One Shots +18

Xiaojun // WayV.

—¿Estas segura? —asentí— ¿No quieres que te esperé? —negue con la cabeza.

—Ten solo voy hablar con el profe —lo agarre de los hombros— ahora vete a la casa y ve haciendo el almuerzo —le sonreí y él solo bufó al instante.

—Si si si —rodeé los ojos— no vemos hermanita —me dió un beso en mi frente.

—Adiós Monalisa —reí

Al instante solo me fulmino con la mirada.

—Vas a ver en la casa —comenzó a caminar hacia la salida.

—YO TAMBIÉN TE QUIERO —grite.

Me miro con su cara “No me jodas ____” para después salir por esa puerta grande del instituto. Llegué al salón del profesor Xiao lo primero que hice fue tocar la puerta «Pase» Escuché del otro lado.

—Buenas Tardes profesor Xiao —hice una reverencia para después sentarme frente a él.

—Buenos tardes señorita ____ ¿Qué se le ofrece?—dejo unos papeles a un lado del escritorio.

—Profesor yo quería preguntar ¿Por qué me puso un 30? —lo mire algo molesta y algo confundida.

Lo había hecho bien era para poner un 100.

—Estabas copiando de Jeno —se quitó los lentes— ¿Crees que soy idiota? —me miro sin ninguna expresión.

“Si” pensé.

—No profesor como cree solo pensé que no iba a percatar —susurre.

Ya está funada.

—No dije nada frente a tus compañeros para que no pase vergüenza —se levanto de su asiento para luego caminar mirando pensativo hacia la nada.

¡Mierda! Ahora sí estoy cagada le prometí a mi mamá que iba a sacar un 100 en Biología. No ahora sí con ganas me va quitar la academia de baile.

—Señorita ____ —se sentó en el escritorio.

—Esta bien ahora me largo —bufé.

Ahora lo que me va esperar en casa.

—No ____ yo quería llegar a un acuerdo con usted —lo mire sorprendida ¿Qué tipo de acuerdo?.

—¿Qué tipo de acuerdo? —pregunté.

—Usted tiene algo que yo quiero y necesito —se mordió el labio discretamente.

A no ya se dónde se va este idiota.

—Y si hace lo que yo quiero le pongo un 100 a su examen y el siguiente que sigue —me sonrió.

Era una buena propuesta.

—¿Qué cosa yo tengo y usted necesita? —alcé mi ceja y crucé mis brazos.

Él solo se bajó del escritorio y se acercó a mí.

—Su coñito señorita ____ —susurro en mi oído haciendo que me diera un escalofrío por todo el cuerpo.

Abrí mis ojos como platos. Nunca había tenido relaciones sexuales. Mi hermano siempre a sido muy protector y nunca me a dejado tener enamorado dice “Estas muy chiquita para eso” Ajá tengo 17 años y ni siquiera e dado mi primer beso.

—Y ¿Qué opina señorita ____? —puso sus manos sobre la banderillas de silla para después mirar a los ojos.

—Soy virgen... —susurre avergonzada.

—Voy a intentar de ser cuidadoso —su voz se volvió ronca haciendo que me diera un cosquilleo en el vientre.

¿Qué me está pasando? Me agarro de la barbilla haciendo que lo miré para después juntar nuestro labios. Sus besos no eran tierno ni suaves sino salvajes y algo desesperados.

—Vamos sientate en el escritorio —susurro entre besos.

Solo asentí todo esto era nuevo para mí.

—¿Qué más hago? —lo mire algo inocente ya sentada en el escritorio.

—Me encanta cuando haces eso —se mordió el labio mirando me de arriba hacia abajo.

Él se acercó a mi para después abrir mis piernas. Las acomodo en el escritorio para frotar sus dedo sobre mí braga haciendo que se me escape algunos gemidos.

—Ah... —mordí mi labio no quería hacer mucho ruido.

—Di mi nombre —me ordenó.

—XiaoJun... —moví mis caderas en círculos para poder sentir mejor.

En cambió él con una de sus mano que está libre se aflojo la corbata para después abrirse el cierre de su pantalón para sacar su miembro ya erecto. Me sorprendí mucho al ver su pene pero por un lado me entró el miedo ¿Cómo todo eso va entrar dentro de mí? Dejo de frotar sus dedos en mi parte íntima.

—Date la vuelta ____ —solo asentí.

Se acerco a mi por detrás. Tiro de mi blusa dejando ver mi brasier pero el sacó mis senos hacia afuera y comenzo a jugar con ellos.

—XiaoJun... —no voy a negar me sentía un poco incómoda.

—¿No te gusta? —pregunto dejando de tocarlos.

—No esque... —me interrumpió.

—Tranquila —susurro en mi oído para después morder el lóbulo haciendo que sienta una especie de protección al no querer forzarme.

De pronto sentí como me bajo la falda junto a mis bragas.

—Tienes un lindo culito ___ —acarició a los mencionados.

—Xiaojun... —me está arrepintiendo quise levantarme pero el puso su mano en mi espalda.

—Vamos nena se que te va gustar —quito su mano para después separar mi nalgas y empezar lamer entre ellas llegando a hasta mí vagina.

—Xiao-Jun... —jadeó.

Arquie mi espalda en ese momento sentí como metió su lengua en mi entrada. No para de chillar al principio me dolió pero al pasar los minutos dejo de dolerme incluso se volvió algo placentero. Creo que está apunto de venir cuando él paró y me tiró una nalgada haciendo gritar fuerte mientras recuperaba un poco de mi respiración. 

—____ estas húmeda —metió la glande en mi vagina— tan hermosa... Y eres completamente mía —

Comenzó penetrarme lentamente haciendo soltar varios gemido de dolor. Cuando entro completa en mí saco su pene lentamente hasta mi entrada para entrar de nuevo en mi pero con fuerza.

—Xiao-jun... —agache mi cabeza y apreté la mesa con mis manos— Ah... —gemi de dolor.

—Mierda estas apretada —gruñio— tu coño aún no se adapta pero tranquila en un momento te dejará de dolor —me penetró con más fuerza.

No paraba sentía como me destrozando en dos pero la sensación era demasiado placentera. De pronto salió de mi. Me volteo haciendo que me eche en el escritorio. Tomo mis dos piernas y lo puso a su hombro para después penetrarme. Él solo entra y salía con rapidez.

—Xioa-Jun... —gemi.

De pronto me agarró de la cintura pegándome a él haciendo que lo abracé a los hombros. Me cogió bien de la pierna para después caminar hacia una silla y sentar mientras yo aún seguía arriba sin mucho que pensar. Me comenzó a mover de abajo hacia arriba embistiendome fuerte. Me sentía agotada entonces recargue mi cabeza en su hombro. Sentí como mi paredes vaginales lo apretaban haciendo que él me embistiera más fuerte. Me está destrozando y eso me encantaba.

—Xiaojun... —gemi desesperada.

—Shh... —susurro en mi oído.

Dió sus últimas embestidas haciendo que me veniera.

—____... —gruñio.

Sentí como un espeso líquido invadió en mi vagina. Salí de él callendo al piso exhausta. Intento recuperar el aliento. Después de un tiempo él solo guarda su pene en su pantalón.

—No olvides que no tienes que hacer trampa —me advirtió.

Yo solo asentí. Tomo su portafolios mientras yo me levantaba del piso y aprovecho en ese momento para darme una nalga. Dejándome con más ganas que se volviera a repetir esto.