La novia de mi mejor amigo

-El meteorito-

Mi nombre es Daniel, tengo 19 años y estoy disfrutando de mi ultimo verano de libertad antes de la universidad.

Vivo en un pequeño pueblo al norte de la peninsula iberica, o sea, España.
Mis gustos no son muy novedosos, me gusta el anime, no lo suficiente como para considerarme a mi mismo un otaku, simplemente disfruto de los animes de temporada, tambien me gustan los videojuegos, pero no lo suficiente como para considerarme un gamer, solo juego para matar el rato.

Fisicamente soy un chico alto de rasgos afilados y mirada penetrante, aún que no me considero feo, mi nariz y mi cabello no me gustan, mi nariz es demasiado pequeña y algo desbiada, mientras que mi pelo es casposo y graso.

Nunca he tenido novia.

Como ves, no soy una persona muy interesante.

No soy alguien de quien su historia merezca ser contada.

Nunca te habria contado mi historia de no ser por...

"Rin rin"

Son mas de las tres de la mañana, ya estaba medio dormido, Spotify habia estado saltando de canción en canción mientras dormitaba con los cascos aun puestos, ahora estaba sonando una canción de rock japones, no era mi estilo.

Me retiro los cascos y los dejo sobre la mesilla que hay al lado de mi cama, cojo el móvil con pereza y lo miro, parpadeo a causa de la luz y tardo unos segundos en que mis ojos se acostumbren a su brillo, que pese a estar al minimo, parece un foco frente a mis pupilas.

Finalmente adaptandome a la luminosidad, veo quien es la persona a la que se le ocurre incordiar a las tres de la mañana, mi mejor amigo: Guille.

Guillermo y yo habiamos sido amigos desde primaria, a los dos nos gustaba pokemon y nos juntabamos algunas veces para jugar, esto al final desenvoco en que nos reuniesemos casi todas las tardes en su casa del arbol.

Descuelgo la llamada, llevandome el móvil a la oreja.

-¿Sabes la hora que és?-

-Daniel, mi tío ha encontrado algo-

Gruño, con aparente enfado, el tío de Guille es un astronomo amateur sin titulación que usa los trastos viejos del padre de mi amigo para crear "radares"

-¿Me llamas para esa gilipollez?-

-Tío, Daniel, esta vez es de verdad, necesito que me lleves con tu moto-

-Voy a colgar-

-¡Daniel!- bufa- Esta bien... Si me ayudas te preparare una cita con mi prima Teresa.

Parpadeo.

-Estoy allí en diez minutos-

Cuelgo la llamada tras un grito de alegria de mi mejor amigo y me levanto de la cama, como es verano la ventana de mi cuarto esta abierta de par en par, aún que por suerte, donde vivo no hace un calor sofocante.

Me visto, colocandome una camiseta roja y unos pantalones cortos, ademas de mi chaqueta motera y los dos cascos de mi moto, uno rojo con llamas y otro azul.

Al vivir en un pueblo, mi familia disfruta de una casa bastante grande, un chalet algo rustico, de dos plantas, en la planta baja se encontraba el salón, la cocina, un baño, un aseo, la sala de estar y la habitación de mis padres, en la planta superior estaba mi cuarto, un baño y el estudio de mi madre.

Bajo con sumo cuidado cada uno de los escalones de la casa, que descienden en forma de "L" hasta la entrada de la casa, me calzo mis botas y tomo las llaves de la casa y las de mi moto.

Al salir fuera me topo con la negrura de la noche, únicamente salvada por la luz resplandeciente de la luna de una noche totalmente despejada.

Mi moto esta aparcada justo detras de la vaya que separa el territorio de nuestra casa con la acera, salgo abriendo la puerta de metal negra y cerrandola tras de mí, mi moto es una moto de cross blanca algo vieja, me coloco el casco en la cabeza y me cuelgo en el brazo derecho el casco que será para Guille, el azul y me dispongo a conducir, mi pueblo es un pueblo pequeño, de apenas 2000 habitantes, lo mas moderno con lo que contamos es un supermercado que abrieron apenas medio año, no tenemos cine ni centros comerciales.