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-¿QUÉ?-Gritó la güera de sorpresa.

-Como escuchas, Gaby.

Victoria le había contado todo lo que sucedió con César y lo que la tenía confundida, lo que estaba sintiendo por Él, lo que ya sabía que se instaló en su corazón pero que no quería admitir, los sentimientos que creyó que enterró hace años. Estaba aterrada y la única que la escucharía sin juzgarla sabía que sería su hermana. Por su parte, a Gabriela la dejó muda, si bien conocía del sentimiento que Victoria quería ocultar al mundo, nunca imaginó que se hubiera besado con Él. Eso le dejaba ver a la rubia que cada vez le costaba más negarse a su hermana sus sentimientos, sobre todo por la reacción ante sus celos. 

-No me lo esperaba. Digo, siempre supe que esto ocurriría pero nunca pensé que tú lo besarías-Victoria concentra su mirada en el café que estaba tomando, sentadas en el sillón de la casa de su hermana-¿Qué va a pasa ahora, Vicky?

-No lo sé, Gaby-Suspira-Realmente no lo sé.

-¿Tú quieres que pase algo más?

-Si... No... No puede pasar nada más, ambos estamos casados-Victoria lo dice más para convencerse a si misma que a su hermana.

-Pero por algo está pasando esto Vicky, se nota que las cosas en sus matrimonios no andan muy bien.

-¿Cómo le voy a hacer esto a mi familia? ¿O a su familia, Gaby? 

-Victoria, perdón que te lo diga, pero las dos sabemos que no te casaste con tu marido amándolo locamente, no niego que lo quieras pero fue porque te ofrecía la estabilidad que necesitabas, para ti y para tu hijo, y porque César estaba casado. Porque yo no dudo que si hubiera estado soltero seria Él con quien te hubieras casado. ¿U olvidas el día que te encontré llorando?-El corazón de Victoria comenzó a latir fuertemente, ¿Cómo olvidar ese momento?

Ya era un hecho. El fin de semana que Victoria tuvo descanso de las grabaciones y Omar se quedó con ella en el D.F. se habían comprometido. Toda su familía estaba presente, ya era un hecho. El sábado había organizado un almuerzo en la casa de su mamá y Omar le había entregado el anillo. A pesar de haber sonreido todo ese día, no estaba feliz, sentía como si algo dentro suyo se había roto.
A la tarde siguiente, Omar se marcha a Pachuca y ella aprovecha para irse con su hijo a la casa de su hermana. No quería estar a solas con sus pensamientos.
Luego de un rato de charla entre ambas hermanas, José Eduardo les pidió ir al cine. Ella no tenía ánimos de salir pero le insistió a Gaby para que se fuera con el niño, se excusó diciendo que no se sentía bien, que se iría a descansar, pero su hermana le pidió que la esperara ahí. Así que se sentó en la cama de Gabriela, luego de dar tantas vueltas, y las lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas, en plena soledad. Lloraba para limpiar su alma, por ese amor imposible que nunca será. Lloraba por lo que vendría, por el hecho de no encontrar la plena felicidad. Lloraba porque lo necesitaba...

-¿Vicky?-La llama Gaby entrando al cuarto, tomandola por sorpresa, no la había escuchado llegar. ¿Tanto tiempo pasó?-¿Estás bien? ¿Qué pasa?-Pregunta sentandose a su lado.

-No gaby, no estoy bien, nada está bien. No sé que es lo que me pasa pero miro el anillo y no me siento feliz como debería.

-¿No estás segura de casarte con Omar?

-No, no es eso. Es que... Ay... Estoy seguta que Él me va a traer tranquilidad, felicidad y la paz que necesito pero... Pero...

-¿Qué?

-No estoy segura de amarlo-Susurra.

-¿Qué dijiste, Vicky? No te escuché.

-Que no estoy segura de amarlo, Gaby-Dice y rompe nuevamente en llanto-Y lo peor de todo es que siento cosas que no debería estar sintiendo por otro hombre-Confiesa, por primera vez en voz alta.

-¿Quién es, Vicky? ¿Por quién estás sintiendo cosas?

-Por... Por...-La toma de las manos-Gaby, por el amor de Dios, te suplico que no digas nunca más ni una sola palabra sobre esto, que quede acá entre nosotras, ¿Sí?-Asiente con la cabeza, la güera a su lado-Prometeme que no vas a volver a mencionarme nada de esto.

-Te lo prometo... Pero ya, habla, no me tengas así.

-El hombre por el cual estoy sintiendo cosas es... César.

-¿QUÉ?-Gritó sorprendida.

-Sí, Gaby, como escuchás. Estoy sintiendo cosas que no quiero ni debo sentirlas.

-Eso no se controla Vicky-Dice con una sonrisa-¿Sabes una cosa? Yo lo sospechaba... Cada vez que me hablabas de Él se te iluminaban los ojos.

-Pero eso ya no importa Gaby, Él está casado y yo me voy a casar.

-Pero Vicky...

-Nada-Sentencia firme-Solamente abrazame, es lo que necesito-Y se tira a los brazos de su hermana para que la consuele.

-Ya lo sé Gaby, sé lo que te dije y lo que siento pero es un sentimiento prohibido, que debo parar, que no tiene futuro-La güera niega con la cabeza.

-Solamente te voy a decir que en esta vida es mejor arrepentirse por lo que se hizo que lamentarse eternamente por lo que no-Gaby toma un sorbo de café mientras sus palabras resuenan en la mente de Vicky.

.

.

-Esto no es de ahora, Chava-Le confiesa.-Te juro que luché incansablemente contra este sentimiento, empecé a sentir cosas por Victoria desde que estabamos en Abrazame muy fuerte pero jamás me animé a nada. Traté de borrarla de mi mente, cuando las grabaciones terminaron, pero fue imposible, me dí cuenta cuando la ví de nuevo-Suspira, recordando todo lo que pasó.

César se encontraba en la cafetería de Televisa con Salvador, la charla que ambos necesitaban, uno para desahogarse y el otro para sacarse todas las dudas que tenía. Notaba que algo sucedía entre sus protagonistas y amigos, más de lo que ellos mismos decían, y no estaba equivocado.

-¿Acaso estás enamorado, César, o es una simple atracción?-El cubano vuelve a suspirar.

-No lo sé, no sé que es lo que siento con exactitud. Me atrae y me gusta pero también disfruto mucho su compañía, me gustaría verla reír siempre porque tiene una hermosa sonrisa. Es muy intenso lo que siento, aunque esté confundido es lo único que sé, y me asusta Chava, porque nunca sentí algo así por nadie-Confieza con el corazón en la mano.

-¿Y qué vas a hacer?

-No lo sé, ni siquiera sé lo que ella siente ni lo que quiere.

-Solamente te pido, César, que no afecte las grabaciones de la telenovela, sé que ambos son profesionales y eso me tranquiliza pero tú me conoces, sabes que no quiero ningun problema ni murmullos-Aunque ambos saben que la boca no se la pueden tapar a la gente.

-No te preocupes, Chava-¿Qué otra cosa podía decir? Si ni Él mismo sabía que podía llegar a pasar.

La noche no fue sencilla para ninguno de los dos, daban vueltas en la cama, estaban intranquilos... Pensaban el uno en el otro, en todo lo que habían pasado juntos y lo bien que se sentían cuando estaban en mutua compañía. Se preguntaban porque el destino había sido tan cruel como para permitir que un sentimiento, más allá de la amistad, comenzara a gestarse entre ambos cuando era prohibido, tiempo atrás solo porque Él estaba casado y ahora por culpa de que ambos lo estaban.
"¿Qué van a hacer con ese sentimiento?" "¿Terminaran rindiendose o podrán escapar de él?" "¿Qué siente el otro?" Son las preguntas que rondaban en sus mentes.
Llenos de incertidumbres, se quedan dormidos, sin siquiera sospechar lo que el destino les tiene preparados...

Perdón por el tiempo que estuve desaparecida pero ya he vuelto... Espero que les guste. Espero sus votos y comentarios 😊

A pesar de todoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora