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—Eres un completo idiota. — JiMin volvió a decir en un susurro, las lágrimas saliendo libremente de sus ojos.

Jungkook no soportó ver tal imagen y sin pensarlo dos veces, avanzó hacia JiMin y lo envolvió en sus brazos, mojándolo en el proceso por el estado en que estaba su cuerpo al haber corrido hasta la casa del ojiazul bajo la lluvia. JiMin era ligeramente más pequeño que Jungkook, así que al abrazarlo, sentía que lo envolvía por completo con su cuerpo.

La cara de JiMin quedó apretada contra la comisura de su cuello con su hombro y sintió como esta zona se humedecía con las lágrimas calientes del ojiazul. También se percató de cómo el cuerpo del menor se estremecía contra el suyo y lo apretó con más fuerza hacia él.

Sus cuerpos calzaban como piezas talladas a la perfección la una para la otra. El roce de su piel con la de JiMin provocó que su cuerpo se envolviera en escalofríos. Su pecho dejó de sentirse tan apretado y su espalda dejó de sentirse tan pesada. Se sentía ligero, como flotando.

Al fin estaba donde debía estar.

—Perdóname, JiMin. — Susurró Jungkook al oído de JiMin y el ojiazul sacó sus brazos -que habían quedado atrapados entre su cuerpo y el de Jungkook- y rodeó su cintura, posando sus palmas en la espalda del ojinegro y casi clavando sus dedos en esta. — Perdóname, perdóname. Sé que soy un idiota pero por favor perdóname.

Jungkook repetía esas palabras una y otra vez en el oído de JiMin con suaves susurros, como si sus palabras fueran caricias que entraban por los oídos del ojiazul e iban directo a su corazón. Y la verdad es que esas palabras sí resultaron ser las caricias que JiMin necesitaba; poco a poco, sus sollozos fueron disminuyendo hasta que solo quedaron unos pequeños espasmos en su cuerpo, de esos que se provocan cuando has llorado mucho.

JiMin se removió un poco en sus brazos y Jungkook soltó un poco sus agarre; al fin lo había tenido en sus brazos y no planeaba soltarlo pronto.

JiMin sacó su cabeza de la comisura y también soltó una de sus manos, que se habían agarrado fuertemente a la gabardina empapada de Jungkook, atrayéndola cerca de su cara. Jungkook soltó una de sus manos y la llevó hacia la del menor. Sin articular palabra alguna, Jungkook entendió que JiMin quería que removiera su guante. Su fría y temblorosa mano soltó el broche al primer intento y lo removió con suavidad, revelando su nombre marcado de por vida en la mano del ojiazul.

Con un suspiro cansado, volteó la mano del más pequeño y la atrajo hacia su boca y plantó un beso en el dorso de la mano. Cerró sus ojos e inhaló la esencia que emanaba la piel del menor. Por alguna extraña razón, el aroma de aquella se le asemejaba al aroma de la vainilla.

Cuando abrió sus ojos, se encontró con que aquellos ojos azules lo observaban. Estaban rojos y sus párpados estaban irritados. Jungkook sintió cómo su estómago se retorció al recordar que él fue el provocante de aquello.

—No te merezco. — Jungkook susurró y sacudió ligeramente su cabeza para luego bajar su mirada.

—No huyas de nuevo, por favor. — Dijo JiMin con su respiración agitándose otra vez.

—No lo haré. — Dijo rápidamente al ver los ojos de JiMin llenarse de temor y al sentir su mano apretando el agarre sobre su mojada gabardina. Después de esas palabras, Jungkook pudo ver como todo el cuerpo del menor se relajó de nuevo. — No volveré a ser tan idiota, lo prometo.

JiMin soltó un suspiro tranquilo y volvió a pegar sus cuerpos, apoyando su mejilla sobre la clavícula de Jungkook y este apoyó su mejilla sobre el cabello de JiMin. Momentos después sintió su cuerpo estremecerse por el frío y se dio cuenta de que el menor también había empezado a temblar, probablemente del frío también puesto que ahora estaba casi tan mojado como Jungkook; en el abrazo, su ropa había absorbido todo el agua que chorreaba su cuerpo.

—Debes cambiarte de ropa ya mismo o vas a pescar un resfriado. — Jungkook susurró sobre la cabeza de JiMin y este negó ligeramente con su cabeza.

—No quiero soltarte. — Dijo JiMin y Jungkook sintió como todo su interior se derretía enternecido. ¿Cómo había sido tan idiota como para huir de esto?

—Yo tampoco quiero soltarte, pero no quiero que nuestros primeros días juntos de verdad los pasemos enfermos. — Dijo Jungkook y no fue hasta que lo verbalizó que se dio cuenta de lo que sus palabras significaban. Este es el verdadero inicio de su vida con JiMin.

JiMin se soltó suavemente del abrazo y se quedó viendo a su alma gemela. Sin pensarlo dos veces, ambos se fueron acercando lentamente y unieron sus labios en un pequeño beso. Jungkook sintió electricidad en sus labios y que su corazón había explotado. El mayor alzó su mano derecha y la posó sobre la mejilla de JiMin, acariciando suavemente con sus dedos. Después de unos instantes, ambos separaron sus labios y abrieron sus ojos. Al mirarse, las caras de ambos se adornaron de sonrisas.

—Ven conmigo. — Dijo JiMin y tomó la mano del mayor, jalándolo hacia las escaleras en dirección a su habitación.

Se nos viene LA SETZA SJJSJS

Dejenme amor y les subo el capítulo, jdjdjd, no enserio me siento algo deprimida el día de hoy. :c

*Espacio para el amor*

Creí que la mala persona era yo Ajshdj
Pero la mayoría quería que JiMin hiciera sufrir a Jungkook.

KE MAL PEDO DE SU PARTE, LA VERDHA.

Hay algo que me entristece y es que hay comentarios que indirectamente me atacan jsdj, yo creo que lo primero es el respeto, si ustedes quieren actualizaciones y cosas de mi parte al menos respetenme, yo nunca he sido grosera con ustedes y espero lo mismo de su parte. Me mandaron mensaje al privado insultando y diciéndome cosas muy feas y la verdad mo se me hace justo. Espero lo entiendan.

Almas Gemelas 운명 "Kookmin"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora