Sueño.

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Advertencias; Situaciones +18
Vocabulario vulgar e inadecuado.

Parejas: Stony (de momento)

¡Hola a todos! Bien, este es mi primer Fic respecto a esta pareja que me tiene totalmente enloquecida xD y de alguna manera tengo que sacarlos de mi cabeza, así que me puse a escribir esto y pues espero sea de su agrado :3


Capítulo 1;

El rítmico vaivén de sus caderas era fuerte y duro, el obsceno sonido de su pelvis chocando contra aquel voluptuoso trasero lo estaba haciendo enloquecer.

Enterró sus dedos en las majestuosas caderas para sembrar un ritmo aún más frenético, avisando que estaba a punto de liberarse, más al sentir que su acompañante estaba a la par de él, al sentir como su entrada se cernía más alrededor de su palpitante miembro le hizo soltar un gruñido grueso, mientras que el otro soltaba gemidos que le endulzaban magníficamente el oído mientras apretaba fuertemente las sábanas debajo de él hasta que sus nudillos se tornaban blancos por la fuerza ejercida.

-Dilo. - ordenó mientras lo embestía más duro, más profundo, tanto como la posición en la que estaban se lo permitía.

-¡Ah! ¡Por Dios!

Las lágrimas luchaban por salir a flote mientras se mordía el labio inferior con insistencia para no emitir más sonidos tan obscenos.

Con la mano derecha, y sin interrumpir su tan vanagloriado ritmo, el rubio recorrió la espalda del de cabello azabache de forma ascendente hasta que logro enterrar sus majestuoso dedos elegantes en su melena y tirar levemente de ella hacia atrás de forma demandante, estableciendo quien era el que llevaba el ritmo.

-Di mi nombre. - exigió con voz ronca, y con cierto toque de molestia a la vez.

No estaba para juegos, quería escuchar su nombre salir de aquellos labios color durazno mientras las lágrimas amenazaban con recorrer ese hermoso rostro que hace unos minutos atrás vio manchado con su semen. Deseaba escucharlo, y no se quedaría con las ganas, así que al no obtener más que un gemido contenido como respuesta, volvió a jalar la melena azabache, arrancándole uno más fuerte que no pudo contener.

-¡Ah, Steve! - gimió el contrario complaciendo finalmente.

-Me gusta que gimas mi nombre, Tony.- susurró cerca del oído de su amante después de inclinarse sobre él.

Lamió el lóbulo de su oreja tras terminar la oración y le arrancó un nuevo gemido al mordisquear su cuello mientras retomaba su postura inicial, ambos estaban cerca de su liberación, podía sentirlo. Era el momento perfecto para marcar a ese dulce y excitante Omega, al que tanto había anhelado desde que lo vio justo después de tomar conciencia de su congelamiento.

Acercó su boca a su cuello de nueva cuenta, pero esta vez sus caminos brillaron en todo su esplendor cuando acomodó la mandíbula con fuertes intenciones de morderlo, de incrustar su marca de pertenencia en el castaño, para que supieran que era suyo y de nadie más.

Su olor de Omega embriagaba su olfato, cada vez se hacía más y más fuerte, si seguía así iba a perder el control.

Repentinamente una risa retumbó en sus oídos, sacándolo del trance en el que estaba, incitándolo a mirar hacia atrás.

Su pecho se arrugó al ver al azabache riendo con una persona que él no conocía mientras invadía su espacio al abrazarlo por encima de los hombros y a Tony parecía gustarle eso.

Sus pestañas ondeaban coquetas tras cada risa que emitía, se veía hermoso, pero el hecho de que estuviera de esa forma con otra persona que claramente no era él, su Alpha, le hizo hervir la sangre al instante pero ...

Destinado. [PAUSADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora