Capítulo 18:
—Por favor, no vayas a esa cita—pide.
Niego con la cabeza.
—Chase me matará sí no consigo su video juego—dramatizo.
Él sonríe de medio lado.
—Yo no dejare que te pasa nada—.
Río por lo bajo.
—En serio, tengo que ir—lo miro seria.
Él gruñe y luego suspira.
—Bien, vas a esa cita. Sólo de amigos—pone énfasis en “amigos”
Lo abrazo y respiro su aroma, muy masculino.
—¿Qué te parece después de esa cita—gruño y eso parece ponerlo feliz—, me recoges y vamos por un lado?
Él me besa la cabeza.
—Sí—sonríe.
Tocan la puerta.
—¡_____!—llama Darwin.
Me levanto con cara de zombie.
Después de que me hice pasar por él no había hablado de nada, ni siquiera me lo había topado. Mierda, que vergüenza.
—Vuelvo en un momento—le doy un pequeño beso en los labios a mi novio y salgo de mi habitación.
Cerré la puerta detrás de mí y encare a Darwin. Me sonrojo.
—Hey…—muerdo mi labio mirando hacia otro lado y añado
: —Lo del otro día fue una equivocación, sólo quería hablar contigo de…, de algo.
Él ríe por lo bajo.
—Fue muy gracioso, en serio, pero bueno, no importa—hace un ademán con su mano—: Y ¿De qué querías hablar?
Mierda, esto no debía de pasar, él sólo tendría que haberse ido y dejarme con mi novio en paz.
¡Quiero estar con Niall! Qué está encerrado adentro esperándome.
—Bueno…—empiezo—Te vi con una chica. ¿Es tu novia, cierto?
No esperaba eso, se sonroja tanto que me dan ganas de reír en su cara.
—Hum… yo…—tartamudea—Sí, pero por favor, no le digas a Travis.
Lo miro apenada.
—Estaba con él cuando te vimos con ella, lo siento—pongo mi mano en su hombro—Pero Travis está muy ocupado, por ahora no te molestara. ¿Cómo se llama ella?
Él se vuelve a sonrojar y me parece tierno.
—Cassie, bueno, Cassandra Goulding pero le digo Cassie—se sonroja más fuerte.
—Es muy lindo de tu parte—digo y me vuelvo a mi habitación.
Me tiro encima de Niall. Se ríe.
—¿Qué hacías? —pregunto poniéndome a su lado.
Él niega con la cabeza y me sonríe enseñando todos sus dientes.
—Nada, sólo pensaba—murmura mirándome.
Giro los ojos.
—¿En qué? —pregunto sin darle, realmente mucha importancia.
Me agarra la mano y empieza a jugar con mis dedos.
—En ti—responde.
Me sonrojo de inmediato, ahora mismo entiendo a Darwin y no me quiero reír, quiero pegarme en la cabeza muchas veces.
