Sympathy For the evil

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Me despierto cansado, con la sensación de haber tenido una pesadilla. Mi cabeza empieza a martillear otra vez, cada vez me pasa más a menudo, tendré que tomarme algo.
Me dirijo hacia la cocina, donde estarán mis padres desayunando. Por el camino miro las escaleras de ático con temor, creo que el sueño tenía que ver con él. Sigo avanzando, esta vez buscando entre mis pensamientos, pero el dolor de cabeza no me deja pensar.
-¿Has dormido bien?- mi padre está sentado en la mesa leyendo el periódico y mi madre sostiene una taza de café entre las manos.
-Bueno… he tenido una pesadilla- respondo bostezando, mientras busco un analgésico en los cajones.
-Será porque es la primera noche aquí- me tranquiliza mi madre, alcanzándome las pastillas del último cajón del armario.
Nota mental, intentar crecer más para que mi madre no sea más alta que yo. -Eso espero- le respondo.
Entonces recuerdo la mala noche que he pasado, el piano, el ático ¡eso era! -¿Anoche escuchasteis el piano?- debo asegurarme de que no fue real. -¿Tocaste? Yo no te escuché -dice mi padre mirándome, y mi madre sacude la cabeza.
-Ah, vale – el alivio me recorre por dentro.
 
De repente cuando voy a sentarme a tomarme el zumo que me había preparado mi padre oigo como si salieran de la nada unas notas sueltas, tocadas indecisamente.
Me giro de un salto -¿Lo habéis oído verdad? Las notas otra vez- mis padres cruzan sus miradas, me da la impresión de ver miedo y tristeza en ellos. -Jimin amor, no está sonando nada- sin embargo yo sí que oigo.
Las notas me hipnotizan haciendo que mis pies me lleven directamente al ático. De lejos escucho a mi madre gritándome que me tome el zumo pero no le hago caso.
Una vez allí hago contacto visual con el piano. Con la luz del día no parece tan aterrador.
Coloco mis dedos sobre las teclas, aguantando la respiración y toco una escala sencilla.
Espero. Pasan unos minutos y cuando voy a darme por vencido veo como las teclas empiezan a bajar de forma indecisa como tanteando,y finalmente imita la escala que acabo de tocar. Mi corazón da un vuelco y empieza a acelerarse. Vuelvo a posar mis manos sobre el instrumento, esta vez tocando una escala por terceras y separo mis manos intrigado.
Y como suponía el piano vuelve a repetir la melodía.
Sentándome en el taburete dejo que mis dedos toquen una escala cromática, voy a comprobar como de buena es la cosa que toca.
Para mi sorpresa la repite sin problemas, esa fue una de las escalas que más me costó aprender.
El miedo se va, dando paso a la curiosidad, ¿será algún ser sobrenatural? Mientras pienso las teclas vuelven a sonar, ahora es una melodía diferente, una canción al parecer. Que reconozco al instante, es “Sympathy For the evil” .
Pleased to meet you, hope you guess my name...
Así que tiene nombre. ¿Será una persona?
Repito el mismo trozo de canción, y la sigo para que sepa que he entendido.
Suelto una ligera carcajada, nunca pensé que esto podría pasarme. Intenta seguir comunicándose conmigo, pero esta vez solo utiliza una nota repetidamente, unas veces mantiene apretado más tiempo que otras. Me concentro todo lo que puedo para descifrar el método que está utilizando ahora, hasta que mi cabeza empieza a quejarse otra vez. Mi vista se vuelve borrosa, y me desequilibra un pequeño mareo. Esta es la primera vez que me pasa esto, quizás me he esforzado demasiado. Necesito levantarme y refrescar mi cabeza, deslizo mis dedos por todas las teclas como si estuviera acabando una canción, espero que entienda que me tengo que ir.

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Heyyyyyyyyy I'm here;)

La canción supongo que muchos la conoceréis, esta no es a piano pero si que se pueden encontrar covers.
- Sympathy for the evil--  Rolling Stones.

Bye pequeños lectores ❤️

Una Última Melodía [Kookmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora