Life Love • MarkHyuck •

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Mark descubrió un cierto cariño hacia las flores, le hacen recordar cuando las compró por primera vez para un chico que le había robado un día antes, el recuerdo siempre le hace sonreír, porque recibió un golpe gracias a su inocente acción. Es por eso que compra rosas cada que puede hacerlo, y las regala o simplemente las deja olvidadas, para muchos es un desperdicio de dinero, y lo es, pero a Mark le gusta desperdiciar las cosas solo para traer a su mente los valiosos momentos. Teniendo 25 años y soltero no hay mucho en lo que pueda irse su dinero.

Las flores ese día son incluso más hermosas que otras veces, tal vez porque Mark está de buen humor o porque ahora sabe en que parte del mundo se encuentra Donghyuck. La razón no le interesa, solo se concentra en sonreír mientras emprende camino fuera de la florería. Y estando tan concentrado tropieza con alguien quien le habla de inmediato.

—¡Mark!— La chica es tan alegre que le aturde un momento. La enfoca, pero a su cabeza no llega ningún recuerdo de la mujer frente a él. —¿me recuerdas? — Esta tentado a negar, pero solo consigue sonreír. —Soy la niña a la que le regalaste un montón de dulces cuando te fuiste de la casa de tu abuela... por la que lloraste en el auto— Ella habla con alegría moviéndose con una curiosa mímica —Tu primer beso.

—Jia Li.

La chica se ríe mostrando una radiante sonrisa. La recuerda, aunque ella narra las cosas de forma diferente a como Mark las sintió. Jia Li siempre fue una linda niña, delicada y femenina, los años pasaron y ella seguía siendo preciosa.

—¿Recuerdas que saliste corriendo apenado? ¡eras tan pequeño! —Mark sonríe y asiente. —Disculpa, quizás te estoy retrasando, es bueno volver a verte, tu madre sigue hablando a casa de la mía. Deberíamos salir juntos un día, bueno, si es que tu novia...

—Oh, no tengo novia. Las flores son... me gusta comprarlas— La sonrisa de Jia Li no cambia, y Mark tiene una pequeña esperanza. —Puedes quedártelas si quieres.

Ella las acepta con alegría. Mark puede ver reflejada a la pequeña niña que tanto le desagradaba de pequeño, a la que odió por un tiempo y quien fue su primer beso. Sonríe, porque dejara que las cosas fluyan.

Prometen que se volverán a encontrar en algún momento, y Jia Li le entrega su número telefónico. Esa misma noche Mark decide hacer una llamada.

Y un año después consigue casarse con quien fue su primer beso.