BACK TO YOU, (riverdale) [#2]

CHAPTER SIX

Hera despertó con el sonido de su celular, avisándole que había ingresado un mensaje en su bandeja. No quiso ver quién era, anoche la había pasado tan mal con aquel mensaje de un número desconocido que hasta terminó soñando con eso.

Vió la hora, marcaban las seis y media de la mañana, su ceño se frunció mientras se ponía de pie para dirigirse hacia su armario. Aquel día iría a ver a los serpents pero luego de salir del colegio.

Su celular sonó nuevamente, teniendo ahora más de un mensaje. Se sorprendió, aún era demasiado temprano como para que estén escribiéndole. Sin embargo, no planeaba verlos aún, se dispuso a buscar algo que utilizar para aquel día. Un suéter rojo que debería llegarle a la altura del ombligo, con sus mangas algo arrugadas y un jean negro liso, tiro alto. En sus pies se colocaría sus habituales botas negras.

Se vistió rápidamente y agradeció haberse bañado ayer por la noche, quedando limpia al acostarse. Su celular comenzó a sonar de nuevo haciendo que suelte un quejido y lo tomé, encontrándose con dos mensajes de Archie, uno de sweet pea y otro del desconocido.

Abrió primero el del pelirrojo.

Archie: Hera. ¿Qué tal tú cita?

Archie: ¿Aún duermes?

La rubia suspiró mientras se sentaba en su cama observando la pantalla.

Hera: Increíble. Reggie es divertido.

Hera: ¿Tú qué crees?

Salió de su chat para dirigirse hacia el de la serpiente sureña, aún no recordaba como fue que sweet pea consiguió tener su número.

Sweet pea: Esperamos verte por aquí hoy.

Hera: Luego de la escuela, Sweet pea.

No esperó a que responda algo, salió de forma inmediata y leyó el mensaje que tanto había temido leer, pensando que si dejaba de darle importancia, simplemente desaparecería pero se equivocaba.

Aquella persona insistía con los mensajes, enviándole, hasta ese instante, alrededor de cinco mensajes.

Desconocido: Si supieras todo lo que sé de tí.

Desconocido: Sé la razón por la que te fuiste a Francia.

Desconocido: Sé quién eres realmente.

Desconocido: Sé quienes te importan.

Desconocido: Pero debo admitir una sola cosa, eres difícil de comprender. Imagino que aún te duele que Jughead te ignore. ¿Qué ocurrirá si se entera en quién te has convertido?

Hera: Déjame en paz.

Desconocido: No, linda. Ésto recién empieza.

Hera sintió que la respiración se detenía y sus manos comenzaban a temblar. Si era una broma, era horrible quién sea que esté detrás de ello. Se puso de pie de forma inmediata, acomodó su cabello, guardó el celular en el bolsillo trasero de su pantalón, y sin nada más que hacer, salió disparada de su casa, sin siquiera saludar a su madre.