___ fruncio el ceño, ¿porque el preguntaria algo como eso?, acaso ¿el sabia algo de ella?
Era absurdo que el supiera su pasado si nisiquiera la conoce del todo. Habra leido algo o alguien le habra dicho algo.
---Yo...No tengo ninguna conexion con esa mujer, Iceburg-san--- hablo ella mientras aun le daba la espalda, mirando hacia el cartel de la, ahora, mujer.
El mayor suspiro, ___ penso que se habia rendido pero luego, el hombre se hacerco a ella, la voltio haciendo que lo mirase y luego toco su mejilla.
Unos minutos habian pasado, la cara de la chica no era reconocible, estaba mas que impactada.
Ella sabia que el no mentia, Sabia que ella leia Poneglyph, El sabia que ella venia de Ohara, gracias a eso la apodaron Niña Demonio y le pusieron una Recompensa.
Pero lo unico que no sabia era el porque de los Arqueologos de Ohara fueron Masacrados tanto ellos como los habitantes que no tenian nada que ver.
___ Estupefacta y frunciendo el ceño, no podia corregir lo que ya estaba corregido. Era hora de hablar ese tema con alguien, pero aun no era el momento y el no era el indicado.
De repente, tocaron la puerta de la habitacion, ambos voltearon a ver al mismo tiempo, se escucho un "Pase" de parte de Iceburg.
Solo ___ se dio cuenta que fue una mala idea.
El que habia accedido al cuarto fue nada mas ni nada menos que el mismisimo Azabache de ojos cafe.
Quien al verla a ella, aqui en la mansion de su "Jefe", en su cuarto y a solas, era lo ultimo que queria observar.
Fruncio un poco el ceño, ___ no lo paso por desapercibido. Tambien puso una mueca de molestia.
---¿Deseas algo, Lucci?--- pregunto el Peli-Azul a el Azabache quien habia cambiado su rostro.
Aun estaba de encubierto, cualquier movimiento en falso debe ser anulado.
---Iceburg-San, tengo dos preguntas, Purrojo!--- hablo su pequeña y tierna paloma.
___ queria reirse pero pudo mantener la compostura.
---Nmaa~...Pues dimelas---
Lucci dio un ultimo vistazo a la chica y su mirada volvio a Iceburg.
---La primera era de Kalifa, preguntaba si ya era hora de hacer lo que no a hecho, Purrujoo!!--- hablo de nuevo su ave, esto se iba a poner interesante.
---Nmaa~...Eso lo hablare con Kalifa cuando este con ella Ahora Estoy...--- fue interrumpido por la misma ave.
---La otra pregunta era mia, y ¿Porque esta mujer esta a solas con usted, Iceburg-san...Purrojo--- pregunto una vez mas la ave.
Ambos presentes estaban un poco cofundidos pero mas Iceburg, quien aun no le veia el problema.
Iceburg iba a hablar, pero ___ se le adelanto.
---No te preocupes, Carpintero, ya me iba a retirar, fue un gusto hablar con usted señor Iceburg--- dijo para despues hacer una reverencia, pasa a lado de Lucci tranquilamente y salio de la puerta de la habitacion.
Dejo a los dos hombres solos, protestando en su interior cualquier excusa.
Cuando ___ iba bajando a siguiente piso por las escaleras. Se recosto a la pared y penso en lo que acababa de pasar.
Recordo el tiempo que pasaba desde que era pequeña con la Niña Demonio. Ella no recuerda haberla conocido como un Demonio, Pero si como una Dulce y tierna Niña que solo buscaba el amor y amistad.
___ se identificaba con la Niña. Ojala supiera donde estaria, con esa recompensa deberia estar escapando del mundo.
Sus pensamientos fueron esfumados cuando una mano fuerte y rapida, choco con su boca, tampandola fuertemente que ni ella se dio cuenta para actuar rapido.
Cuando abrio los ojos, tenia una sensacion horrible de llorar.
Lucci quien la tenia de una manera incomoda, era la primera vez en tantos años que ___ comenzo a tenerle miedo a una persona. Ya no era Amor, solo era miedo y rencor hacia el joven.
Lucci estaba frunciendo el ceño, mientras precionaba con fuerza la mandibula de la chica, con la otro mano sujetada al brazo de ella.
Sus lagrimas estaban apunto de salir, despues de unos segundos mas de estar asi que incluso sus respiraciones eran mas agitadas.
---Escucha, Ya no quiero ver que te estes metiendo en mi camino, no vuelvas a acercarte a Iceburg, sabes lo que causarias si el se llegara a enterar de que somos sus Enemigos. No quiero optar por lastimarte, ___. Asi que ya estas advertida--- despues de eso, termino por soltarla.
La chica limpiaba un poco su boca mientras tocaba sus mejilla. De repente, un fuerte golpe llego a la pared donde estaba ella recostada, esta se asusto un poco por el brusco acto.
Penso que el iba a tocarla en cualquier momento pero no fue asi. Lucci aunque no lo pareciera, el respeta al que se lo merece, y el decidio que a ____ tambien se le tenia que respetar.
Cuando su mano opto por ponerse en la pared, Acorralando a la chica. Ella solo frucio el ceño cada vez mas.
Ya lo odiaba, era el peor, ya no sabia que hacer, si hubiera sabido su existencia antes, nunca hubiera aceptado entrar al CP9.
Lo miro fijamente como el a ella, ya no podia soportar lo mucho que ya odiaba a ese hombre, y el no podia soportar lo mucho que la Ama, y de cerca pudo ver esa barbara cara donde la Valentia y el Temor hacian de las suyas.
Pero aquellas palabras hicieron su ultimo acto, el romper un corazon.
---Te Odio, Rob Lucci--- dijo para despues mover su mano recostada en la pared que le impedia el paso para seguir bajando las escaleras.
Impactado se quedo, mientras veia a la nada. Esas palabras no eran la que el esperaba.
Esas palabras no eran la que el queria. Ahora su Amor se habia roto en mil.
Para aparecer uno mas fuerte donde incluso se volveria Loco por ella. Ya estaba Loco por ella.
Eso que acababa de pasar era un simple ataque de celos, pero Ella ya estaba siendo atacada por este desde que llego a la organizacion.
Lucci se sento en las escaleras que estaban frias, por la llovizna que hacia afuera.
Era primera vez que Lucci sentia un sentimiento asi como este.
Estaba Loco y Excitado por ella. Ya su Locura y Excitacion no era tanto por Matar.
El queria mas, El la queria mas.
Y no se iba a dejar perjudicar por un simple "Te Odio". El queria mas.
Aqui es donde todo comienza a dar forma a su nueva mision de convertirla en su Conejillo De Indias.
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♡《Mi Conejillo De Indias》♡ /σɳε ρเεcε/1er Libro
Fanfic--Yo Soy El Jefe Aqui, tienes Que obedecerme!-- El mayor la sermoneo haciendo que esta reaccionara de una manera brusca, soltando su mano atada por la mano de este. --¡Puedes ser el jefe porque asi lo decidio el gobierno, pero no eres jefe de mi vi...