lo que quieres? ¿Que confiese mis pecados frente a tí?

─Oh, claro que no. Me los sé de memoria. ─ella no lo veía, pero la persona frente a él sonreía─: Dijeron que no podía hacerte daño, y ahora teniéndote frente a mí, es difícil controlarme.

─Moriré, ¿verdad? 

─Hagámoslo divertido. Te daré diez segundos para que corras, si te encuentro, estás muerta. 

Él no pronunció otra palabra, Hera retrocedió lo suficiente como para perderse entre los árboles y que a él se le sea imposible continuar viéndola. La rubia corrió con todas sus fuerzas, evitando ser como las idiotas de las películas que terminaban en el suelo dos segundos después de haber corrido. Ignoró pensar en ello, simplemente quería salir de ese bosque para llegar a su casa y darle el abrazo más grande a su madre, queriendo sentirse segura en ella. Sus pasos podrían oírse, pero los de aquella persona no, no lo presentía, y no estaba segura de que estuviera siguiéndola. Continuó corriendo pero su cuerpo chocó contra otra persona, haciendo que ella se sorprenda lo suficiente como para soltar un corto grito que fue tapado por la mano de la persona, sus ojos se encontraron con dos orbes negros que conocía muy bien. FP Jones estaba frente a ella.

─¿Qué haces aquí?

─Tu hermana llamó, dijo que actuabas raro y que te dirigías al bosque. ¿Por qué estás aquí?

─Oh dios, no, vete de aquí, ahora.

FP no entendía de que hablaba, pero no alcanzó a decir algo cuando Hera tomó su mano aumentando sus pasos, lo suficiente como para intentar ocultarse detrás de grandes árboles que impedían que sus cuerpos fueran vistos. 

─¿Me dirás qué está pasando? ─Hera hizo una mueca.

─Solo prométeme que no enloquecerás.

─¿Qué has hecho? ─le preguntó, completamente serio. Hera balbuceó hasta que él arqueó ambas cejas, y ella jadeó.

─Me reuní con el Enmascarado. ─murmuró, y si FP hubiera estado en otro lugar habría soltado cientos de malas palabras que harían a Hera encogerse en su lugar.

─Eso fue completamente estúpido, Hera.

─Lo sé, pero él sabe de nosotros, ¿entiendes? No es algo reciente, viene siguiéndome desde hace más de siete meses, no puede verte aquí, puede hacerte daño.

─A tí también, pero si seguimos aquí nos encontrará. El bosque de noche es peligroso, Hera. Tengo que sacarte de aquí.

Él la ayudó a ponerse de pie y cuando ambos avanzaban se toparon con esa persona viéndolos fijamente. Su mano llevaba una arma que hizo a la rubia temblar. FP se colocó frente a ella en un intento por protegerla.

─Vaya, vaya. Dos pájaros de un tiro. ─Hera empujó a FP para que ella pueda ver al enmascarado.

─No, no lo lastimes, hazlo conmigo, ¿bien? tengo más culpa que él en todo esto.

─Si sales viva de ésto, yo te mataré. ─le murmuró FP y aunque Hera supo que no lo decía en serio, su cuerpo entero temblaba ante la idea de morir allí mismo.

─Él es todo lo que mi mejor amigo tiene y no puede perderlo. Por favor, no lo lastimes, ¿está bien? ─escuchó al enmascarado suspirar, pero levantó su arma en modo de respuesta.

─Lo dudo. Mejor a ambos.

Cuando estaba por dispararle a FP, Hera hizo lo que nunca imaginó que podría hacer. Se interpuso entre él y la bala, recibiendo el impacto de la misma en su estómago, bajó su vista allí mismo, dónde podía ver un gran círculo de sangre, ella jadeó llevando sus manos hasta allí para después caer de rodillas en el suelo. Parecía que aquello había tomado por sorpresa hasta al enmascarado, pues al ver la actitud que FP había tomado, a punto de tirarse sobre él para arrancarle la cabeza con sus propias manos, decidió correr como un cobarde, a pesar de que tenía un arma en su mano que lo volvía letal. Él se hincó frente a Hera para tomarla entre sus brazos.

─No cierres los ojos, ¿me escuchas? No pienses ni por un segundo irte de aquí, Hera Cooper. 

─F.P..... ─él negó, corriendo hasta donde había dejado su camioneta, maldijo un millón de veces al no poder encontrarla, y entre toda esa oscuridad, divisó su patente a lo lejos, por lo que sus pasos aumentaron para poder subirla en los asientos de atrás. Condujo a tanta velocidad que por un momento pensó que terminaría teniendo algún accidente.

─No te duermas, por favor, resiste un poco más.






















OMG, ARRIESGÓ SU VIDA POR FP, NO LO VEÍA VENIR, ahre

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OMG, ARRIESGÓ SU VIDA POR FP, NO LO VEÍA VENIR, ahre.

no lo iba a subir al capítulo hasta la próxima semana, pero en verdad quiero saber cuáles son sus opiniones, soooooooooooo, comenten abajo que les pareció el capítulo y quién creen que es el enmascarado que le disparó!!! 

BACK TO YOU, (riverdale) [#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora