Jamás es imposible [2Wish]

Departamento 2

—¿Perth? —le hablé a mi amigo.

No contestó, solo me miró enojado, haló consigo a un sorprendido Saint que ni tiempo tuvo para despedirse, entraron al ascensor que todavía permanecía abierto.

La puerta del ascensor se cerró antes de poder replicar algo.

¿Qué carajos le sucede a Perth?

Creía que me había quedado solo, pero noté que había un tipo observando todo lo acontecido desde el umbral de la puerta de los letreros, estaba comiendo palomitas de maíz de un tazón grande que sostenía en una mano.

—Vaya que son dramáticos —dijo mientras masticaba, hablaba como si acabara de presenciar alguna escena de una película en el cine —Esperaba más acción, pero en fin, seguro lo solucionarán de una forma aburrida como siempre. —suspira de manera exagerada, luego se mete un puñado grande de palomitas a la boca.

El tipo tenía orejas grandes y ojos ligeramente saltones, estaba descalzo y en pijama.

No quise comentar nada porque no entendía nada de lo que estaba pasando, tenía mis propias preguntas dándome vueltas. ¿Por qué Perth se llevó al abogado de Mean de esa manera? ¿Qué demonios hace Perth aquí?

—Qué pasa hermano. ¿No te vas a presentar? —me dice el sujeto de las palomitas, se aproximaba con su tazón —¿Acaso no oyes? —me pregunta mientras frunce el ceño y se mete más palomitas a la boca, me observa fijamente y con desconfianza —Siento que te he visto en algún lado.

—No lo creo —le digo rápidamente.

—Mmmm... ¿Y que haces aquí?.

—Me estoy mudando.

—¿Con el permiso de quién? No tenemos cuartos disponibles —dice mientras me mira con más desconfianza.

—No lo sé, por una maldita clausula o algo por el estilo, trabajaré en Nahm desde mañana.

Sus ojos se vuelven más grandes de lo que son, me asunto un poco. Al parecer está sorprendido.

—Entonces debes ser Plan Rathavit, vaya no te recordaba rubio. —dice confundido, lo que es perturbador es que al parecer me conoce.

Yo no afirmo ni desmiento nada.

Me mira de arriba abajo y da una vuelta alrededor mío con la mano apoyada en el mentón.

—Mmmm no esta mal, pero aún dentro del promedio —comenta cuando termina su inspección.

Yo hago lo mismo que él, doy una vuelta alrededor suyo.

—Tienes salud, es lo importante. —comento luego de imitarlo.

—Al menos no eres tan aburrido como el enano... Soy Yacht Surat.

Me extiende la mano, intento estrecharla, pero él la quita a último momento y la lleva al tazón para sacar más palomitas.

Ruedo los ojos. 

—¿Te opones al porno? —pregunta repentinamente, mientras mastica más palomitas, lo miro incrédulo. 

—¿Es necesario responder a eso? 

—De lo que respondas dependerá tu permanencia aquí —dice con seriedad.

Decido responder luego de pensarlo un poco.

—No me opongo al porno, pero si me opongo a ser protagonista de uno.

Parece analizar mi respuesta detenidamente, se lo toma realmente en serio.