𝖘𝖔𝖑𝖉 𝖙𝖔 𝖙𝖍𝖊 𝖉𝖊𝖛𝖎𝖑

Capitulo 5

𝕮𝖆𝖒𝖇𝖎𝖔

Evangeline.

Al otro día en la escuela me di cuenta de que Andy tenía razón.

Chicas se acercaban a mí solo para preguntarme si Andy tenía amigos mayores que pudieran salir con ellas.
Todo el almuerzo estuve incómoda, pues aunque me senté en la mesa más lejana más de diez chicas se sentaron conmigo solo para interrogarme.
Miles de preguntas extrañas salían de su boca. Entre tantas como "¿Que posición le gusta más?" ¿Que posición de qué?.

Apenas y sonó el timbre de salida y yo corrí a casa. No podía aguantar más las interrogaciones de aquellas chicas.

Cuando llegue a casa mi abuela estaba en la cocina y salió de esta con una gran sonrisa.

-Que bueno que llegas,querida.- Ciertamente su comportamiento comenzaba a darme miedo.- La cena esta lista,ve a cambiarte.-

Camine despacio hasta mi pequeña habitación pero me sorprendí al abrirla y solo ver cajas.
Ni mi cama ,ni mi pequeño guardarropa estaba.

-¡Oh olvidé decirlo!.-Grito desde la cocina.- ¡Tu habitación ahora es la del fondo!.-

Me extrañe aún más y con algo de desconfianza me encamine por el pasillo hasta la habitación de al fondo.
Abrí la puerta esperando ver solo mi pequeña cama y mi guardarropa ,pero me sorprendí al ver que mis viejos muebles no estaban.

En su lugar estaba una cama con cabecera negra y dos taburetes a su lado.
Un tocador negro con detalles dorados y un gran guardarropa del mismo color.

Pensando que me había equivocado de habitación cerré la puerta despacio y caminé unos pasos hacia atrás.

-Esa es tu habitación ,Eva.-Escuche a mi abuela decir.-

Me giré a verla y ella me hizo un ademán para que entrara a esta.

-En el guardarropa están tus cosas.-

Entre a la habitación cerrando la puerta tras de mí.
Puse la mochila sobre la cama y me encaminé al guardarropa esperando ver mis pocas prendas.
En lugar de eso había mucha ropa en su mayoría rosa. Blusas,faldas,vestidos,pantalones.

¿Por qué mi abuela había echo todo esto? Comenzaba a pensar que algo estaba mal con ella.

Tome solo unos jeans y una playera lisa y me cambie rápidamente para luego ir a la cocina.

Mi abuela tenía la cena servida.
Algo desconfiada me senté y después llegó Henry a sentarse frente a mi.

-Debes estar lista en todo momento,no sabemos cuando quiera venir el señor Biersack.-Dijo mi abuela mientras comíamos.-

-¿Y que tiene que quiera venir?.-Pregunte desconcertada y ellos me miraron raro.-

-No te hagas la tonta.-Dijo Henry riendo.-

Paso al menos una semana y Andy aún no venía,sin embargo yo tenia la sensación de ser perseguida en la escuela y de camino a casa pero trate de convencerme de que solo era mi paranoia.

Una tarde llegué de la escuela y mi abuela ya me esperaba en la puerta.

-Peinate esos cabellos,por Dios.-Dijo en un susurro acomodando mi cabello el cual se había despeinado con el aire.-Ve directo a tu habitación,el señor Biersack te espera.-La miré confundida pero no dije nada y caminé directo a mi habitación.-

Al llegar a la puerta me debatía entre tocar o pasar,pero al final de cuentas era mi habitación así que abrí la puerta despacio para después entrar.
En la cama estaba Andy sentado,al verme sonrió.