Narra Amelia:
Me despierto sintiéndome muy cansada como en mis primeros años de entrenamiento, intento levantarme pero un brazo en mi cintura me lo impide.
— Will tengo que ir al baño— digo un poco adormilada y este hombre no se mueve — ¡Will me estoy meando!—
Él gruñe me giro para verlo y es enorme mi sorpresa cuando veo que es Axel y no Will, trato de recordar lo qué pasó ayer entonces la muerte de Will.
Yo viniendo a la manada de Axel para enfrentarlo y después nada la ira me invade y lo empujo lejos de mi tirándolo de la cama, yo aun llevaba puesto mi vestido de novia eso es una buena señal.
— Que diablos... a buenos días hermosa— gruño.
— A mi no me digas hermosa pendejo— no quería cometer homicidio así que camino hacia la puerta pero Axel se interpone en mi camino.
— ¿A donde vas con tanta prisa mi hermosa?— remarca las últimas dos palabras, lo tomo de cuello y le doy con mi cabeza en su cara él cae al suelo sosteniéndose la nariz que sangraba.
— A mi casa imbecil— abro la puerta y me encuentro con un guerrero este inmediatamente se pone en posición de ataque.
Lo tomo del cuello y lo lanzó hacia la ventana atraviesa la ventana, bajo corriendo las escaleras un puto ejército está rodeando la casa.
— No podrás salir— dice aun sosteniendo su nariz yo sonrió de lado.
— Gracias por el reto— abro la puerta y me transformé para pelear con todos esos inútiles pero entonces veo franco tiradores en los árboles tienen pistolas de sedantes, gruño y vuelvo a dentro, pero solo es para planificar.
— ¿Desayunamos?— pregunta como si nada.
— No quiero de tu comida— la verdad tenia hambre pero prefiero morir de hambre a comer algo que posiblemente me deje siendo su títere de él.
— Vamos tienes que comer te juro que no le pondré nada—
— No te creo— voy hacia la sala me siento en el suelo y comienzo a idear un plan, podría salir en la noche, los guerreros en algún momento tienen que descansar ¿no? estaré pendiente y entonces saldré, me iré muy lejos ya que mi manada no es una zona segura.
Si tengo que pasar el resto de mis días huyendo bien que así sea, o también podría pedir la ayuda de una bruja para deshacerme del vínculo que tengo con Axel, paso un rato y la puerta de entrada se escucho, el olor de una humana me llego.
— ¡Axelito bebe! ¡He vuelto!— argggg Diosa Luna deja muda a esa mujer, su voz es tan irritantemente chillona que juro que me romperá los tímpanos.
Oí a alguien acercarse y por el olor se que es Axel, me tapa la boca, me hace señal de que me quede callada yo logro soltarme y en ese momento veo a la humana parada en la entrada de la sala viéndome como si quisiera matarme.
— ¡¿Que haces con esa zorra?!— me tapo los oídos.
— Mira estupida a mi nadie me dice zorra, ni que fuera tu— la señalo, quiero golpearla.
— Bebe me está diciendo zorra— le chilla a Axel.
— Mi novia solo dice la verdad— ella me mira con odio.
— A mi no me veas así zorra yo no soy nada de él, es mas te lo regalo y si quieres hasta moño le pongo— Axel me miro dolido.
— ¿Entonces por que están juntos?—
— Él me retiene aquí en contra de mi voluntad— lo acusó, aun que se que no importa.
— Bebe libera a la gata esa para que tu y yo seamos felices—
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Mi mate mi peor enemigo 🐺
LobisomemAmelia: ¿Quien podría pensar que su mate sería su peor enemigo? Yo al menos nunca lo imaginé pero ahora que hago estoy congelada en sus brazos, no digo nada, no me muevo, el me ha reclamado justamente hoy en la escuela, todos nos mirarán con alegría...