CAMINOS

capitulo 20

POV NATALIA

Las enfermeras me trasladaban a la unidad de urgencias en una camilla mientras una me tapaba con varias gasas las heridas de a cara y la otra empujaba la camilla. El médico me iba inspeccionando la herida de la muñeca derecha.

-Cómo te llamas??-preguntó el médico.

-Natalia.-dije con dolor.

-Vale, Natalia. Tienes un cristal muy grande en la muñeca, y se encuentras muy próximo al nervio cubital. Así que no muevas mucho el brazo.

-Vale.

-Te anestesiaremos la zona de la muñeca para sacártelo y que no te duela tanto. Igual que los que tienes en la cara. Esos son más pequeños, pero igualmente cuando te lo saquemos te va a doler

El médico me iba explicando cómo iba a ser el procedimiento mientras que llegabamoos al box donde me iban a sacar los cristales.

Me anestesiaron ambas partes y el médico procedió a sacarme todos los cristales que tenía dentro.

Cuando sacaron todos había pasado como diez minutos desde que habían comenzado. Me suturaron la herida del brazo con un total de diez puntos, mientras que en los cuatro cortes que tenía en la cara, al no ser tan profundo utilizaron puntos de sutura adhesiva. En la de la ceja me pusieron dos, en la que estaba próxima al ojo una y las otras dos que se encontraban en la mejilla, en una me pusieron cuatro y en la otra tres. En fin, tenía la cara hecha un cristo.

-Pues ya está Natalia. Ya eres libre.

-Gracias.

-Ponte el cabestrillo y cógete unas semanitas de baja.

-Vale.

Cuando salí de la sala, me encontré a todos mis compañeros sentados en la sala de espera.

-Lacunza cómo estás??-preguntó la capitana.

-Pues con la cara hecha un cristo y un brazo destrozado.

-Parece ser que alguien nos va a abandonar en el trabajo durante unos turnos.-dijo la jefa.

-Pues parece ser. Me han dicho que me coja unas semanas.

-Pues descansa que te lo mereces. Nosotros nos vamos a ir yendo a la estación.-dijo la jefa.-Pero antes, puedo hablar contigo en privado un momento??

-Eehh...si.

-Nosotros vamos yendo al camión-dijo la capitana Pastor.-Venga, vamos chicos.

Me despedí de mis compañeros, especialmente de Sabela, que era mi mejor amiga dentro de la estación.

-Si necesitas cualquier cosa llámame.

-Vale...-la abracé y nos quedamos así abrazadas durante unos minutos.

Mis compañeros se fueron al camión y nos quedamos la jefa y yo en la sala de espera hablando.

-Dale una oportunidad. Estaba enfadada porque su mejor amigo acababa de morir.

-Ya...-me rasqué la nuca.

-Como vuelvas al parque y no estés con la rubia, te voy a meter con el extintor que tenemos en la puerta.

-jajajjjaja-me reí por el comentario de Noemí.-Espero que no lo digas en serio.

-Lo digo muy enserio. Así que como vengas sin ella ya sabes lo que te va a pasar.

-Intentaré que eso no suceda.

-Así me gusta.-Me fundí en un abrazo con Noemí.-Hacéis muy buena pareja. Así que ve a cuchillo con ella.