One Shots +18

SooBin // TXT.

Sujete mi cabello con una liga para después arrodillarme frente a él tocando su pene suavemente con mis dedos.

—____... —jadeó prácticamente susurros avergonzado.

Tenía las mejillas rojisimas como un tómate.

—YeonJun nos puede ver —hablo asustado mirando un poco hacia atrás donde se encontraba el anterior mencionado durmiendo en un sillón.

Lo único que nos tapaba a nosotros era la cocina y sus muebles.

—Mi hermano tenía sueño pesado así que no creo que despierte SooBin —respondí sin mucho interés.

Mi hermano mayor no sabía que SooBin y yo éramos algo. Bueno a YeonJun no le va agradar la idea que yo esté con él por el simple hecho que es su amigo. Sus supuestos códigos.

—Pero si despierta —me miró con miedo.

Solo negué. Y lo agarre su mano para después pasar mi lengua en uno de sus dedos mientras lo masturbaba. Cerro sus ojos disfrutando la sensación. Está apunto de llegar cuando de pronto su cuerpo se tenso al escuchar su nombre en un voz masculina.

—¿SooBin qué hora es? —pregunto con su voz ronca bostezando.

—Es las 5 de la tarde Yeon-Jun... —hablo casi tartamudiando.

—Ah... —se volví a tirar en el sillón— 5 minutos más —susurro para luego quedarse dormido al instante.

Suspiró de alivio.

—____ ¿Te parece si vamos al cuarto? ¿YeonJun ahora sí nos puede ver? Por favor —sugirió asustado mientras me levantaba.

Solo asentí y lo cogí de la mano llevándolo a mi habitación. Apenas llegamos lo tire a mi cama para después subirme encima de él masturbandolo un poco más.

—____... —gemio cerrando sus ojos.

Estuve unos minutos así hasta que por fin se vino manchando mi mano un poco pero nada importante. Y me tire a su lado.

—Gra-cias... —jadeó mientras regulaba la respiración.

Solo asentí. Me coloque de costado para verlo. Su pecho subía y baja por lo agitado.

—¿Deberíamos decir a YeonJun? —preguntó mirando al techo.

—Si SooBin aún no creas me estoy cansado esconder lo que siento por tí —

—Esta bien voy hablar él —giro su cabeza dónde está yo— vale —

—Vale —sonreí satisfecha acercándome sufriente a él para besarlo.

Mi mano volvió a bajar dónde su pene y comencé a estimularlo.

—____... —gemio entre besos.

Se separó de mi levantando se la colchon para después jalar mis piernas hasta las orillas de la cama. Tocó con sus dedos mi entrada mientras colocaba mis pies en sus hombros.

—Estas húmeda —roso mi clítoris causando me varios espamos.

—SooBin... —quebré mi espalda.

Acomodó su pene en mi entrada y comenzó a entrar lentamente en mi. Ni pude evitar gemir al sentirlo. Mis paredes se acomodaron a su longitud y comenzó a moverse en círculos para luego embestirme lento.

—SooBin... —gemi.

Acomodó mis piernas poniendolas a costado cada una para acercarse a mí y comenzar a besarme en el cuello.

—Soo-Bin... —jadeó de dolor sentir como supciono una parte de mi piel dejándome una notable marca para después pasará sus labios con los míos.

Mis piernas abrazaron sus caderas para profundizar sus embestidas. Empezaron a ser rápidas y algo bruscas pero eso no le quita el hecho que se sentía demasiado bien. Comenzó a gemir entre besos. Sentir como mi cavidad quería más y más. Chillamos los dos cuándo nos venimos al mismo tiempo. Rápidamente cayo en mis pecho sin lastirmarlos. Mientras regulabamos nuestra respiración escuchamos la voz de mi hermano gritar su nombre. Los dos nos miramos alarmados y salió rápidamente de mí. Pero recordamos que él había dejado su pantalón en la cocina y yo mi vestido.

—¡ESTAN EN VARIOS PROBLEMAS! —grito enojado desde la otra puerta.

Estamos muertos.