|Cap ₁₅|Iɴᴇsᴘᴇʀᴀᴅᴀ ᴠɪsɪᴛᴀ.

15.4K 1.6K 450
                                    


La chica la cual me enamoró alguna vez.

Eso era lo que mi consciente tenía más que claro. Era ella, obtenía todas las cualidades. Las cuales la identificaban como la ex persona más importante para mi corazón.

Como ella nombró en algún momento, su padre la había estado llamando toda la mañana, sin tener localización de ella. El silencio dentro del auto fue demasiado largo, pero para nada incomodo. De vez en cuando volteaba a verla, ella observaba lo bello del viaje; Arboles, niños jugando, casas, parques, los hermoso del amanecer.

—¿Ahora por dónde...? —Esperé a que ella me guiara hasta su casa.

—Dejame aquí en la esquina. —Se empezaba a desabrochar el cinturón.

—Esta no es tu casa. —Detuve el auto, a un lado de la pista.

—No, no lo es. —Negó lentamente con la cabeza. —Pero prefiero que se quede así.

—¿Así cómo...? —Sin entender.

—Que no sepas donde vivo.

—¿Existe algún problema con eso? —Fruncí el ceño.

—Sí, para mi sí. —Mantenía su voz a la defendida.

—Si hay algún problema con que sepamos donde vivimos, mi casa está a diez cuadras de aquí, es de color pastel y café, número 1995.

—Tae, solo no quiero que sepas donde vivo y punto. —Estaba dispuesta a salir del auto.

—Espera. —Sujeto su ante brazo, ésta observó mi agarre y luego me vio a los ojos. —Somos amigos ahora ¿verdad...?

—Si Tae, amigos. —Asintió con la cabeza.

Y salió del auto, sin antes que respondiera con un silencioso Bien. No pensaba en seguirla hasta su casa, aunque era algo tentador. No querría perder la poca confianza que me tenía, por tener curiosidad.

Pensé en qué hacer, pero tan pronto como lo había pensado, mi madre se había hecho presente en la llamada.

Buenos días. —Contesté el móvil. Aclaré la voz.

¡Kim Tae Hyung! —Aparté rápidamente el celular de mi oreja.

¿Si, mami? —Respondí con temor.

¡Niñotráeme las toallas higiénicas!

—Claro, ya voy. ¿Mamá?

¿Qué quieres? —Estaba enojada.

¿Te estas desangrando por mi culpa?

—¡¿Cómo te atreves a preguntar si me estoy desangrando?!

—Claro, mamá. No quise... —Cortó la llamada.

Eres un cabrón, Kim.

Lo soy.

Tendría que llegar a casa y entregarle las compras de ayer a mi mamá. El viaje fue aburrido sin alguien con quien hablar, aunque tenía mi tiempo a solas para pensar en lo de ayer. No podía sacar de mi cabeza su cuerpo desnudo apegado al mío.

Juegos Mentales | KTH [+18][✔] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora