XIX

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Johnny y Taeil permanecieron en silencio, no querían que Yuta se sintiera aún peor, se limitaban a dedicarle miradas reconfortantes y sonrisas mientras él secaba sus lágrimas.
El japonés miraba con atención la carita de su chino y se preguntaba una y mil veces ¿qué hizo mal para que Sicheng no quisiera formar una familia con él?

Habían pasado aproximadamente dos horas desde que emprendieron su camino de regreso a Seúl, Johnny se sentía hambriento y Taeil quería ir al baño, así que se estacionaron en un pequeño restaurante de comida rápida a un costado de la carretra.

-Si quieres ir al baño u ordenar algo Taeil puede quedarse en el auto con Winwin- dijo Johnny

-Sólo quiero un poco de té helado ¿podrías ordenarlo por mí?

-Claro, volvemos en unos minutos

Taeil y Johnny entraron al lugar mientras que Yuta miraba el panorama y acariciaba el suave cabello del chino.
El efecto de la anestesia comenzaba a desaparecer y Sicheng abría lentamente los ojos, se sentía sumamente confundido y cansado.

-¿Yu-Yuta?- dijo en un murmullo casi inaudible

El japonés sintió como si su corazón diera un vuelco al escuchar su tierna voz.

-Hola- respondió -¿Cómo te sientes?

-Tengo ganas de dormir 

-Duerme- dijo en su oído y besó su frente

El chino sonrió y volvió a quedarse dormido. Yuta también sonreía, estaba feliz de que su chino estuviera bien al igual que su bebé, la ira había disminuido un poco, ya que por ahora lo primordial era cuidar de Sicheng, los reclamos vendrían después.

Johnny y Taeil regresaron al cabo de unos minutos y continuaron su viaje.

***

Durante el resto del camino Sicheng murmuraba cosas y cambiaba constantemente de posición, cuando llegaron a Seúl, Yuta le pidió a Johnny que los dejara en su casa ya que el departamento de Sicheng se encontraba cerrado por el sistema de seguridad.
Bajó al chino del auto entre sus brazos y Taeil llevaba sus pertenencias, el japonés colocó al castaño en su cama y salió a la sala a despedirse de sus amigos.

-Gracias... por todo- dijo aliviado

-Para eso estamos- respondió Johnny con una sonrisa

-Si necesitas cualquier otra cosa no dudes en llamarnos ¿sí?- dijo Taeil

-Lo haré- sonrió

Después de despedirse con un abrazo ambos chicos salieron de la enorme casa de Yuta.

El japonés buscó el número telefónico de la doctora que había atendido a Sicheng cuando presentaba dolor hace unos meses, lo encontró y la llamó con la esperanza de que tuviese tiempo libre.

-Seulgi Kang, a sus órdenes

-Hola, doctora ammm, quizás no me recuerde, acompañé a un omega a una consulta con usted hace unos meses... en fin, quisiera saber si tiene tiempo para una consulta a domicilio, no importa el costo

-Por supuesto que sí, envíame la ubicación por mensaje y llego en unos minutos

-Gracias

Colgó e hizo lo que la mujer le pidió y al cabo de veinte minutos ella ya se encontraba en la puerta de la casa, en su trayecto a la habitación Yuta le contó a la mujer lo sucedido con Sicheng por la mañana, intentaba recordar la mayor cantidad de detalles para ayudarle  la doctora con su revisión.

La mujer oservó los ojos, oídos y boca de Sicheng con ayuda de una linterna, escuchó los latidos de su corazón y sus respiraciones y después de unas cuantas preguntas más a Yuta, finalizó la revisión.

-Se encuentra bastante bien dentro de lo que cabe y los latidos de su corazón son regulares, el efecto de la anestesia va despareciendo gradualmente, los pacientes recuperan la conciencia en las primeras dos o tres horas pero el estado de confusión y fatiga se prolonga hasta doce o veinticuaro horas más así que no te preocupes si despierta y vuelve a dormir o si se siente confundido, eso es normal

-De acuerdo y... ¿el bebé está bien?

-A simple vista no puedo decir mucho sobre el embarazo, está bastante estable pero necesitamos hacer varios estudios ya que es notorio que se ha descuidado mucho, por lo pronto vigila que descanse lo suficiente y cuando el efecto de la anestesia desaparezca por completo lo ideal es que lo lleves al hospital para hacer los análisis correspondientes... si le da hambre procura evitar que coma muchas grasas y azúcares e intenta balancear muy bien sus platillos

-Perfecto, le agradezco mucho

-No hay de qué, si tienes alguna otra duda puedes llamarme

-Gracias... ¿cuánto debo pagarle?

-Tómalo como un regalo, fue una consulta bastante rápida

-No puedo aceptarlo, por favor déjeme pagarle

-Cuando lleves a tu chico al hospital por los análisis ajustamos cuentas ¿vale?

Yuta asintió con la cabeza y acompañó a la mujer a la puerta, se despidió haciendo un gesto con la mano y volvió a su habitación.
Comenzó a abrir los cajones de su guardarropa y tomó ropa interior además de una pijama caliente.

Con cuidado le quitó a Sicheng esa horrible bata de hospital y por primera vez vió el abultado vientre de su chino...

Con delicadeza posó una mano sobre él y sintió un escalofrío porque sabía que ahí dentro estaba formándose su pequeño bebé, comenzó a preguntarse si sería como él o si tendría los finos rasgos de Sicheng, mientras imaginaba todas esas cosas no podía evitar que una sonrisa se formara en su rostro.

Volvió a acariciar el vientre del chino y después le colocó la ropa ya que estaba comenzando a anochecer y la temperaura disminuía, lo tapó con las cobijas y se recostó a su lado abrazándolo aliviado.

Esa noche dormiría tranquilo.

N/A

Amigos estoy muy feliiiiz.
Esta historia ya pasó las 12.5 K lecturas y ESTÁ NOMINADA A LOS PREMIOS WATTYS AHHHH.

Nunca antes habían nominado una historia mía para esos premios y estoy muy emocionada, siento que lo que escribo no es tan horrible entonces.
Les agradezco mucho por leer y por amar la historia tanto como yo, de verdad gracias, los amo muchote.💜

-Osoroh.☀️

Security [YuWin](Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora