Security [YuWin](Omegaverse)

III

-Necesito que estés dentro de mí- jadeó Sicheng

-No, Sicheng te vas a arrepentir de esto

Sicheng hizo caso omiso a ese comentario y terminó de quitarse toda la ropa para después comenzar a desabrochar los botones de la camisa del rubio, quien contemplaba el cuerpo desnudo del chino debajo de él,  sudando y jadeando.

Ambos volvieron a unir sus bocas desesperadamente en un beso, la lengua de Sicheng recorría cada centímetro de la boca de Yuta hasta llegar a su labio inferior, el cual mordió con fuerza, haciéndolo sangrar un poco.

-Yuta, necesito que... que entres en mí ahora

Yuta dejó de pensar en lo que podría suceder y se concentró en las palabras de Sicheng.
Se quitó sus pantalones y volvió a colocarse arriba del chino tomando sus muslos para abrir sus piernas y después introducir su miembro erecto en la cavidad rectal del chico, sintiendo la humedad y estrechez de esta.

-Ahhh- gimió Sicheng con fuerza, rasguñando ligeramente la espalda cubierta de sudor de Yuta

Nakamoto comenzó a meter y sacar su miembro con rapidez, sin importar si el chico se acostumbraba a su tamaño o no, provocando que Sicheng gimiera y suplicara por más.

Giró al chino para ponerlo boca abajo y que se sostuviera con sus codos y sus rodillas para tener un mejor agarre de su cadera.

Con cada estocada podía ver cómo Winwin se aferraba a la cama con placer, mientras que él sentía espasmos en el abdomen.

Sicheng mantenía su espalda en una postura completamente recta, y Yuta al verlo en esta posición se sentía aún más excitado.

Continuó penetrándolo con fuerza una y otra vez hasta que poco antes de que su orgasmo llegara, sintió como la parte del "nudo" de su miembro se hinchaba para después eyacular dentro de Sicheng.

El chino a penas podía sostenerse y con ayuda de su propia mano también llegó al orgasmo.
Minutos después, Yuta sintió como su miembro se deshinchó y lentamente lo sacó de Sicheng, quien se encontraba casi dormido.

Winwin se sentía totalmente cansado y no pensaba en otra cosa más que dormir, mientras que Yuta miraba el techo pensando en el enorme problema en el que se había metido.

***

Por la mañana, Sicheng despertó gracias a los rayos de sol que se colaban entre las vigas de acero del sistema de seguridad en la ventana, se sentía agotado, como si un autobús le hubiera pasado por encima.
No recordaba en qué momento se había quedado dormido...

"Yuta" pensó de inmediato, y una ola de recuerdos vagos comenzó a inundar su mente.
Había le había rogado a un alfa para que tuviera sexo con él, había dejado que un alfa lo follara a pesar de haberse dicho a sí mismo durante toda su adolescencia que jamás lo haría.

Sicheng se sentía completamente avergonzado.

Con rapidez tomó su ropa, se vistió y con dificultad caminó fuera de la cama. Cuando salió de su habitación negó con la cabeza al ver la puerta completamente destrozada, llegó a la cocina y descubrió que Yuta preparaba algo para desayunar.
Cuando el rubio se dio cuenta de su presencia murmuró un "buenos días" logrando que Sicheng se sonrojara.

-Preparé una especie de estofado, le hicieron falta pimientos verdes, pero por más que busqué descubrí que no tienes muchos vegetales en tu refrigerador- dijo sin mirarlo extendiéndole un plato con comida

-G-gracias

Yuta se sentó en el sofá mirando el techo.

-¿Tú no vas a desayunar?- preguntó Sicheng casi en un susurro

-Desayuné antes de que te levantaras

Parecía que Yuta estaba molesto con él y eso resultaba bastante incómodo para ambos. Cuando el chino terminó de desayunar intentó levantarse para lavar su plato y el dolor lo hizo quejarse, provocando que Yuta pusiera su atención en él.

-No te levantes- dijo serio -Yo lo limpio

-No era necesario que hicieras el desayuno...- murmuró después de unos segundos mientras el rubio lavaba el plato

-No tenía nada que hacer y me comenzaba a dar hambre, no es la gran cosa

-Si te aburres puedes poner alguna película, los discos están en ese lugar- señaló un par de puertas de madera en un mueble debajo del gran televisor

-Gracias

Sicheng intentó levantarse pero no pudo hacerlo sin quejarse otra vez.

-¿A dónde quieres ir?- preguntó Yuta

-A mi habitación

El rubio lo levantó y con cuidado lo llevó hasta la habitación, colocándolo con delicadeza sobre la cama y sin decir una sola palabra se dirigió hacia la puerta.

-Yuta- dijo Winwin antes de que el nombrado saliera

-¿Qué?- se volteó para mirarlo

-¿Estás molesto conmigo?

Al escuchar esa pregunta Yuta se acercó a Sicheng, sentándose sobre la cama.

-No- suspiró -Sólo me siento preocupado

-Yo también- una lágrima resbaló por su mejilla

-Hey, no llores- limpió la lágrima del pelinegro con su pulgar

-Si quedo embarazado arruinaré mi vida... Mi papá no lo va a soportar, me quitará el cargo de la empresa- sollozó

-¿Tu papá?

-Toda mi vida me ha despreciado por ser un omega, y si llego a tener un bebé me matará o se encargará de hacerme sufrir

-Eres un adulto, Sicheng, no puedes depender de tu padre

-Gracias a él y a su empresa tengo este departamento, este cargo, todo mi dinero... nunca he sido capaz de conseguir cosas sin su ayuda

-Mira, aún no sabemos nada ¿sí? Y en caso de que eso llegara a suceder, yo... tengo que encargarme de ti, no sería capaz de dejarte a tu suerte con un bebé

Sicheng se quedó callado.

Mientras que Yuta le daba vueltas a la situación, no podría dejar al chico solo, por supuesto que le daría dinero suficiente para cuidar del bebé (en caso de que hubiera uno), pero no sabe si podría cargar con la responsabilidad de ser padre, y mucho menos cargar con las emociones y sentimientos de Sicheng cuando prácticamente no lo conoce y no siente absolutamente nada por él.