Un mal hechizo
envía a cuatro
adolescentes
al pasado
donde el famoso
Harry Potter
aún es un estudiante
En Hogwarts
"Soy yo o ese
Niño pelirrojo
se parece al de
los libros
de historia"
~Ollie!
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SIEMPRE VAS A CARGAR CON UN PESO sobre tu espalda si constantemente te recuerdan cuán importante es no manchar, arruinar o deshonrar el valioso apellido que traes puesto. Si soy totalmente sincera, nunca pedí haber sido una Rosier. Hubiera estado bastante contenta con ser una simple bruja más con un apellido irreconocible, hasta no me hubiera importado haber nacido muggle, o incluso squib. Pero no, la vida decidió que fuera parte de esta prestigiosa familia de magos y brujas. He leído todo lo que hay por saber acerca de mi familia, como es una de las pocas familias que permanecen "puras" y como estuvieron envueltas con toda clase de magia negra y magos de renombre reconocidos por obras siniestradas, ningún bien. Con solo decirles que la afamada "Bellatrix Lestrange" era una Rosier, hija de Druella Rosier, claro el apellido de perdió cuando esta se casó con un Black, pero de igual manera siguen siendo Rosier. Y así bajando en el árbol genealógico hasta llegar a mi. Lo que me hace descendiente directa de unos de los magos y brujas más malvados que jamás am existido. Y aún así mi madre insiste que tenga buenas notas en el colegio.
Como ya lo hice bastante claro, toda mi familia es totalmente estricta, mucho más siendo hija única, así que tengo que ser perfecta a cada minuto de cada hora de cada día. Aveces ni siquiera me basta con ser una de las mejores de mi clase, tengo que ser una de las mejores del colegio completo, así como si no fuera estresante ni nada parecido. Y encima de eso, tengo que tener excelentes modales y siempre estar bien presentada, así que si, mi vida no tiene mucha diversión y juegos que digamos. ¡Oh! Y soy una Ravenclaw lo cual le añade un poco más de peso a toda mi vida, "ya saben, los inteligentes siempre están ravenclaw". ¡Ja! Pues díganle eso a Tina Taison qué pasó todo el año escolar haciendo trampa y copiándose de los demás.
En resumidas cuentas, mi vida tiene que ser total y absolutamente perfecta. Aunque yo misma no lo sea en absoluto.
Si como oyeron, soy la persona más imperfecta de todas, pero aún así manejo el hecho de tener una vida perfecta. Si es que eso es posible.
Ahora, las únicas personas que parecen aguantar mi comportamiento obsesivo y perfeccionista. Son tres amigos que he hecho estos tres años que he pasado en Hogwarts. Tan irónico como suena, todos son lo total opuesto a mi y cada uno es de una casa diferente a la mía. Y aún más irónico, uno de ellos es un sangre sucia, ya saben, lo que más odia mi familia completa. Aún así parecemos llevárnosla bien cuando no estamos peleando y parecemos disfrutar nuestro tiempo juntos.
Esa tarde por ejemplo, nos veríamos en el lugar donde siempre nos encontramos en nuestro periodo libre para estudiar para los exámenes finales que estaban por empezar. Normalmente cuando estudiamos soy yo explicándoles todo mientras ellos asienten con la cabeza como si entendieran lo que estaba diciendo, pero para eso son los amigos ¿no es así? Muchas cosas pasaron entre nosotros estos últimos tres años de conocernos desde nuestro primer año aquí. Desde odiarnos a muerte, peleas a media noche, huir de extrañas cosas que nos pasaban y encontrar pasadizos secretos. Pero por fin creo que hemos llegado a un punto de nuestras vidas donde en verdad todo nos está saliendo bien. Ya no pelamos a muerte o huimos de algo que planea matarnos, todo parece ir estando saliendo mejor. Claro sin contar nuestros problemas en el amor, pero eso es otro tema aparte.
