CAMINOS

capitulo 2

POV NATALIA

-Cariñooo!!- dijo él con alegría- Te estoy esperando en la habitación...

-Sí ya voy...ve poniéndote cómodo.

Me dirigía hacia la habitación cuando me empezaron a bombardear a mensajes. Mierda era María, a ver que historia creíble la contaba yo ahora como excusa.

MARI: Nataliiiaaaa

MARI: no se que te habrá pasado

           antes, pero que sepas que

          luego no te vas a librar de

          salir.

MARI: porque como no vengas,

           te juro que me presento

           en tu casa.

MARI: vamos a estar en este pub.

MARI: "ubicación"

Y que hago yo ahora, no puedo decirla que no, pero sino que hago...

Me puedo escapar por el balcón porque vivimos en un segundo y no está muy alto, y además, había realizado esta prueba en la academia de bomberos y la sabía hacer a la perfección. Pues decidido.

                                                                                  NAT: que sí Mari, que luego voy

                                                                                 NAT: iré sobre las dos

MARI: perfect

Sabía de sobra que Mikel sobre la una estaría como un tronco, así que tendría la posibilidad de escaparme y él no se daría ni cuenta.

-Nataliaaaa, vienes o qué??

-Ya voy cariño- me entró una arcada nada más decir eso.

Me dirige hacia la habitación y ahí estaba él, sentado en la cama con la espalda apoyada en el cabecero y con las manos detrás de la cabeza.

-Bueno venga metete aquí conmigo en la camita, ya verás que a gusto vamos a estar aquí los dos.

Me metí con él en la cama y nada más apoyarme en el cabecero, se tiro encima mía y empezó a besarme y a tocarme los pechos. Besarle me producía una sensación en el estómago algo desagradable.

Al rato de estar tocándome y besándome decidió que era hora de mi castigo.

-Mmmm cariño..., estas preparada para tú castigo-lo dijo con un tono placentero

-Siii...-le respondí usando el mismo tono

-Si en realidad soy muy bueno, si en realidad no es un castigo. No ves lo bien que te lo pasas...

Pase olímpicamente de él y directamente me metí debajo de las sabanas para cumplir con mi castigo.

Cuando termine salí corriendo hacia el baño para vomitar y lavarme los dientes, me daba muchísimo asco aquel sabor.

Cuando salí del baño me dirigí hacía el dormitorio para acostarme ya que Mikel todavía no se había dormido.

-Te lo has pasado bien??-me preguntó nada más entrar al dormitorio.