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Narra T/N.

— ¿Quieres ir al cine? — preguntó mi novio, mientras acariciaba mí pierna.

Estábamos los dos en el sillón, yo estaba acostada con mis piernas encima de las de Jin y él la acariciaba. Estaba buscando un programa para ver y en la televisión no pasaban nada entretenido. Que bueno que a Jin se le ocurrió eso.

— Sip — respondí con una sonrisa.

— Vamos — ambos nos levantamos del sillón para ir hacia la entrada. Jin pasó su brazo por mis hombros y emepezamos a caminar.

Cuando llegamos al cine, Jin y yo nos dividimos para ir por la comida y las entradas. Él iba a buscar las entradas y yo por la comida. Si fuera por mí, hubiese comprado hasta hamburguesas, pero ni dejan entrar comida de afuera.

Cuando terminé de comprar todo, ví que Jin me estaba esperando cerca de las salas, con las entradas en mano. Me acerqué a él con una sonrisa y me pare enfrente con una sonrisa.

— ¿Lista? — preguntó y me robó un rápido beso.

— Sip — sonreí.

— Pues, vamos — me abrazó por los hombros y empezamos a caminar así hasta entrar en la sala.

(...)

Después de terminar la película, que no estuvo tan buena como imaginé, pero tampoco estuvo taaan aburrida, salimos de la sala con nustras manos entrelazadas y las movíamos de adelante y atrás.

— ¿Qué te pareció la película? — preguntó mirándome.

— Estuvo buena, pero el final no me gusto mucho, fue muy abierto — hice una mueca. Y sí, fue muy abierto, ya no espero a que salga la otra.

— Pienso igual — dijo mirándome.

— ¡Au! — exclamé en un susurro. No quería que me pasará esto, pero miren el lado bueno, podría subirme a la espalda de Jin.

— ¿Qué pasó? — él se puso al frente mío.

— Me lastime en la parte de atrás de pie — dije mirando esa zona.

— Sube — dijo Jin agachándose al frante mío para que me suba a su espalda.

— Ok — respondí riendo.

Yo me subí y puse mis piernas al rededor de su cadera y el las sostuvo, pase mis brazos por su cuello y deje un beso en su mejilla.

— ¿Por que haces esto? Si puedo caminar — dije riendo.

— Lo hago para que no te sigas lastimando — me miro y yo reí.

— Ok — dije.

Caminamos así por toda la calle, había mucha gente que nos miraba, otras que sonreían al vernos y también habían chicas que miraban a Jin. No soy tan tonta para no darme cuenta, eh. Cada vez que lo hacían, yo le daba un beso en la mejilla a Jin. Se podría decir que hasta mí labial quedó marcado en su mejilla.

Amor, ¿puedes dejar de marcar tu labial en mí mejilla? Amo que me beses pero tengo tu labial.

Agarré su rostro con mí mano y lo besé en la boca.

— No — respondí en su boca.

— ¿Quieres comer helado? — preguntó.

— Sip, pero quiero comerlo en casa. Estoy muy cansada — respondí y apoyé mí mentón en su hombro.

— Está bien — dijo — Cariño, ¿te puedes bajar para ir a comprar el helado? — preguntó mirándome.

— Sí — respondí y me bajé de su espalda.

— Vamos — tiró de mano.

Entramos y pedimos los gustos de helados que queríamos para cada uno, pagamos y salimos de la heladería para volver a casa. 

— Llegamos — dije soltando un suspiro — Ten — le di la bolsa con el helado a Jin — Iré a buscar cucharas y vuelvo — dije y me fui a la cocina, saqué de un cajón dos cucharas y volví con mí novio — Ten — le extendí una cuchara, pero el tiró de mi brazo haciendo que me sentara en su regazo.

— Te quiero — me besó la mejilla repetidas veces.

— Yo más — rodeé su cuello con mis brazos y lo besé y después lo abracé — Eres hermoso — susurré en su oido.

— Es obvio — dijo y yo solté una risa — Pero tu eres mas hermosa — se separa de mi y me besa.

— ¡Hola! — exclamó mi hermana entrando por la puerta junto a Taehyung.

— Hola — nos saludó él sonriendo. Jin y yo le devolvimos el saludo con un movimiento de mano.

— ¡Quiero helado! — exclamó Cata, corriendo hacia la cocina y volvió con dos cucharas mas y se sentó en el sillón junto a nosotros.

— Tae, ven — lo llamó, él fue en donde estaba mí hermana.

— Bueno, ¿qué hicieron hoy? — preguntó mi hermana comiendo helado.

— Fuimos al cine y después a comprar el helado — respondí sacando el pote de su mano.

— ¡Que bueno! — dijo sonriendo y volvió a sacarme el helado de las manos — Dame — dijo y metió su cuchara en el helado.

Así pasamos toda la tarde hasta, hablando y con mi hermana peleándonos por quien tenía el helado en las manos. Los chicos se quedaron hasta muy tarde y también se quedaron a cenar junto a nosotras.

— Adiós, belleza — Jin me dió un beso rápido en la boca.

— Adiós — lo saludé mientras sonreía.

—  Adiós, Cata — saludó Jin a mi hermana — Tu, te vienes conmigo y despegate de tu novia — Jin tiró de la capucha de la campera de Tae y se fueron.

— Vamos — dije tirando a mi hermana del brazo.

Las dos entramos a casa y apagamos todas las luces y después subimos a nuestros cuartos para ir a dormir.

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Editado: 18/11/2020.

Jin y Tu→#1 [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora