SUPER PAPÁ 4x4 KAKAIRU

«Mi oficio»

«Mi oficio»

Cada año la misma soberana estupidez.

Por más que trataran de hacerle ver la utilidad de aquello, Kakashi solo pensaba que no era más que un invento absurdo para perder más días lectivos. Pero ¡ojo! eso no era lo que le molestaba, a él le parecía genial todo lo que supusiera no tener que atender a los babuinos, esto... alumnos. La parte horripilante del "Dia de Los Oficios de Las Mamás y Papás" era precisamente eso: aguantar ahora también a "lis mimís y lis pipis". Como si no tuviera suficiente con los retoños.

Oh, pero aquel año Kakashi se sentía especialmente irritado y nadie necesitaba preguntar la causa. Era patente: el padre todoterreno.

Lo único bueno era que solo podía ir uno de los dos padres por crío.

Lo malo era que Naruto solo tenían uno y por fuerza tenía que ser...

—¡Iruka!

Gritó Naruto cuando lo vio salir frente a toda la clase, envuelto en el aplauso de sus compañeros y los otros padres.

—¡Ese es Iruka, es mi papá! —le decía orgulloso a los otros niños.

El mencionado estaba un poco tímido, al salir en tercer lugar tras un bombero y una policía, ahora él no sabía cómo lograr impresionar a los niños. Aunque sin saberlo ya tenía la atención captada de algunas madres y, por supuesto: del profesor.

Kakashi lo miró de arriba a bajo y por alguna extraña razón, tal vez el tedio, sintió curiosidad por el trabajo de Iruka. Con toda probabilidad: sí era por el tedio...

«¿El papá solo y soltero a qué se dedica? ¿cuánto ganará? », se preguntaba mientras aprovechaba para mirarlo sin reparo pues no había excusa para no tener sus ojos sobre él si iba a hablarles.

—Hola, como Naruto bien a dicho mi nombre es Iruka y soy su papá —rió nervioso—. No hay mucho que contar, trabajo en unas oficinas, no es tan emocionante como los demás..

—Pero Naruto siempre dice que su papá es monitor —dijo uno de tantos críos.

—Sí, bueno, por las mañanas trabajo en un cole como este con niños... con necesidades especiales, le llamaremos así. No soy profesor soy educador. ¿Sabéis lo que es un educador?

—Sí, aquí tenemos uno de esos... —contestó Kakashi aunque era obvio que la pregunta iba para los niños.

Todos los ojos se pusieron sobre él y simplemente cruzó su pierna y alineó los papeles que tenía sobre la mesa disimulando.

—Solo lo aclaraba... —comentó—, continúe, trabaja ahí ¿y por las tardes en las oficinas?

—Sí, nada importante, solo reviso y archivo los presupuestos y los informes, soy algo así como un administrativo .

—¡Trabajas mucho! —gritó un niño.

—¿Tienes dos trabajos?

—¡Qué aburrido!

Se sumaron algunos críos más y aunque sus padres trataron de corregirlo al momento, Iruka lo había oído.

—Claro, eso es porque... —le dedicó una sonrisa a Naruto— ... porque Naruto solo tiene un papá, que soy yo —sonrió de nuevo—. La mayoría de vosotros supongo que tiene dos papás, de modo que si cada uno tiene un trabajo, en total...

—Dos trabajos —dijeron varios niños al unísono, incluido Naruto.

—Muy bien. Por eso tengo dos trabajos, pero no es aburrido si trabajas en algo que te gusta...

—También te cansarás el doble —bromeó uno, interrumpiendo.

Iruka sonrió de nuevo.

—¡Pero yo desayuno muy fuerte por las mañanas! ¡Y nunca me canso!

Los niños siguieron haciéndole preguntas como si nunca se confundía con las cosas de un trabajo u otra, sobre cuál le gustaba más de los dos... e Iruka contestaba a todas de forma ingeniosa y divertida como si tuviera un don para tratar con los niños.

Mientras tanto Kakashi le miraba todo el tiempo, sentado desde su escritorio de profesor. Nunca se había parado a pensar en eso. Él estaba allí unas horas sentado trabajando -que también era agotador y difícil- pero a final de mes su sueldo al completo iba para él y sus pocos caprichos. ¿Podía Iruka tener caprichos? Lo miró de arriba a abajo una vez más: no. No obstante, a Naruto nunca le había faltado de nada; llevaba todos los libros y material, iba a todas las excursiones... Ese chico hacía malabares, más bien milagros para sacar adelante él solo a Naruto a costa de un tremendo sacrificio. Pero ahí estaba contándolo como si no fuera nada, como si no tuviera mérito apenas o fuera algo fácil de hacer.

Iruka era joven y atractivo todavía ¿por qué no se buscaba a alguien que le ayudará? Pensaba Kakashi. «Alguien soltero, de su edad, sin muchos gastos, a quien no le moleste en exceso tener que tratar con críos... No sé, si yo conociera a alguien así no me molestaría presentárselo...».

Salió de sus pensamientos cuando todos rieron, al parecer había dicho algo bastante gracioso. ¡Se lo había perdido! Sin embargo, no pudo pedir que lo repitiera porque al parecer, con tanta risa y halago hacia Iruka, Naruto se había puesto celoso. Así que ni corto ni perezoso se levantó y tomó a Iruka de la mano para llevarlo a su pupitre.

—Ya está, ya está. Ahora otro papá...

E Iruka, tras dar las gracias, volvió a la mesa. Naruto se le sentó encima de su regazo, mirando con recelo a los otros niños. sí, había quedado claro que era fantástico, pero era su papá: que no vinieran ahora a quitárselo.