Destino Olvidado

CAPÍTULO IV

GUN

Llegue a Estados Unidos con un solo objetivo, crecer como persona y como profesional y lo iba a lograr.

Con el poco dinero que había ahorrado toda mi vida, logre alquilar un pequeño departamento por 3 meses, que no tenía ningúna división, mi habitación estaba con la cocina, sala y comedor, 4 en 1 y el pequeño baño solo tenía una cortina que lo separaba de lo demás.

Lo mejor era que a pesar de ser un lugar barato, tenía todos los servicios y estaba en un buen lugar, cerca de la universidad y de los centros comerciales.

Como sabía que no podía relajarme por que si el dinero se acababa antes de conseguir un trabajo, me las iba a ver negras con todo lo que necesitaba

Así que no acomode nada y fui directamente a buscar un trabajó, dejando currículums a todo lugar donde necesiten un practicante, y si era relacionado a lo que estaba estudiando mejor, económia.

Cuando por fin dejé mi CV en todos los lugares posibles, llene mi alacena para 2 semanas y ahí se fue todo el dinero que tenía.

Solo esperaba que en algún lugar pudiera empezar a trabajar, no importa el sueldo con que me dé para pagar el alquiler  del departamento me conformo.

Pasaron los días y no había respuesta de ninguna empresa, así que decidí buscar en otros lugares, como bares y restaurantes, ahora ya no me importaba donde desarrollarme como profesional, si no tener un trabajo que me dé de comer.

Dos días después empecé a trabajar en un bar como mesero, que solo me necesitaba de jueves a domingo de 6pm a 1am,  no era mi trabajo de ensueño, pero por fin ya tenía un trabajo.

Era domingo 9pm cuando me pidió mi jefe atender una mesa de la zona vip, algo que no tenía permitido, ya que sólo esa zona le correspondia a los de mayor antigüedad, y yo solo tenía casi 4 días trabajando.

Como fue un pedido de mi jefe no le tome importancia, tome los pedidos y los lleve sin problema, así fue toda la noche, yo solo estaba la pendiente de esa mesa y de ninguna otra.

Regresaba a la zona vip con otras dos botellas de licor para la mesa que atendía, cuando de otra unos chicos me empezaron a llamar y el encargado de esa mesa, los trataba de controlar, diciendo que cualquier cosa el les podria traer, solo escuche decir trae la pequeña zorra esa, queremos hablar con ella.

Quería romperles las botellas en la cabeza de ese tipejo, pero no podía darme el lujo de perder un buen empleo solo por unos borrachos.

Cuando eran casi la 1 de la mañana, salí del bar, a pesar que el bar cerraba más tarde mi jefe solo me decía ya es hora vete.

Tome mis pertenecías  y al salir me arrinconaron tres chico, los mismo de la mesa en la que me llamaron pequeña zorra

- hola nena, cual es tu precio, para que pasemos un buen rato.

- Que?

-No te hagas todos ahí tienen un precio y como eres nuevo, lo más seguro es que es algo alto, y más si aún eres virgen, o menor de edad, ¿Cuántos años tienes?

No entendía lo que decían, pero su agarre fue más suave y empezó a acariciar mi cuello, y cuando sentí su aliento alcohólico cerca de mi rostro lo trate de empujar, pero era más fuerte y sentí mi espalda golpear la fría pared.

Su boca tocó mi cuello trate de zafarme nuevamente, y gritar, no podía librarme de ellos, uno tocó mi entrepierna y como puede mordí a uno.

Estaban apunto de golpearme nuevamente cuando alguien retiró a uno y cayó al suelo los otros dos lo intentaron golpear pero no lo lograron

- ¿Que te pasa Mike? - Grito uno

- No, ¿¡Qué te pasa a ti Narapat!!!?, tratas de violar aún chiquillo, vete antes de que pierda la poca paciencia que tengo.

Flashbacks

Hola chico pobre que haciendo aquí ? Este no es tu lugar, o que  ¿quieres jugar un rato conmigo?, ¿Entonces es cierto que vendes tu cuerpo con los de la facultad, y vienes por nuevos clientes?

Fin flashback

- ¿Estas bién?, ¿Te hirieron? - comienza a buscar heridas en mi cuerpo, así que lo alejo bruscamente.

Pero me doy cuenta de que esta persona, es un chico alto con aspecto Tailandés, grandes ojos y una sonrisa hermosa que puede engañar a cualquiera

-  Si estoy bien, gracias, bueno me retiro - trato de caminar pensado alejarme de él.

- ¿Seguro estas bién?, ¿Quieres que te acompañe a tu casa?

Que curioso, de nuevo ese maldito juego, no importa si estás en Tailandia o en el fin del mundo, los chicos siempre utilizarán las mismas tácticas

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