Narra Niall:
No iba a ir al baile. Había roto con Crystalle, ni siquiera la quería un poco. Los ojos verdes/azulados de _____ siempre estaban ahí, mirándome y sonriendo, enseñando esa hermosa hilera blanca de dientes que tenía.
—¿Por qué no vuelves conmigo? —le pregunto a _____ aunque no este aquí.
Mis ojos se vuelven acuosos. Yo no quería golpearla.
—Yo no quería golpearte, cariño—susurro.
Quiero que este aquí.
Dispuesto a recuperarla en el baile de graduación, me visto, no con un traje, con unos pantalones, una camiseta, una chaqueta y unos zapatos. Iré a tenerla nuevamente a mi lado.
Sonrío ante las palabras, imaginándola abrazándome, besándome, sonriéndome.
—Queriéndome, de nuevo—susurro.
Corro hacía mi auto negro y manejo hasta la preparatoria. Seguramente ya está por acabar.
Cuando entro al salón suena una música lenta. Todos me miran extraño, seguramente por mi vestimenta pero sólo la miro a ella, riendo con Finnicky.
—En serio, fue genial que ese señor nos ayudará a traer el auto—escucho como ella le dice a Finnicky.
Me acerco a ellos y carraspeo, nervioso.
—¿Puedes…—pauso tratando de que mis lágrimas no salgan—, puedes bailar conmigo?
Mi voz es como un hilo, se quebrará en cualquier instante.
—Claro que ella irá—Finnicky la empuja hacia mí.
Ella choca contra mi pecho.
—Lo siento—susurra alejándose un poco.
Agarro su mano y la acaricio. Sonrío a Finnicky por lanzarme a _____.
Cuando se acaba la canción lenta empieza otra; I Know You Care de Ellie Goulding, la banda que canta ahora mismo están haciendo un cover.
Empiezo a moverme con _____ al ritmo de la música. Me pongo nervioso a la mitad de la canción, ella apoya su cabeza contra mi pecho; sonrío.
—_____—la llamo nervioso.
Sus ojos se conectan con los míos, ella sonríe.
—Dime—pide.
—Lo siento—suelto—, lamento haberte golpeado y estar sin ti es como si el vacío me envolviera vivo, como si me acuchillaran y no dejo de pensar en ti en ningún minuto, quiero que estés conmigo, quiero estar contigo. Dime—pido casi en llanto—. Dime, ¿Qué quieres que haga? Quiero que me perdones y volvamos a ser los de antes e incluso podemos invitar al metido de Finnicky a todas nuestras citas. Podemos ser felices, nuevamente. Te regalaré flores todos los días, chocolates, CD’s de tus bandas favoritas, buscaría Justin Bieber y le pediría que te mande saludos, y te siga en Twitter. Te metiste bajo mi piel y no puedo sacarte, te quiero, ¿es tan difícil de entender?
Se le escapa una lágrima, la seca con facilidad.
—Yo…—dice con voz ronca.
Siento como muchas lágrimas resbalan por mis mejillas.
—Sólo una última oportunidad y prometo hacerte feliz como jamás lo ha sido alguna chica—le prometo.
Ella suspira y me abraza.
—Te quiero, Niall—susurra contra mi pecho.
Mi corazón empieza a latir con mucha fuerza.
—No me…—susurro entrecortadamente—. ¿No me dejarás nunca?
Niega con la cabeza. Choco mis labios con los suyos.
—Me haces tan feliz, cariño—mascullo.
Ella me sonríe.
—¿Quieres irte de aquí? —le pregunto.
_____ asiente con la cabeza, los dos salimos del salón para dirigirnos a mi auto negro.
Nos trepamos y empiezo a manejar; mis manos sudan.
—Gracias—le digo a medio camino.
Ella sonríe.
—¿A dónde vamos? —pregunta.
Sonrío de oreja a oreja.
—Es secreto—le digo.
Ella suelta una pequeña risa para luego seguir viendo la ventana, agarro su mano, la atraigo hacia mi boca y beso sus nudillos.
—¿Jamás me dejarás de nuevo, cierto? —pregunto.
—Solo si no haces nada malo—responde.
—Te juro que no lo haré—prometo.
