Había descansado poco, recuerdo que llame a Josué para comentarle la terrible noticia de que Daniel había muerto. Él al recibirla exploto en llanto, sus palabras temblorosas y sin terminarlas, eran producto del dolor que sentía de perder un amigo y compañero de trabajo.
Era un sábado 9 de Noviembre, día de luto, donde el sol se había ocultado y el día tornaba nublado. Josué había avisado a sus amigos y ellos se encargaron de todo lo que conlleva al velorio de Daniel. El velorio iba hacer en casa del dueño de la discoteca, a quien desconocía porque trataba de no involucrarme en el trabajo de Daniel. Yo estaba destrozado, había ido a casa a tomar una ducha y cambiarme de ropa. Anthony y Henry aun dormían, así que no se enteraron de nada. Me bañe y me cambie, vestía completamente de negro. Tome un taxi y le di la dirección que me había mandado en un mensaje de texto Josué.
Eran las 7 de la mañana, llegue a casa de Don Raúl Guevara, dueño de la discoteca y jefe de Daniel. Era una casa muy grande, pero mi tristeza era tanta que no me detuve a ver los detalles. Baje del taxi y me encamine hacia la entrada, veía muchas personas, a nadie conocido aun, estaba la prensa y distintas organizaciones, entre ellas los derechos humanos y lesbicogay. A lo lejos veo a Josué quien se encuentra recibiendo con una media sonrisa a las personas. Me acerco lentamente y con el corazón en mi cuello.
_ ¡Hoo_Hoola!, eh vuelto.
_Hola Ángel, ven acompáñame -hizo una señal a un chico para que tomara su lugar y me llevo hasta la sala de la casa, donde se encontraba Don Raúl y a lo lejos se veía el ataúd donde se encontraba el cuerpo de Daniel.
_ ¡Hola!, señor, él es Ángel Valmer, pareja de Daniel.
_ ¡Hola!, lo siento por esta gran perdida, imagino como debes sentirte. Mi más sentido pésame. Daniel era un chico muy bueno, dedicado a su trabajo y sin dar ningún tipo de problemas.
_ Gracias -torné cortante, _Por ahora quiero verle.
_ Vamos -dice Josué, quien coge de mi mano y me lleva al féretro. Alrededor de este, hay un sinnúmero de adornos florales, rosas blancas por doquier y una fotografía de Daniel en el centro del lugar, en ella sonreía con ternura. Tomo una rosa y me acerco a ver el cuerpo de mi amado. Está descubierta la tapa, y veo su hermoso rostro bajo el cristal, mis lágrimas empiezan a caer, me siento débil.
Me apoyo sobre Josué, quien me mira y dice: "Se fuerte, él me hablaba mucho de ti, decía que te quería y que no quería perderte" _ él siempre tan especial -susurre con palabras quebradizas. _Me duele tanto. -Dos jóvenes se acercan y nos ofrecen unas sillas, nos sentamos Josué y yo enfrente del ataúd. Por detrás de nosotros hay una especie de escenario o algo así, creo que es para dar unas palabras de despedida o de consuelo y esas cosas, no se mucho pues era segunda vez que me encontraba en un velorio.
Pasados 5 minutos, Don Raúl se acerca por detrás de nosotros y empieza a dar su discurso. Josué y yo giramos para no dar la espalda.
+Palabras de Don Raúl.
Hoy en este día, como comunidad lesbicogay y como personas sufrimos una gran pérdida, Daniel Mendoza, a quien con cariño personas muy allegadas a él, le decíamos Dani, murió producto de un accidente o de la misma violencia que hay en nuestro país. Cuando lo conocí y me pidió empleo, supe que era un buen muchacho y día a día así lo demostró. Jamás tuvo problemas, era muy amable y responsable, siempre tenía en él una sonrisa que alegraba el día de los demás. Muchos sufrimos por su pérdida, pero aquí hay dos personas que aún más, el Novio de Dani y su madre. Ángel ven y dinos unas palabras, tu que conociste mejor que nosotros a Daniel.
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El Crepúsculo del Amor [GAY]
RomanceUn encuentro ocasional, despertará en una mirada el amor real, el amor verdadero, amor puro y sin maldad. Ángel llega a un punto donde se siente muy afectado por un amor que consume dia y noche su pensamiento, continua su difícil adolescencia c...