Las Cinco Pruebas del Diablo (#1 Trilogía "Justicia De Media Noche")

Parte nueve: "Un malvado y jugoso secreto"

Capítulo 42: "Más de lo que crees"

(Narrado por Hanna)

-Aún desconocemos el contenido de ese líquido que nos inyectaron. ¿Realmente son nuestros poderes?- comento.

-Si no, ¿qué más? vamos, ya has visto a Amy, con eso de la invisibilidad, Nathaly, la velocidad, y Elizabeth, eso que te obliga a hacer lo que ella te pide.- suelta Serena.

Dejo la taza de café en la mesa y me levanto, este es mi quinto. Cath se levanta conmigo y me pide hablar a solas, mientras que Serena se queda sentada. Cuando ella y yo nos retirábamos, John aparece y se queda con Serena quien está mirando un punto fijo en la mesa.

-¿Estás bien?- pregunta él.

-Sí,sí, es Aria, me tiene muy preocupada. Hace semanas que no sé nada de ella...

-Está bien, los justicieros son unos hijos de puta, pero como el nombre lo indica, son justos. Ya aparecerá y verás que está bien.- dice él mientras le toma de la mano.

En cualquier momento sentiría celos pero ahora... ahora todo es diferente. No solo mi vida, si no que también la de mi entorno. Ya sé que nada de esto es mi culpa, que todos cometimos un pecado, incluso John. Mierda, no puedo hablar de esto con él, pero necesito saber que fue lo que hizo para merecer tal castigo.

No pude oír el resto de la conversación ya que Cath toma mi mano y me lleva al dormitorio. Lo primero que hace cuando entramos es cerrar la puerta. Luego me abraza y escucho sollozos.

-Hanna, ¿recuerdas lo que te dije en Monney's? que me suicidaría... cambié de opinión, me entregaré a la policía.

-¡¿Qué?!- grito pero ella me tapa la boca.

-La muerte es una salida fácil, no es suficiente. En cambio, contarle toda la verdad a la policía lo será.

-¿Y qué le contarás?

-Hanna, hay cosas que no te conté... por ejemplo, Allysa no se suicidó por simples discusiones... verás, yo consumía drogas. Un día la invité a hacer lo mismo y...

-Cath, yo...

-Y por mi culpa, ella no se dio cuenta de lo que estaba haciendo. Tan solo se asomó por la ventana...- comienza a llorar- y pienso en ello todos los días. Si no la hubiera arrastrado al caos que son las drogas, ella...

-Hey, no llores. Tú no sabías eso...

-Y luego voy y te violo...

-¿Qué? no, no, no. Yo también quería hacerlo...

-No me comprendes, estabas en un momento de debilidad y yo me aproveché... no mereces nada de esto, yo sí. Todos es mi culpa.

-No permitiré que digas esas cosas. Cath, nada de eso fue así.

-¿Entonces qué? supongamos que sobrevivo a las cinco pruebas, ¿y? ¿qué sigue? ¿se supone que ya no tendré que pensar en mis pecados y...- suspira- nada de esto tiene sentido.... hace meses solo quería ver a mi vieja amiga.

-Yo también.

Le doy pañuelos a Cath y volvemos al salón. En este, está John consolando a Serena. Él se levanta de la silla, me ve y se me acerca.

-Tenemos que hablar.-me dice al oído.

Me lleva rápido y un poco violento hasta que llegamos a nuestra habitación, otra vez aquí. Yupii.

-Hanna, tenemos que volver a Seattle.

-¿Por qué? sabes que no podemos... menos ahora.

-Todo esto, el incendio, los justicieros, las pruebas, es demasiado. Odio estar todo el tiempo alerta a que nada esté fuera de lugar, estoy harto de estos juegos de Devil y las hermanas, harto de que nunca tengamos tiempo para nosotros.