Estimada vecina...
Sea usted tan amable de no gritar cuando tenga el frutidelicioso. Nadie quiere saber que la están cogiendo.
Gracias disculpe las molestia.
Mis mejillas están ardiendo con tremenda nota de mi vecina. Mi mejor amigo estalló de carcajadas mientras yo cogía la nota que se encontraba pegado en mi puerta para arrugarlo guardandolo en mi bolsillo rápidamente. ¿Qué más lo habrá visto? Que vergüenza.
—Deja de reírte —me quejé mirando mal.
Su sonrisa disminuyó recuperando la compostura.
—Esque... —apretó los labios para no reírse pero volvió hacerlo.
Rodeé los ojos para después negar con mi cabeza rotundamente mientras abrí mi departamento quitándome los zapatos poniendo a un lado. No voy a negar que esto da demasiada vergüenza pero ¿Quién no puede gritar cuando la están cogiendo bien rico?.
—¿Vas a pasar o quieres quedarte allí como pendejo? —hable arrecostandome en la pared cruzando mis brazos mientras alzaba mi ceja izquierda.
—Ya no te pongas dramática ____ —nego sonrió mientras entraba cerrando la puerta sin antes quitarse las zapatillas— ¿Qué tal? —apoyo sus manos en mis lados quedando frente a frente— si pruebo ese mito —me miro con seducción— el que gritas cuando te cojan —
Me mordí el labio inferior.
—¿Me estás diciendo que quieres follarme? Señorito —lo mire divertida.
—Si —dijo con un tono de sensualidad.
Sentí como mis vagina palpitaba siendo una corriente. Mi mirada bajo a sus labios rojizos esos que daba ganas de besarlos hasta morir. Puse mis brazos en sus hombros anchos. Acerque mi rostro hacia el suyo chocando nuestra respiraciones.
—Y que esperas —susurré atrapado sus labios.
Sus manos dejaron de apoyarse en la pared para rodear mi cintura. Su lengua abrió ligeramente mis labios para poder entrar en mi boca jugueteando con mi lengua. Jadeó de exitación sintiendo mis bragas algo mojadas. Me cogió de las piernas subiendo a él. Pude sentir su erección. Comencé a menear mi cavidad con su sexo provocando que gemiera. Camino hacia mi habitación sin dejarme de besar. Me arrecosto en la colchón quitándose la camisa callendo al suelo dejándome ver su torso. Apoyé mis codos hacia atrás para admirar el tremendo espectáculo que me está ofreciendo. Se desabotono su jeans bajandolos completamente quedando en boxer. Mi boca se hizo agua cuando ví su erección marcando su boxer. Me levanté de la cama yendo hacia él con una mirada de lujuria. Lo agarré de los hombros para moverlo un poco empujándolo en la cama. Se acomodo a la misma postura que realize anteriormente con su mirada de deseo. Me quite mi polo tirando hacia la silla de mi habitación desabotonandome mi short callendo al suelo rápidamente. Me volví acercar a él tocando su pecho arrecostandolo.
—____ ¿Me vas a dominar? —me miro divertido.
—¿Qué? ¿Ahora quieres que te ponga mi pito? Si quieres me convierto en alfa —hable riendo un poco dándole un beso pequeño.
—Mejor cállate —respondió riendo cogiendo de la cintura dándome vuelta en la cama.
Sus labios pasaron por mi cuello succionando con ellos. Cerré mis ojos disfrutando el momento de placer que producía.
—SunWoo... —jadeó tocando su cabello con mis dedos.
Mordió con rudeza bajando una de sus manos a mi cavidad. Hizo a un lado mi braga tocando mis pliegues vaginales causándome varios espamos. Sus dedos tocaron mi clítoris haciendo que chillé. Sonrió satisfecho separándose un poco cogiendo mis extremos de mi braga subiendo haciendo que mis piernas se levanta por un instante. Me cogió de la cintura sentandome en él. Bajo un poco su bóxer saliendo su pene a la primera. Su cabecita se veía algo brilloso por el pre-semen. Lo masturbo un poco para luego acomodar su glande en mi vagina para luego introducirlo lentamente.
—Sun-Woo... —gemi abrazando sus hombros arañando su espalda un poco dejando quizás una notable marca.
Mis paredes se acomodaron a la longitud de su pene. Sujetó mis caderas para empezar a subir y bajar a su gusto. Mordí su cuello por instinto de exitación.
—Joder ____ —tiro su cabeza hacia atrás.
Sus manos dejaron de agarrar mis caderas subiendo al broche de mi sostén. Empecé a moverme por si sola gimiendo con cada estocada. Dejé de abrazarlo para sacarme el sostén por completo. Me arrecosto acomodando sus piernas en el colchón para después embestirme con velocidad haciendo que arañara su espalda de nuevo al sentir como mis paredes como lo apretaban aferrándose a su pene.
—SUNWOO... —sentí un cosquilleo en mi vientre.
—____... —gruñio.
No soporté mas viniendome gritando por un excelente orgasmo. Él dió unas cuantas penetrandas para finalmente eyacular en mi abdomen. Apoyo su frente con la mía mientras respirabamos agitados con una leve capa de sudor. Minutos después nuestra respiraciones ya se calmaron.
—¿Quieres continuar porque tengo para rato? —hablo rozando sus labios por mis senos.
—Que me deje coja dice —le respondí con cierta burla.
—No te vas arrepentir —volvió a besarme a los labios.
Como lo prometió al día siguiente no pude caminar y los vecinos me había puesto una multa pero ni al caso. A uno no le quitan lo vivido.
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One Shots +18
أدب الهواةSi te gusta que te dejen coja como Sheyla Rojas entra a este libro XD. Ok no pero ya se dan una idea de que va tratar. El que no le guste este tipo de contenido por favor no ingresé menos ponga comentarios ofensivos. Gracias no los molesto más. Disf...