POV NATALIA
Sabela y yo llegamos al parque. Todavía no había mucha gente de nuestro turno, solo la capitana, la jefa y nosotras dos.
-Huy, que pronto venís vosotras dos hoy no??
-En el trabajo hay que ser puntual.-dijo Natalia.
-Sí, pero no tanto, que faltan quince minutos.-dijo la jefa.-Por cierto como está la chica??
-Está bastante animada la verdad.
-Pues mira tú que bien.
-Por cierto, ya tienes la lista de los fallecidos??
-Sí, está en mi despacho.
-La puedo ver??
-Si claro, vamos a cambiarnos y luego te pasas a mi despacho y te la dejo.
-Vale.
Me fui al vestuario a cambiarme mientras le preguntaba a Alba como se llamaba aquel chico.
Natalia: Albii
Natalia: como se llamaba aquel chico del incendio??
Alba: Alfred García
Alba: por favor escríbeme cuando sepas algo.
Natalia: valee
Alba: aunque sea una mala noticia
Natalia: que sii
Alba: prométemelo
Natalia: prometido
Termine cambiándome en compañía de la capitana y Sabela.
-No encuentra a alguien??-preguntó la capitana.
-Su amigo desapareció en el incendio. No coge el teléfono y no está en el hospital.
-Sabes que...-la corté
- Probablemente esté muerto. Creo que es lo más probable.
-Y como se lo piensas decir??
-Pues no tengo ni idea, pero me está diciendo que cuando sepa algo que le mande un mensaje.
-No es buena idea decir malas noticias a través de un teléfono.-intervino Sabela por primera vez.
-Lo sé. Prefiero estar con ella cuando se lo diga.
-Te va a dar la tabarra mandándote mensajes.
-Ya, es lo que hay.
-Si quieres después por la tarde noche cuando terminamos con un aviso vamos al hospital y se lo dices. Es cuando menos avisos tenemos y podrás estar más rato con ella.
-Vale, y que hago el resto del día??me ha dicho que se lo diga nada más saberlo.
-Pues no sé. Apágalo.
-Y si pasa algo??
-Vale sí, es mejor que lo tengas encendido.
-Le diré que no he tenido tiempo de mirarlo.
-Pero, una cosa.-interrumpió Sabela.-Todavía no sabes nada.
-Ya, pero es probable.
-Pero que sea probable no significa que su nombre este en esos papeles.
-Pues a ver si es verdad.
Salí del vestuario y me fui al despacho de Galera. Allí me estaba esperando sentada encima de la mesa con los papeles en la mano.
-Toma anda.
-Gracias.
Lo cogí, había muchísimos nombres, el incendio había sido una masacre.
-Qué paso cuando yo me fui?? Por qué hay tantos nombres??
-Hubo tres explosiones cuando tú te fuiste.-hizo una pausa.-En la primera explosión teníamos a bomberos dentro, pero tuvimos suerte de que saliesen ilesos. Durante la segunda no hubo tanta suerte. Bomberos de la treinta y siete murieron.-me llevé la mano a la boca.-Eran los que estaban dentro. Nosotros, la doce tuvimos suerte porque mis hombres y mujeres acababan de salir y ellos cogieron el testigo para revelarnos. A la mayoría de tus compañeros no les quedaba oxigeno en las botellas, y la treinta y siete decidieron revelarnos por un rato.
-Madre mía...-no me lo podía creer.-Y la siguiente explosión??
-Después de la segunda explosión el techo se vino abajo e hizo que la infraestructura no fuese segura. Entonces el comandante Merino dio la orden de que ningún bombero volviese a entrar.
-El comandante estuvo allí??
-El incendio estaba muy descontrolado y tuvo que venir.
-Y la tercera explosión??
-Cuando el comandante dio la orden de que nadie volviese a entrar porque era inseguro, los de la treinta y siete dijeron que tenían a cinco bomberos dentro y que iban a entrar para sacarlos. El comandante les amenazó de suspensión si se atrevían a hacerlo, pero ya sabes qué pasa si uno de los tuyos, que encima si es de tu parque se ve atrapado en un incendio.
-Entras sin pensar en las consecuencias.
-Exacto. Entro su jefe, el teniente de brigada de rescate, dos bomberos de brigada y dos bomberos del camión. Al minuto de estar dentro hubo una tercera explosión. Esta vez nada se vino abajo, pero hizo la infraestructura más peligrosa todavía. Aquí el comandante estaba muy enfadado, y dijo que se alguien volvía a entrar no iban a tener una suspensión, si no que iban a ser revelados de su cargo de inmediato hasta nueva orden. Nadie entró. Y él dijo que ya se podía ir apagando el fuego.
-Cuantos fallecidos??
-Cuarenta y tres. Siete bomberos y treinta y seis civiles, entre ellos profesores, alumnos y personal de la facultad.
-Una masacre.
-Efectivamente. No me pasa esto desde aquel incendio de 1990 cuando todavía era una candidata.
-Cuantos murieron??
-Setenta personas. Fue en un incendio de un centro comercial de Barcelona. Todo se vino abajo, como aquí. Prometí que cuando fuese jefa nada de esto me iba a pasar, que iba a mandar bien a mis hombres y mujeres, pero desgraciadamente ha vuelto a suceder.
-Pero no ha sido culpa tuya.
-Ya, pero les podríamos haber detenido.
-Ya...
-Por cierto, luego vamos a volver a la facultad para buscar incidencias para ver si fue provocado o no.
-Vale.
Después de que la jefa Galera me contase todo lo ocurrido no tenía ninguna duda de que el amigo de Alba fuese uno de esos cuarenta y tres fallecidos.
Abrí la lista por la letra G. Empecé a leerla con detenimiento bajo los atentos ojos de la jefa. Encontré el apellido García, había varias personas con ese apellido en la lista, pero ninguno se llamaba Alfred. Volví a revisarlo pero no le encontré.
-Qué pasa??-Preguntó la jefa.
-Pues que no le encuentro.
-Pues eso es una buena noticia.
-Si... pero... es que no está en el hospital y no responde el teléfono.
-Haré una llamada a comisaría, luego te cuento.
-Vale gracias Noe.-se me escapo llamarla por su nombre- Perdón, jefa.
Noemí rió y cogió el teléfono para llamar a la comisaria de la policía nacional para ver si sabían algo de aquel chico.
Yo cogí el teléfono para llamar a Alba y contarle que su nombre no figuraba en la lista pero que no se hiciese ilusiones.
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CAMINOS
RomanceNatalia, una joven bombera con talento que se cruza en el camino de Alba Reche, una joven estudiante amante del arte. El problema es que en el camino de Natalia hay una piedra gigante llamada Mikel, el cual es su actual pareja y el que le hace la v...