Mateo
- Vieja de mierda.- Se quejó Valentina después de que la profesora de literatura nos dejase un trabajo de al menos diez hojas para hacer hasta la semana siguiente. Manuel y yo soltamos una carcajada mientras recogíamos las cosas y ella se ponía la mochila.
- Mirá el lado bueno, ha dicho que no nos pondrá deberes para las vacaciones de invierno.- Se encogió de hombros mi amigo y yo le di la razón con un gesto.- Eu, voy a hablar con Flor, ¿vale?
- ¿Hablás con ella?- Preguntó Valen claramente sorprendida. El chico negó con la cabeza colorado y se rascó la nuca.
- Le gusta desde primer año, pero nunca consigue hablar con ella más de dos minutos sin cagarla.- Expliqué llevándome una reprobatoria mirada de Manuel.
- Te la puedo presentar en condiciones.- Afirmó la chica mientras salíamos del aula.- Quiero decir, es amiga mía.
- Uh, dale, boluda.- Sonrió él y chocaron los puños.- Igual me voy yendo, que tendrán cosas que hablar.
Dejó un beso en la mejilla de Valentina y me chocó los puños antes de colocarse bien la mochila y echar a correr en dirección contraria a nosotros. Yo le miré irse y rodé los ojos. Era un boludo.
- ¿Vos también te vas a escapar?- Preguntó la chica agarrándome las manos y haciéndome mirarla.
- Obvio que no.- Sonreí observando su sonrisa.- Pero lo voy a hacer si me vas a mirar así sin dejarme chaparte delante de todos.- Bromeé con una ceja alzada.
- ¿Quién te dice que no te dejo?- Rebatió y rápidamente junté nuestros labios en medio de todo el quilombo de los pasillos de la escuela.
Sonreí sobre sus labios cuando los separamos y al girarme me di cuenta de que había mucha gente mirándonos sorprendida.
- ¿Valentina?- Escuché a Tomás preguntar mientras se hacía paso entre la gente para llegar a nuestro lado.
Me mordí el labio preocupado mientras la chica se giraba para mirarlo y me sentí fatal. Sabía que Tomás lo estaba intentando con ella y aún así me había metido en medio.
- ¿Qué querés, Tomás?- Inquirió ella cansada, sin soltar una de mis manos.
- ¿Que qué quiero? Decime vos lo que querés, porque lo estamos intentando y te estás chapando a Mateo.- Exclamó llamando la atención de todo el mundo. Noté como me sonrojaba al tener todas las miradas sobre mi, pues por muy acostumbrado que estuviera a ser el centro de atención, en ese momento solo quería que a tierra me tragase.
- ¿Que lo estamos intentando? No estamos de novios.- Replicó ella.- Que yo sepa puedo chapar con quien se me cante. No seas controlador.
- ¿Controlador? No es mi culpa si sos una vendida.
- Bueno, no le hables así, ¿Eh?- Intervine adelantándome un paso y poniendo mi brazo libre entre los dos.
- ¿Y a vos quién te dijo nada, pendejito?- Cuestionó mirándome a los ojos. Le sostuve la mirada, no iba a intimidarme simplemente por ser más grande que yo.- Andá a comerte a otra.
- Déjala en paz.- Hablé calmado y él me pegó un empujón, haciéndome tambalearme que enseguida le devolví.
- ¡Eh, Matu, ya basta!- Exclamó Valen cuando levanté el puño para golpear a Tomás.- Dale, vámonos.- Dijo agarrando mi brazo y yo miré una última vez al chico, que sonreía burlón.- Y vos te podés olvidar de mí, sos un controlador.- Le espetó a Tomás haciendo que la gente que miraba soltase una exclamación.
Ahora fui yo quien sonreí antes de caminar con Valentina lejos de la aglomeración de alumnos, he empezaba a dispersarse con la llegada de algunos profesores.
- ¿Venís a comer conmigo?- Pregunté cuando salimos a la calle.
- Eh... No, tengo que hacer cosas. Nos vemos mañana.- Se despidió dejando un beso en mi mejilla y la observé confundido mientras se alejaba calle abajo.
perdón por desaparecer, pero últimamente no me gusta nada de lo que escribo :(
aclaro que flor es mi esposa uruwhyan y que manu es el amor de su vida. ahre.
