No Distance Left To Run - Parte 3.
Los días pasaban lentos y tortuosos para James, quería saber sobre Annie, trazar un plan de reconquista y pensar en sus ojos lo impulsaba, no olvidaba como fue volver a verla; no podía decir que se veía igual de bella, ahora era como ver un ángel, algo sobre natural había en su mirada y el había sucumbido ante ella, se veía más sensual, delicada, había cortado su cabello y sus ojos brillaban más que lo que recordaba.
El encuentro entre estas dos almas no sólo afectó a James, pues Annie no podía sacar de sus pensamientos aquellos ojos azules que en algún momento habían hechizado su corazón y parecía que lo estuvieran haciendo de nuevo, pero se sentía realmente culpable con Sebastian pues también sabía del amor que el le profesaba y que ella correspondía, se encontraba entre el amor que sentía por Seb y el que renacía por James.
McAvoy logró encontrar la dirección de la casa de Annie tras llamar a la agencia de modelos para la que trabajaba la chica. El plan de reconquista había comenzado, los primeros detalles eran ramos de flores, peluches, chocolates, Annie guardaba cada detalle con cariño pero temía que Sebastian se enterará de eso, por eso trataba de evitar que Seb entrará a su casa; pero no era algo que durará por mucho tiempo, tarde o temprano Stan se enteraría de los detalles que James tenía con Annie.
Los golpes en la puerta hicieron que Annie dejará de lado sus pensamientos, caminó despacio hasta ella y la abrió.
- Buen día, cariño - dijo Seb con ramo de rosas
- Seb - sonrió tratando de no sonar nerviosa
- ¿Puedo pasar?
- Ahhh... Emmm
- Tomaré eso como un si - dijo abriéndose paso para entrar a la casa de Annie
- Mierda - susurro Annie
Seb se detuvo frente a uno de los ramos de flores que James le había regalado y tomó la tarjeta que había en el.
- Annie...
- Seb, te juro que no
- ¿No qué? ¿no es lo que estoy pensando?
- Si, no es lo que estás pensando... Escucha, James ha estado enviando detalles pero no significa que esté en algo con el
- Estas conservando los detalles que el te da, no le has aclarado las cosas
Sebastian tomo aire profundamente y cerro los ojos, pasaron un par de segundos que para Annie fueron una eternidad, sintió su corazón arrugarse como un trozo de papel y sabía que probablemente eso también sucedía en el corazón de Sebastian y justamente eso era lo que estaba evitando. Seb la miro fijamente, sus ojos reflejaban algo extraño, quizá era desilusión, tal vez ira o simplemente dolor, Annie acercó su mano a la mejilla de Stan y la acarició con dulzura, como si estuviera acariciando las plumas más finas, el ladeó su cabeza como queriendo profundizar la caricia, como si quisiera memorizar el tacto de Annie, como si fuera la última vez que recibiría un acto de cariño por parte de la mujer, Sebastian se acercó lentamente a ella y rozo sus labios, dejo un suave beso y un pequeño suspiro al separarse de ella.
- Te amo - dijo Sebastian dejando caer una lágrima por su mejilla - en serio te amo
- Yo también te amo a ti
- También a el - susurró, Annie guardó silencio - te amo y por eso mismo no te puedo retener a mi lado
Sebastian tomo la mano de Annie y dejo un beso, las lágrimas brotaban de los ojos de ambos, Annie apretó la mano de Stan como si no quisiera soltarla nunca.
- Eres una persona maravillosa, Annie... Lo mejor que me ha sucedido hasta el momento - Seb dejo un beso en la mejilla de la chica - no te preocupes, si tu eres feliz yo lo seré... Sólo espero que el cuide de ti, llámame siempre que necesites algo... Cuentas conmigo.
Eso fue lo último que dijo Stan antes de marcharse. Annie se quedó pensando en todas las palabras que Seb le dijo, Stan era un hombre maravilloso y esperaba que encontrara a alguien tan bueno y noble como el. Nuevamente alguien golpeó la puerta, Annie camino hasta ella y la abrió, no había nadie pero en el suelo había un sobre amarillo y una margarita, llevaba una pequeña nota.
Encontré esto en uno de mis cajones hace un tiempo, quiero que la tengas tú para que recuerdes lo bello que fue nuestro amor.
J.M.Annie se recostó en el marco de la puerta y abrió el sobre, dentro había un ejemplar de la revista para la cual posaron James y ella la primera vez que se vieron.
- Santo Dios - dijo incrédula
- ¿Te gustó? - Dijo James saliendo de la parte trasera de una columna
- ¿La habías conservado?
- Luego de verte posar quedé enganchado contigo, compré la revista justo el día que salió
- ¿Quieres pasar?
- Claro
James entró a la casa y se sentó en el sofá, Annie fue a la cocina y sirvió dos copas de vino, luego se sentó junto a McAvoy.
- No pensé que la tuvieras guardada
- No es lo único - dijo suavemente mientras sacaba unas hojas de su abrigo
- ¿Qué son?
- Tus cartas - sonrió entregándole las cartas
Annie también conservaba las cartas que James alguna vez le dió, a su mente llegaron los recuerdos de las noches en que lloro leyendolas luego de que su relación acabara y se preguntó si James también había llorado tanto como ella.
El amor que Annie sintió por James era grande, tanto que sabía que no podría morir
- Es algo lindo saber que las conservas
- No quería deshacerme de tu recuerdo
James se acercó lentamente a Annie y tomó su barbilla, el corazón de la chica comenzó a saltar como si quisiera salir de su pecho y huir lejos de ahí.
- James... Espera, yo acabo de terminar con Sebastian
- Entiendo - dijo pegando sus frentes con cariño - toma el tiempo que creas necesario
Annie le brindó una sonrisa honesta y el a ella, pasaron la tarde charlando y comiendo lasagna. Annie pensaría bien la situación, porque sabía que amaba a James, pero necesitaba un tiempo para alivianar la situación de Sebastian; James se convenció de esperarla cuanto fuera necesario, era la mujer de su vida y estaba convencido de ello.
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Hola a todas.
Quiero saber si hay chicas aquí que amen a Chris Evans, si las hay las invito a ir a mi perfil, tengo un fanfic nuevo llamado "Next to me" y pronto subiré el primer capítulo.
¿A qué personaje y en qué situación les gustaría tener en el próximo one shot?
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ONE SHOTS JAMES McAVOY
AcakPequeñas historias sobre el perfecto James McAvoy Disfruten