Magia y Fuerza (PAUSADA)

Capítulo 11: magia

- Síganme
Dijo Albert al resto del grupo

- ¿No deberíamos hacer primero la fila?
Preguntó tímidamente Sebastian.
Albert lo miró dulcemente.
- Mucha gente se dará cuenta de que Eliza está acá, gente poderosa, que no sabemos lo que quiere.

- ¿Te refieres al concejo de ancianos no?
Preguntó Anne.
Albert asintió.

- ¿Qué es el concejo de ancianos?
Preguntó asustada Eliza.

- Es un consejo, compuesto por ancianos.
Dijo Sebastián de manera muy obvia.

Albert se golpeó la frente con la mano y se dirigió a Eliza.
- En el mundo hay varios custos Urbis, específicamente en este país hay 5, este es el principal del país, cada custos Urbis tiene su propio custos Magni, que es un líder, pero por país hay solamente un consejo de ancianos, no aparecen mucho, no se sabe mucho de ellos pero son muy poderosos.

- Son unos viejos decrépitos que dan miedo, y les gusta mandar a todos de manera autoritaria, y tienen más conocimiento que la mayoría, saben y ocultan muchas cosas eso viejos de mierda, por suerte no aparecen muy seguido.
Dijo Anne con asco.

- Aún así, es mejor tener precaución y que poca gente sepa que tú eres tú.
Dijo Albert

- ¿Por qué? ¿Que tengo yo de importante?
Preguntó Eliza.

- No lo sé, solo sabemos que Cristobl te persigue por una razón, y cuando era más pequeño, cuando te conocí, me escabulli en una reunión de consejo con el custos magni y otras personas importantes, hablaban de tí, no se porque, pero has estado en la mira durante mucho tiempo.
Murmuró Albert.

- ¿Entonces si no hacemos la fila como ingresaremos al interior del custos Urbis?
Preguntó Sebastián

- ¿No que este era el custos Urbis?
Preguntó Eliza.

- El custos Urbis es más que solo una gran sala, es toda una ciudad subterránea, nosotros solo estamos en la aduana para ingresar.

- Iremos donde Camille.
Dijo Albert guiandolos.
Caminaron adelantando la fila en la que estaban cientos de seres increíbles y llegaron al comienzo de esta, donde había un mostrador con varias personas detrás con ropa hecha de lapislázuli. Ellos estaban en frente de una de estas personas, una chica de unos 17 años, con largo cabello negro y suave, ella discutía con un ser humanoides con características de una rosa.

- Entiendo, pero necesito que tenga un carnet donde se especifique su grupo, especie y raza.
Dijo la chica.

- Soy del grupo requiem, especie fleur raza rozez, es muy obvio que soy eso, mírame, tengo la mitad de mi cuerpo de rosa, mi cabello igual y mis ojos completamente negros ¿Que más necesitas?
Dijo el ser rosa en un castellano algo raro, al no ser su idioma natal.

- Lo se, pero no tengo manera de saber que no está siendo una impostora, además necesito los papeles por burocracia y cosas así, en verdad lo lamento, pero debe sacar el carnet de comprobación de taxonomía.
Dijo la chica del mostrador tristemente.

- Por favor, tengo mi carnet de identificación - dijo mostrando uno - siempre vengo acá y nunca me habían pedido más papeles.

- Lo se, es una nueva medida, no se si sabe, pero hay rumores de que Cristobl volvió y por esto se estan tomando más medidas migratorias con los requiems. Entonces, ahora debe sacar una hora en la fila 13, para el carnet de comprobación taxonomíca, ahí la citarán para que vuelva a penas haya cupo, lo que probablemente será alrededor de una semana, ahí debe volver y le harán una serie de exámenes para comprobar su taxonomía, luego de eso, debe esperar 7 días hábiles para retirar el carnet de comprobación de taxonomía, y luego de esto puede entrar a custos Urbis.

- ¿Usted cree que yo voy a apoyar a Cristobl? - dijo la rosa ofendida - el ha destruido cientos de bosques, matado mucha gente de mi pueblo y aplastado rosas como si nada, jamás apoyaría a una basura como el. Estoy incluso trabajando para detenerlo, necesito entrar hoy a custos Urbis, encontré plantas importantes para una investigación, tengo un invernadero, otros fleurs están en el, aquí en custos Urbis, si no entro hoy estás plantas que traigo morirán y la investigación se retrasara, estamos esforzándonos mucho para crear medicamentos, se avecina una guerra y habrán muchos heridos, estoy intentando poner mi granito de arena, por favor, necesito entrar.
Dijo la rosa al borde de las lágrimas.

La chica de detrás del mostrador la miró muy atentamente, luego se dió cuenta de la presencia del grupo y su semblante se tornó serio.

- ¿Qué hacen aquí idiotas queridos?
Preguntó la chica.

- Un gusto saludarte también hermana de mi corazón, necesito pedirte un favor.
Dijo Albert.

La chica detrás del mostrador arrugó el ceño y se puso las manos en la cintura.
- ¿Un favor de esos que me meten en problemas?

Albert asintió haciendo un puchero

La chica del mostrador dió una amable sonrisa.

- Señorita Rosa María, acompañeme, ustedes también, incluida tú señorita que no conozco .
Todos siguieron a la chica del mostrador por una salita que estaba detrás del sector del mostrador.

- Bueno, voy a intentar resolver sus problemas, pero hablen bajito, no quiero meterme en más líos. Albert y compañía ¿Qué pasó? ¿Peleaste con un trol? ¿Peleaste con un Anti? ¿Una sirena te encantó? Lo he escuchado todo.
Dijo la chica del mostrador, que ya no estaba en el mostrador.

- Es difícil, de explicar, y además es algo más privado.
Dijo Albert apuntando sutilmente al ser rosa.

- No sé preocupen por mi -dijo la rosa mirando a Eliza- ¿Es por ella no? Lo veo en sus ojos, ella es... -la boca de la rosa se tornó en una o - ella es una guardiana de la magia, solo existen 2 en el mundo.

-¿ Qué? ¿Quién es el otro?
Preguntó Eliza pálida.

- El custos Magni, el jefe de esta custos Urbis.

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Nota de la autora:
No mms siento que este capítulo fue muy informativo XD.
Gracias por pasarte por la historia, dejen su hermoso votito si aman a Albert, también si quieren volver a ver a Matt, y también si se preguntan que vergas está pasando por la mente de la familia de Eliza.
Hasta la próxima.
Chauuuuuu.