Desperté temprano, sentía como las manos de Rafa rosaban mi rostro, aunque no tenía ánimos de abrir mis ojos, al cabo de unos minutos, lo hice.
_ ¡Buenos días!, Que lindo eres, ¿Cómo amaneciste?
_ Bien gracias, me duele un poco la cabeza y, no entiendo porque si solo fueron dos cervezas, le digo.
_ No hablemos de eso, quiero que me hagas el amor.
_ ¿Estás seguro? -me extrañaba de que después de lo que paso anoche el aun quiera tener sexo conmigo.
_Claro que sí.
Cogí un condón de la mesita de noche, me lo puse y bajo las sabanas empecé rosar la punta de mi pene sobre su ano, lentamente empecé a penetrarlo.
_ Más despacio, me duele. -Grita quejándose
_ Está bien, pero no grites, que Leo y Javier aun duermen.
_ Lo siento, pero, es que ha dolido mucho.
_ok, perdona
La verdad no tenía experiencia en esas cosas, así que había olvidado dilatar un poco para que no doliera tanto, además mi pene es bastante grande 8 pulgadas aproximadamente. Seguí penetrándolo y al cabo de unos minutos acabe en el condón dentro del culo de Rafa. De reojo veo a Leo que nos había visto, de inmediato él se hace el dormido, me imagino que lo ha despertado el grito de Rafa, un poco apenado ante la situación me retiro el condón y lo deposito en el basurero que esta al par de la cama. Subo mi ropa interior, cogí una toalla y me voy a bañarme. Al regresar le doy una toalla a Rafa para que se bañe y de igual manera alisto dos más para Javier y Leo. Preparé el desayuno mientras se bañaban. Terminaron de desayunar y se marcharon.
Recordé que tenía que llamarle a alguien. Eran las 11 de la mañana del día sábado, así que ya era una buena hora para llamarle a Daniel, generalmente las personas que trabajan de noche descansan por el día. Cogí la factura donde estaba su número y le llame.
_ Halo, ¡buenos días!
_ ¡Buenos días Daniel!, Soy Ángel.
_ Ah, eres tú, gracias por llamar Angelito, creí que no lo harías.
_ Y eso, ¿por qué?
_ No lo sé, solo lo imagine. Quizá no te gustaron mis besos y se escucha que sonríe.
_ Pues ya ves que no es así -exclamé temeroso.
_Quiero verte hoy, ¿puedo?
_ Por mi encantado, ¿dime cuando y donde? -MI subconsciente frunce el ceño y me ve con mala cara, Eres un puto, ¿lo sabias?, dice en tono enojado. Y Pensé de inmediato, si no lo soy, entonces cuando disfrutare. Además Daniel me encanta.
_ Puedes venir a mi apartamento si gustas, si no yo voy al tuyo.
_ Dime ¿dónde vives? -conteste, ya que a mi casa no le podía traer, debido a la incomodidad.
_ Coge un taxi a la entrada principal de la residencial Lomas del Guijarro, cuando estés allí me llamas que iré a recogerte. Vente como a las 2 de la tarde, y por favor, no vayas a almorzar.
_ Ok está bien, yo te llamo cuando este allí.
_ Ok, te espero.
No podía creer que estaría con él, con ese chico tan hermoso y con ese cuerpazo que me encantaba. La idea de estar en un su apartamento, solos los dos, hizo resurgir el sexo en mi pensamiento. Así que pensé en dejarme llevar, al final eso era lo que andaba buscando. No con cualquiera, solo con Daniel, quería ver ese cuerpo musculoso completamente desnudo.
ESTÁS LEYENDO
El Crepúsculo del Amor [GAY]
RomanceUn encuentro ocasional, despertará en una mirada el amor real, el amor verdadero, amor puro y sin maldad. Ángel llega a un punto donde se siente muy afectado por un amor que consume dia y noche su pensamiento, continua su difícil adolescencia c...