Estaban sentados en el sofá solos y aburridos. sin embargo, lo que Jaemin llevaba puesto te estaba volviendo loca.
Pantalones de chándal grises, y sin camisa, porque hacía calor en la habitación.
—¿Puedo hacerte una mamada?—
Preguntas tan inocentemente como puedes. Gira la cabeza en tu dirección.
—¿Quieres qué?— Lo alcanzas y repites.
—Quiero hacerte una mamada— Él acerca tu cabeza y te susurra al oído.
—Entonces, chupa mi pene bebé—
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•Haechan
Se encontraban jugando al juego de carta llamado "Uno" en el piso de la sala cuando notaste la erección que estaba tratando de cubrir con su sudadera con capucha, pero era un poco demasiado corto.
—Déjame encargarme de eso— Asientes a su creciente erección.
—Cariño, no tienes que hacerlo, se irá en un minuto— Trata de razonar contigo, sus mejillas se enrojecen.
—Tonterías, déjame cuidarte Haechannie!— Te quejas.
—Si insistes— dice mientras se acerca a ti.
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•Renjun
Estabas tan aburrida, que pensaste que en cualquier momento ibas a llorar.
Renjun estaba en su teléfono hasta que te mira y sonríe, estirándose para pellizcarte la mejilla.
—¿Por qué me miras, bebé?— Pregunta.
—Estoy tan aburrida—
—Encuentra algo para hacerlas— Te arrastras hacia él y te pones a horcajadas.
—Está bien, ¿Puedo darte una mamada entonces?— Sus ojos se agrandaron.
—¿Una mamada?—
—Sí, déjame complacerte, te ves muy bien ahora mismo—
—Bien, princesa, como quieras— Dice mientras se quita el cinturón.
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•Jeno
Se encontraban haciendo tonterías porque ambos estaban súper aburridos.
Toda la casa estaba vacía, excepto por ustedes dos, por lo que ya habían pasado por las habitaciones de los otros miembros. Incluso rompiste la lámpara de Renjun.
En este momento estabas en el sofá tratando de encontrar algo que hacer.
—Hmmmmm— Gruñes.
—Sí Hmmmmm— Responde Jeno. Te giras hacia él y le agarra el cuello de su camisa entre las dos manos.
—Déjame hacerte una mamada— Empuja tu cabeza hacia abajo, ansioso por la sugerencia.
—Hazme sentir bien, nena, y tal vez recibas algo a cambio— Él guiña un ojo y tú empiezas a desabrocharle el cinturón.
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