Chica caminaba por los frios pasillos de su escuela, en sus brazos llevaba unos cuantos libros; estaba llegando tarde a su clase de geografía. El tráfico le había inpedido haber llegado a la hora, por su mala suerte llegó 30 minutos tarde.
-Lo siento señorita, pero debe esperar en detención hasta que esta hora acabe. -Un señor alto, con una bata gris y con el cabello blanco, detuvo a la rubia que iba con paso acelerado hacia su salón.
-P-Pero.
-Lo siento, acompañeme.
Y sin más remordimientos, Chica tuvo que seguir al hombre hasta la detención. Por suerte de ella no era la única. Había un asiento que estaba apartado de todos los alumnos que se encontraban parados y impacientes por salir, la rubia rapidamente se sentó en este.
Debía esperar alrededor de un media hora para poder salir, y por eso, se puso sus audifonos y trato de dormir un poco.
La mente de Chica le pedía que abriera sus ojos, la rubia no entendía el porque su mente y corazón le pedían eso. Chica se sacó el audifono que estaba en su oído izquierdo por si llegaba alguien a preguntarle algo etc...
Chica escuchó una voz un tanto ronca, pero un tono bastante agradable. La voz cada vez se hacía más presente. Y Chica abrió los ojos.
Al lado suyo había llegado un chico pelimorado, de alta estatura, bastante delgado, y muy palido.
-¿También llegaste tarde? -El chico le preguntó con una sonrisa a la chica de ojos zafiro.
-Si, ¿tu tambien no? -A la rubia se le formó una nerviosa sonrisa cuando el chico le dió esa perfecta sonrisa.
-Al parecer tenemos algo en común. Soy Bonnie. -Bonnie extendió su palida mano a la rubia. Chica no contuvo su nerviosismo.
-Yo Chica. -Chica rió nerviosamente. Esto le causo ternura al pelimorado y soltó una hermosa risa.
Chica estaba experimentando muchas emociones en ese momento. No podía creer que tenía a un chico tan perfecto como el. Su mirada la tenía loca.
-Para pasar este rato, ¿qué te gusta hacer?
-E-Em, me gusta cocinar, y me encanta la música. -Chica se había sacado la bufanda de color amarillo que llevaba puesta. Además de que el lugar tuviera un aire bastante calido, la rubia también tenía una temperatura bastante calida.
-A mi me fascina la música, toco en una banda, me encanta experimentar con nuevos instrumentos y mejorar cada vez más. La música significa mucho para mi. -Bonnie dijo mirando a los ojos a la chica rubia.
Chica no podía estár más fascinada con ese chico de ojos carmesi. Y así se quedaron por el resto de los minutos.
(🐰)