Cap 5 •Alpa Kilyan•

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Pasaron 4 años mas y el alfa Kilyan regreso, y fue cuando todo comenzó. Recuerdo que era ya de noche y estaba en la oficina con Liam terminando de redactar una invitación a la manada vecina era lo ultimo que hacia falta para terminar los labores de dos semanas y así poder descansar ambos, yo ya vivía en la mansión/castillo así que no importaba mucho la hora, cuando terminamos Liam fue el primero en levantarse y se dirigió a mi;

-¿estás bien?- me pregunto en lo que giraba mi silla para verle.

-si, solo estoy cansada, no siento ya mis piernas- me queje, estar caminando todo el día y después estar sentada por horas haciendo y enviando cosas por correo era agotador.

-humanos...- resoplo Liam -se me olvida que se cansan muy rápido, apenas son las 2am-yo solo le mire mal y el alzo las manos en señal de paz.
-ok, ok, ya entendí, no te fastidio más, y en muestra de mi arrepentimiento te llevare a la cocina para que cenes algo y después a tu habitación, ¿te parece?- yo solo asentí con fatiga, y el me tomo entre sus brazos y me cargo como si de un bebé se tratara, yo pase mis brazos por su cuello y me acomodé.
No era la primera vez que me cargaba, de esa manera nosotros solíamos tontear algunas veces y por ello algunas muchachas creían que teníamos algo mas aya de una amistad... es verdad que teníamos algo, no era oficial pero si que existía, aunque siempre manteníamos la profesionalidad, durante el trabajo solo éramos jefe y mano derecha, después de que este acabara ya éramos una especie de "novios", por eso es que nos hiba bien adelantar el trabajo de dos semanas, así podríamos estar juntos amenos que un imprevisto saliera. Pero si habría algo que deseara mas que nada era que el alfa llegara ya con su luna, así Liam ya no estaría a cargo de la manada y podría estar con el y hacer oficial nuestro noviazgo. Pero vaya que la diosa luna escucho mi petición.
Antes de salir de la oficina le bese el cuello y murmure un simple -gracias- y fue en ese momento cuando la puerta se abrió de golpe mostrando a un Kilyan enfadado, tenia muchos años sin velo peor aún lo reconocía, esos ojos amarillos distintivos de la familia "real" eran algo que no podías olvidar ni confundir.

-hermano...-intento hablar Liam pero su hermano lo interrumpió con la voz entre cortada y con los ojos destilando ira, con una mirada llena de desaprobación y odio, la cual era dirigida para mi.

-¿que mierda haces cargando a esa humana?- entonces ¿era eso?, estaba así solo por que su hermano estaba cargando a una humana.

-Esta "humana" tiene su nombre, alfa-dije con voz firme, tenia miedo, al final, el era el alfa, y como yo no tenia mate podría hacer lo que quisiera conmigo.

-¿A si?, pues créame que es algo que no me interesa y no le eh permitido hablar señorita, así que cállese y lárguese de mi casa, antes de que...- las palabras se quedaron en el aire ya que Liam me bajo de una manera abrupta y encaro a su hermano defendiéndome.

-¿antes de que Kilyan?, por que ella no es una simple humana, ella en los seis años que no estuviste me ayudo con la manada, y por cierto vive aquí, yo mismo la invite a que vivirá aquí y si no te parece es tu puto problema, por que esta casa no solo es tuya, nos pertenece a Megan y a mi también- su voz era de furia pura sus ojos brillaban igual o mas que los de Kilyan, ¿que había echo?, por mi comentario insolente Liam y Kilyan estaban apunto de agarrase a golpes, tenia que hacer algo.

-Liam, no vale la pena, ¿si?, lo mejor sera que me vaya, nos vemos mañana.- le toque la mejilla y le sonreí con ternura, esto pareció hacer que se calmara un poco, vi a Kilyan de reojo y lo vi tan rojo y con sus dientes creciendo que sabia que era mejor que me fuera pronto, pero aun así agrege; -además, Kilyan el es el alfa y tengo que obedecer, como el dice, solo soy una simple humana- le di un beso en la comisura de los labios, tome mi bolso y pase por un lado del alfa me detuve a su costado y le dije con molestia y simplemente por modales: -que pase una buena noche alfa- hice una reverencia con la cabeza y me largue de aquella casa. Subí a mi auto y conducí hasta la ciudad humana vecina la cual estaba a dos horas de la manada, cuando llegue busque un lugar para quedarme, tenia dinero en la cartera y mi cuenta de banco tampoco estaba vacía, había ahorrado lo suficiente para cuando llegara el alfa y tuviera que buscarme otro trabajo y el momento había llegado; pero como habría quedado clara la postura del alfa hacía los humanos lo mejor seria que me mudara a la ciudad para vivir con los de mi especie.

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⏰ Última actualización: Mar 10, 2022 ⏰

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