Adolescencia

171 41 6
                                    

     Los tres amigos se encontraban ahora en uno de los miles de lobbies que había en ese gran castillo. El castaño y el invitado conversaban acerca de un nuevo videojuego mientras que el piel pálida cubierto por una manta color azul tomaba con disgusto su chocolate caliente, -no porque odiara el chocolate caliente-, sino porque esta situación le producía una especie de malestar. Quizá aún no se acostumbraba al tener cerca al amor de su vida y al molesto chico que ahora le empezaba a agradar.

     Pero justo en ese momento recordó algo importante, antes de llegar a esa sala él había pronunciado -dentro de su cabeza-, algo así como que odiaba que alguien le quitará a "su Jin". Recordar esas palabras hizo que el rostro del pálido tomará un color rojizo que llamo la atención del mayor

—¿Estas bien, Suga?—.Jin se acerco apresurado a su hermanito colocando su mano y acercando su rostro a tan solo unos centímetros de distancia del pequeño Min Yoon Gi, esta acción fue suficiente para que todo su rostro enrojeciera por completo —.Estas caliente ¿quieres que vaya por un té o medicina? Parece que estas por enfermarte

     La preocupación del castaño era sincera, después de todo, si su pequeño hermano se enfermará sería nada más que su culpa, él había tenido la idea de salir a jugar con la nieve porque Suga le había mencionado que nunca había jugado bajo esa capa blanca que cubría el patio. 

—Estoy bien—.Abruptamente quito la mano del mayor cuando ya no pudo con la presión que sentía en su pecho, el pequeño Hoseok se dio cuenta de eso y dentro de su cabeza las suposiciones se hicieron presentes. 

—Quizá solo necesite un poco más de calor, Jinnie, ¿por qué no lo abrazas?—.Sugirió el travieso solecito. 

—¡No necesito nada de eso!—. Contesto el más bajo ardiendo en calor, observo con nerviosismo al más alto dandose cuenta que quizá pudo lastimarlo con sus palabras, este último solo giro a otro lado, tratando de ocultar su rostro sonrojado, abrazar a su hermano sería... sería increible, los abrazos eran una muestra de amor y cariño y de Jin solo podían emanar sentimientos tan puros como esos 

—Que aburrido... ¿entonces te lo doy yo?—.Hoseok solo quería ver acción, después de todo, ya había notado como era Yoongi cuando estaba enamorado y sin duda, era lo más gracioso del mundo, ya había encontrado una manera de entretenerse. 

—No quiero, idiota—.No era la primera vez que Yoongi insultaba a Hoseok, pero si la primera donde no se disculpaba por sus groserías. El de amplia sonrisa se abalanzo sobre él y termino abrazándolo a la fuerza. Jin diviso a su amigo y su hermano con una sonrisa juguetona, Hobi jalo del mayor para terminar todos tirados en el suelo mientras atacaban con cosquillas. 



Ese día fue de los más divertidos que puedo recordar estando los tres, ¿qué edad teníamos? quizá unos doce o trece años, fue nuestra época más feliz, al menos, hasta que inicio mi adolescencia y mis hormonas empezaron a sabotear mis actos. 

Oye Jin, ¿tu me amabas desde antes?, créeme que no fue solo el físico lo que me gustaba de ti, amaba todo, absolutamente todo de ti. 




[...]


—Yonnie, ¿a ti te gusta alguien?—. La pregunta de Hoseok retumbo en los oídos de un joven de ahora quince años que se encontraba escribiendo una carta a su hermano político que había decidido entrar a un internado para reforzar sus conocimientos. 

No—. fue su respuesta inmediata, pero ¿por qué no se sentía del todo sincera? 

—Umh, ¿a Jin hyung le gustará alguien?—El pecho del albino retumbo de una forma no tan agradable—. ¿Crees que se haya enamorado en ese internado de alguien? Hyung es muy guapo, no dudo que una o dos personas o quizá muchas, estén sobre él

—Estas consciente de que asiste a un internado de solo hombres, ¿no es así?—.Refuto el pelinegro mientras seguía escribiendo

—Y eso ¿es importante?—Yoongi giro su vista a su amigo, este último se encontraba acostado jugando con una pelota mientras miraba el techo—. Quiero decir, uno no decide de quien enamorarse, Jin podría haber tomado interés por alguien de su mismo sexo... 

¡Imposible!—.Yoongi había levantado la voz, acción que hizo que Hoseok dejará caer la pelota

—¿por qué sería imposible?—.Las intenciones de Hoseok eran de mera provocación, no quería dañar a nadie, solo empezaba a sentirse aburrido de que nada sucediera aún.

—Por que Seok Jin no puede ser un asqueroso homosexual, ahora él es el primero en la lista para trono, no puede arruinar su imagen 

—Con que "asqueroso homosexual", ¿eh?

—Así es, así que no hagas suposiciones erróneas, mi padre ya decidió su futuro y nadie puede cambiar eso

—Que lata—.Hoseok recogió su pequeña pelota de tenis y siguió en su juego—Oye Yoongi, ¿alguna vez te has masturbado

La pluma del albino se trozo al escuchar tremenda pregunta, sus mejillas se sonrojaron tanto que Hobi podía sentir el calor que emanaba el pelinegro. 

—¿Eso quiere decir que no?—.Hoseok sonrió de oreja a oreja, parece que había dado justo en un punto importante para el albino. 

—Eso no debería ser de tu incumbencia, tarado—.El rostro de Yoongi estaba ardiendo de vergüenza 

—Somos amigos, no deberías sentirte así de apenado, no le diré a nadie. Deberías intentarlo, es una forma para aliviar el estrés, una sensación refrescante que invade todo tu cuerpo 

—No se cómo hacerlo—.Confeso el pelinegro. 

—Solo tienes que relajarte y pensar en alguien que te guste mucho, su voz, su sonrisa, imagina cómo se vería si ambos estuvieran juntos, su piel, su lengua...—

—¡Suficiente!—.El más bajo estaba rojo hasta las orejas, tomo sus libros y salió corriendo 

Hoseok había logrado su objetivo, disparar las hormonas del albino. 

Protocolo realDonde viven las historias. Descúbrelo ahora