Perfect ▷Joerick◁

8.

—¡ERICK! —grita fuerte en cuanto entra a su habitación —¡ERICK!

El ojiverde se remueve en su cama comenzado a despertar, frota un poco sus ojos para poder ver bien lo que está sucediendo.

—¿Qué pasa? —pregunta aún un poco somnoliento.

—Desnudate —casi ordena el rubio mientras se quita la chaqueta.

Erick se mantiene en su lugar aún sin comprender nada.

El rubio se sienta en el borde de la cama y quita sus zapatos antes de quitar su pantalón.

Erick ya un poco asustado intenta levantarse de la cama pero Zabdiel se lanza sobre él.

Sus labios tratan de chocar con los suyos mientras Erick lucha por zafarse.

—¡¿Qué crees que haces?!

—Vamos a coger.

—¡No! —grita desesperado. Es increíble que hace algunas semanas hubiera dado lo que fuera porque su novio quisiera estar de esta forma con él, ahora lo único que siente es asco.

—No te hagas el difícil —habla el rubio y Erick siente su aliento. Está muy ebrio —Quieres que esto pase hace mucho. Te voy a hacer un favor.

—¡No quiero ya nada contigo! ¡Sueltame! —grita en el oído del mayor y aprovecha que este se separa un poco para patearlo con fuerza en la entrepierna.

Mientras Zabdiel se queja tirado en el piso, Erick aprovecha para colocarse sus pantuflas de conejito, alza las llaves, su celular, su billetera, cualquier chaqueta y prácticamente escapa del departamento.

Su único rumbo es aquello que lo hace feliz y sus pies lo saben porque lo llevan exactamente ahí.

Son las dos de la madrugada y supone que el rizado apenas a llegado a su casa al ver las luces encendidas.

Toca un par de veces la puerta antes de que esta se abra, en cuanto lo hace se lanza al cuerpo del rizado, lo abraza tan fuerte como puede.

—¿Erick? —pregunta sorprendido —¿qué haces tan tarde aquí y en pijama?

—Joey... —pronuncia en un hilo de voz, aguantando sus ganas de llorar.

—Entra —dice jalandolo adentro de su casa y cierra la puerta.

Deja a Erick sentado en el sillón de la sala y camina a la cocina para servir una taza con leche caliente para el ojiverde.

También va por una cobija a su cuarto y le ofrece ambas cosas a Erick.

—Gracias —murmura apenado.

—¿Qué pasó? —pregunta acomodandose a su lado en el sillón.

—Olvidé las llaves de mi departamento y no sabia donde ir, solo me acorde de ti —responde inventando una excusa en el instante.

Joel sabe que es mentira porque Erick está en pijama es obvio que estaba en su casa, pero decide no insistir almenos hasta que Erick este más calmado.

—Toma toda la leche y después ve a dormir —dice Joel —puedes dormir en mi cama, yo dormiré aqui en este sillón.

Erick se apresura en acabar la leche antes de levantarse —Duerme conmigo.

Joel niega —Eso ya no seria dormir —ríe —y tú debes descansar.

El ojiverde forma un puchero e insiste —Por favor Joey.

Joel no puede resistirse por mucho tiempo a Erick asi que deja que lo jale hasta la habitación.

Erick conoce el lugar porque ha estado dos veces ahi.

Quizás la relación de ambos chicos ha avanzado muy rápido, la razón es que son el par ideal del otro, no necesitan crear ninguna conexión entre ellos porque sus corazones ya nacieron conectados.

—Te extrañé mucho hoy —dice Joel cuando ya están en medio de las cobijas, recostados en su cama.

—Perdón —murmura Erick pegandose más al cuerpo del rizado —tuve un inconveniente.

—Lo bueno es que dormiremos juntos.

—¿Dormiremos? —pregunta elevando una ceja.

—Si, vamos a dormir.

—Está bien —suspira —sólo quiero estar contigo.

—¿Siempre?

—Siempre —afirma el ojiverde y se da el valor de pronunciar algo más —porque te amo.

Joel se separa un poco de él para mirar su rostro.

—S-sé que apenas n-nos conocemos pe-pero... —tartamudea un poco por los nervios.

—También te amo —dice Joel sonriendo y une sus labios.

Cuando se separan se miran fijamente a los ojos y lo confirman, es amor.

—No quiero que nadie más te vea, te desee ni mucho menos se atreva a tocarte.

Joel ríe por lo tierno que se ve Erick estando celoso.

—Ya no va a pasar, renuncie al club.

—¿De verdad?

El rizado asiente —Estaba pensado hacerlo ya semanas atrás, porque ya terminé la universidad y puedo buscar un empleo mejor.

Los ojitos de Erick brillan —Yo también terminé la universidad hace poco, puedo trabajar también —habla emocionado.

—¿Para ahorrar dinero?

Erick asiente.

—¿Para casarnos?

Su corazón se acelera —¿Hablas enserio?

—Yo quiero todo contigo Erick.

Erick lo abraza fuerte y empieza a llorar de felicidad.

Estaba muy equivocado cuando pensaba que Zabdiel era el amor de su vida, el sentimiento que sentía por él no se compara ni a la cuarta parte de lo que Joel le hace sentir.

Joel es para Erick el significado de amor en persona.