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JiMin no tenía otra intención más que buscar un cambio de ropa al subir a su habitación, pero al cerrar la puerta y encontrarse en aquella habitación con escasa iluminación, con la mano de su alma gemela unida a la suya, no pudo evitar sentir como cambiaba por completo el peso del ambiente.

De pronto, lo único que podía escuchar era el sonido de la respiración de Jungkook y lo único que podía sentir era el calor que emanaba ese cuerpo a pesar de aun tener la ropa calada al cuerpo.

Muy despacio, JiMin se posicionó frente a Jungkook, quien estaba de espaldas a la puerta, y lo observó.

A pesar de que la luz que había era muy poca, igual pudo ver sus ojos negros y brillantes observándolo detenidamente. Igual pudo ver sus delgados labios, que ahora brillaban ya que Jungkook había sacado su lengua y los había lamido ligeramente. Igual pudo ver el movimiento que provocaba su pecho al subir y bajar con cada respiración.

Sin poder contenerse más, soltó el agarre que tenía su mano derecha en la mano de Jungkook pero mantuvo el contacto de su piel con la de él.

Suave y lentamente, fue subiendo su mano por el brazo del ojinegro y rozando la piel. Pudo sentir como la piel de Jungkook se erizó por el contacto y un escalofrío recorrió su cuerpo al ver el efecto que un pequeño toque suyo tenía sobre su alma gemela.

Siguió subiendo y no pudo evitar apretar al llegar a los bíceps de Jungkook. La fuerza del músculo bajo su mano le provocó un sonrojo que subió rápidamente de su cuello a sus orejas.

Subió más, acarició la piel suave del cuello bajo su marcada mano y se detuvo cuando llegó al mojado cabello. Enredó sus dedos en aquel y dio un suave jalón, atrayendo la cara de Jungkook hacia la suya para unir sus labios con los de su alma gemela en un beso suave pero cargado de electricidad.

Pero el beso suave pasó a ser un poco más fuerte, siendo ahora un más firme roce de labios. JiMin sintió como la punta de la lengua de Jungkook rozaba su labio y sin pensarlo dos veces, abrió su boca, dándole a Jungkook el acceso que estaba pidiendo.

El choque entre sus lenguas provocó que el ojiazul subiera su otra mano y la posara sobre la mejilla de Jungkook.

El beso terminó pero Jeon mantuvo el labio inferior del menor entre sus labios y JiMin sintió cómo de pronto su piel estaba ardiendo. Jungkook -que había puesto sus manos en la cadera de JiMin- metió lentamente sus manos bajo la camisa del menor y las fue subiendo, acariciando con sus manos el torso del ojiazul y a la vez subiendo la camisa, provocando que la piel del menor se erizara por completo. JiMin alzó sus brazos para ayudarlo y Jungkook la quitó de un jalón.

JiMin intentó hacer lo mismo con Jungkook, primero quitando la gabardina que colgaba de sus hombros y luego metiendo sus manos bajo su camisa, pero la camisa estaba tan mojada y pegada a su cuerpo que se le dificultó y ambos rieron. Jungkook entonces decidió ayudarlo y tomó su camisa por el ruedo y la subió, separándola de su cuerpo y provocando que murieran las risas.

—Por Dios, Jungkook. — Dijo JiMin en un susurro con sus ojos pegados al torso desnudo y brillante de Jungkook. — Eres perfecto.

Jeon no contestó, en lugar de eso, tomó a JiMin de las mejillas y lo atrajo hacia su cara, buscando de nuevo besarlo. El choque de sus torsos provocó que de las gargantas de ambos escaparan unos suaves, casi imperceptibles gemidos.

Aun besándolo, JiMin empezó a caminar hacia atrás, dirigiéndolos hacia la cama, hasta que sus rodillas chocaron con el borde y ambos cayeron sobre esta. Rompiendo el beso, pero manteniendo el contacto visual, el rubio se deslizó hasta quedar recostado sobre sus almohadas y extendió su marcada mano.

Almas Gemelas 운명 "Kookmin"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora