Almas Gemelas 운명 "Kookmin"

O5

—Okey, escúpelo.

— ¿De qué estás hablando?

—JiMin, llevamos diez minutos aquí sentados y ni siquiera has tomado un sorbo de tu café, solo has estado sentado viéndolo fijamente. Así que, escupe que es lo que gira por tu cabeza.

—No sé cómo explicarlo... — respondió JiMin y pasó sus manos por su cara.

— ¿Tiene algo que ver con el chico que te atendió?

— ¿Fue tan evidente?

—Un poquito. — Contestó TaeHyung con una sonrisa.

—Tae, por un momento creí que él era mi alma gemela. Sentí cosas tan extrañas, cosas que nunca he sentido. — Dijo JiMin, su cara llena de confusión. — Pero no se llama como mi alma gemela. No entiendo nada.

—Eso es extraño, en todo el tiempo que he tenido el nombre en mi palma nunca he sentido algo así con alguien. — Le respondió TaeHyung, su cara también adornada de confusión. — ¿No será que el chico aquí usa un nombre diferente?

—Lo dudo. Cuando le dije mi nombre, no tuvo ninguna reacción fuera de lo normal.

—Pero igual te gusta.

—Sí y siento que le estoy siendo infiel a mi alma gemela. — Dijo JiMin con amargura.

—No te preocupes tanto. — Dijo TaeHyung con una sonrisa reconfortante. — Hoy obtuviste el nombre, de seguro tus hormonas están vueltas locas.

— ¿Tú crees?

—Lo creo. — Dijo TaeHyung y alzó su mano para alborotar el cabello de su mejor amigo. — Ahora tómate tu café antes de que se enfríe aún más.

☹

A pesar de lo que le había dicho TaeHyung, JiMin no podía dejar de pensar en aquello que había sucedido en la cafetería.

Estaba ya acostado en su cama pero no lograba conciliar el sueño; cada vez que cerraba sus ojos, su mente se llenaba de aquella piel morena, de aquel cabello alborotado y de aquellos ojos oscuros. Se sentía realmente confundido, pero más que todo se sentía mal porque sentía que estaba siéndole infiel a su alma gemela.

Su mente le decía que no volviera nunca más a la cafetería y así evitar posibles encuentros con aquel chico. Pero su corazón le decía que debía volver y resolver el enigma que significaba el ojinegro.

—Necesito averiguar su apellido. — JiMin susurró y tan pronto las palabras salieron de su boca, se dio cuenta de que por culpa de lo sucedido, no había revisado si en su palma había surgido el apellido de su alma gemela. Se apresuró a buscar su teléfono y encender la lámpara. Cuando lo encontró, se quitó el guante e iluminó su palma. Y ahí estaba.

Jeon Jungkook

Los ojos de JiMin se llenaron de lágrimas y una sonrisa escapó de sus labios.

Era el nombre más hermoso que había escuchado en su vida.

Acercó su mano a sus labios y plantó un pequeño beso sobre el nombre, deseando que su Jungkook pudiera sentir un poco del gran amor que ya le tenía.