LOS COMIENZOS DE EDIPO

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A quien actúa con maldad hay que desearle suerte

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A quien actúa con maldad hay que desearle suerte... tarde o temprano la necesitará.


[SEIS MESES DESPUÉS]


-Hora de la muerte... 6:45 a.m.- Veía inexpresivamente el cadáver de la pelirroja, o al menos las partes de cabello que le quedaban, verificando en ese tiempo que si era su color natural.

-Y ya son los cuatro...- Menciono su compañero, o más bien su estorbo, a un lado. –Me impresiona todo lo que pudo soportar, a diferencia de los otros tres...-

-Sí... Era una alfa muy fuerte, de haber seguido su instinto de supervivencia en vez de su moral, seguiría con vida...-

-¿De qué hablas Jean?- Pregunto David a tan extraña mención.

-Zemo le propuso unirse a nosotros, al pasar las pruebas de resistencia y destreza marcial, pero le escupió en la cara y dijo que prefería morir... Ahí lo tienes...- Señalo el cadáver a su corta distancia.

-Que tonta...- Suspiro. –En fin, hay que informarle al Capitán...-

-No, esta con su omega y su cachorro...-

-¿Y?-

-Debemos esperar...-

-¿Y qué? ¿Mientras tomamos el té con esta cosa?- Su burla fue acompañada con un ademan, sacudiendo el brazo de Natasha.

-Llevémosla al crematorio, después continuamos con el plan...-

El otro bufo con fastidio, esperaba que todo termine pronto. –Ya que...-


~♥~


El infante no había parado de llorar, generalmente Harley era un bebe muy risueño, pero solo con Tony, no soportaba que otro le pusiera mano encima, ni siquiera su padre. –Shhhhh... Cariño tranquilo, por favor bebe...- Arrullaba el Capitán sin éxito alguno, pero parecía que le decía todo lo contrario, y es que no quería que Tony interrumpiera su sueño, el pobre se ocupaba de todo con el bebe y sentía que no estaba ayudándolo lo suficiente, pero tampoco como que Harley pusiera de su parte.

-Steve...- Un adormilado castaño entro a la habitación de las mil lágrimas, como nombro Wanda al cuartito del bebe la primera vez que ella tuvo que cuidarlo, ni siquiera toco al nene cuando con solo verla empezó a gritar en llanto. –Tranquilo...- Lentamente se lo arrebato en brazos, con solo olisquear el aire el chiquito empezó a bajar su volumen, dejando solo pequeños hipos saliendo de su garganta.

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Alfa FailDonde viven las historias. Descúbrelo ahora