☆Un Omega diferente☆ ♡NamSeok♡ [ TERMINADA ]

◎~ 14~◎

Namjoon se sentó con Seokmin abrazándolo, el mayor miró a su hermana.

– ¿Qué haces aquí? –

– Tienes que arreglar las cosas con papá y mamá. Namjoon no puedes huir de ellos para siempre. – Habló la Beta.

– ¿Están tus padres aquí...? – Habló con suavidad el Omega saliendo de su escondite.

– También están nuestros tíos, los de Busan y Jeju. – La pareja se miró.

– Lo siento Geongmin, pero no. Nos ire- –

– Monnie, vamos, tienes que hablar con ellos. Yo estaré a tu lado. ¿Sí? – Interrumpió el menor.

– Está bien, iré por los zapatos. – El Alfa se levantó seguido del menor, mientras el mayor iba por los zapatos la hermana se lanzó a preguntarle al menor.

– ¿Cómo es tu nombre? –

– Kim Seokmin... Y tú eres Kim Geongmin. ¿No? – La Beta sonrió y asintió. Ambos se sentaron en una roca, la nariz del menor fue golpeado por el aroma de varios alfas.

– ¡Hija! ¿Qué hacés con ese Omega? – Un Omega macho junto con una Alfa hembra y otros Alfas que los acompañaban.

– ¿Él? Es Seokmin. – Cuando se giró a mirar al Omega percibió cómo éste cubría su boca y estaba más pálido.–  ¿Estás bien? – Tocó suavemente el hombro de Seokmin, pero al segundo este vómito hechándose a un lado. Los Alfas mayores se habían acercado a intentar socorrer al menor. Pero este empezó a toser y llorar. Los olores mezclados y cerca de él lo mareaban.

– ¡¡ALEJAROS!!  – Se giraron y los familiares abrieron la boca al ver a Namjoon. Éste se abrió paso y apartó al menor del resto. Seokmin al reconocer el aroma de su Alfa se aferró al cuello de este y aspiró las feromonas. Namjoon sólo acarició la espalda temblorosa del menor y besó la sien de este. – Shhh... Ya está, ya está, estoy aquí. – Susurró el Alfa, logró percibir el aliento de su pareja más calmado.

– ¿Está bien? – Geongmin se acercó.

– Les diré algo. – La vista de Namjoon se posó en los familiares. – No vuelvan a rodearlo. Él es delicado. –

– ¿Quien es? – La voz ruda de su madre le hizo ver al menor y verla a ella.

– Él es mi predestinado. Kim Seokmin. Y gracias por arruinar mi segunda cita. –

– Hermano... –

– Geongmin, no digas nada. – Suspira.– Seokmin es importante para mí, sí os preguntáis qué pasó con Jin. Él murió en un accidente hace años. – La cara de todos fue de sorpresa y tristeza. Namjoon sólo miró a su pequeño, éste estaba despierto. El Alfa besó con suavidad la sien del pequeño. – ¿Cómo estás? – El menor sólo besó la mejilla de Namjoon. – ¿Seguro? –

– Sí, sólo no te alejes... – Susurró el pequeño.

– ¿Quieres contarles o nos vamos? –

– ¡No! – El padre de Namjoon se acercó. – Quedaros, tus tíos se iban a ir en un rato. Puedes ir a tu antiguo cuarto mientras.–

– Papá, Seokmin me importa antes que estar con ustedes. – Habló de forma fría, la madre iba a hablar pero Seokmin se adelantó golpeando el pecho del Alfa.

– ¡N-no diga esas cosas! – Tosió, su garganta escocía por haber vomitado. – Nos quedaremos... Pero necesito agua... –

– Entremos, entremos. – Habló de nuevo el padre.

[ • • • ]

Todos estaban en la Sala menos el padre del Alfa, pero rápidamente llegó  con un vaso de agua. El pálido tomó el agua en el regazo del moreno que lo abrazaba cariñoso.

– Muchas gracias... – Se acomodó entre los brazos de su Alfa. – Bueno... Yo soy Kim Seokmin, soy hijo de Kim Eunmin y su amante, mi madre, Jeon Chaeyong. Mi madre se suicidó cuando yo tenía 5 años... Era muy buena madre, me quería y cuidaba, iba a una bonita escuela pública, pero ella sufría de depresión. No tenía dinero para las cosas como mi ropa o comida.  El día que se quito la vida, la encontré en la ducha con las muñecas. – Tomó aire. – Poco después mi padre me acogió obligado por el Estado... Todo fue "normal" hasta que con 13 años y medio me presente como Omega, mi padre me... – El labio inferior del menor tembló y el Alfa lo abrazó más fuerte mientras el pequeño empezaba a llorar. – Me violó... No me daba comida nada más que una vez a la semana y de beber igual... Cuando me escape... Entré a la empresa de Monnie y mi padre me siguió, mi nos estaba golpeando a mi y a  Taehyung... Cuando derrepente... Apareció Monnie con Yoongi Hyung... Me salvó y me protegió... Después de eso empecé a vivir con Yoongi Hyung y su Omega... Ahora vivo con Monnie... Aún que... Hace unos días... – El recuerdo de lo sucedido había hecho que el menor llorará más y se escondiera para llorar.

– Hace unos días, su padre huyó de la cárcel y interrumpió en mi casa cuando no estaba. Secuestró a Seokmin y lo violó durante más de 6 horas. Cuando llegué para rescatarlo, estaba muy herido y su padre había dicho cosas horribles a Seokmin para dañarlo. – Finalizó Namjoon arrullando al menor.

– Oh... Lo sentimos... – Habló el padre. Todos lloraban, era muy doloroso imaginarse eso.

– Joonie te protegerá, de eso estoy segura. – Dijo Geongmin tocando el hombro del Alfa. – Te presentaré a la familia; ¿sí? – El Omega asintió. – Ellos son mi tía Kim Kangnae y mi tío Wang Jeongsung, ambos son de Jeju. Ellos son mi tío Kim Chun-hee y mi tía Haneul, de Busan y ellos son mis padres, Park SooJi y Kim HoKeon.

[ • • • ]

En la cena todo fue tranquilo, los tíos se fueron y cada uno fue a dormir en su habitación. Namjoon iba a entrar en su habitación cuando sintió que tiraban de su camisa, se giró, era Seokmin.

– ¿Qué pasó pequeño? –

– ¿P-puedo dormir contigo...? –

– Claro que sí, entremos. –

Ambos entraron a la habitación sencilla, Seokmin se sentó en la cama y siguió a Namjoon con los ojos. Éste se cambiaba por una camiseta de tiras y un pantalón corto.

– No tengo pijama... – Soltó el menor.

– Ven, tengo una camiseta grande y un pantalón corto que me queda pequeño. – El menor se acercó y recibió la ropa. Se dirigió al baño y se cambió, la camiseta le llegaba a los muslos y el pantalón corto le quedaba grande. Salió y Namjoon sólo se sonrojo, ambos se abrazaron y Namjoon lanzó a Seokmin a la cama. El Alfa atacó al menor a base de cosquillas, la risa del pequeño hizó reír al Alfa. Paró y se colocó encima del Omega para darle un beso lento, lleno de deseo y amor. Ambos se miraron, los labios de Seokmin estaban entre abiertos.

– Monnie... –

– ¿Si? –

– Quiero... Hacerlo... –

– ¿Qué? –

– Quiero que me marqués... – Susurró el menor. Ante la mirada asombrada del Alfa.