𝐒𝐀𝐍𝐓𝐀 ⸺ 𝐂.𝐑.𝐎 [𝐓𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚𝐝𝐚]

twenty-six

●capítulo veintisesis●

Tomas

Había organizado con Lupe para hablar un rato en la plaza, ya no lo podía ocultar más.

- H-hola Tomas ¿qué pasa que me llamaste?- pregunta con un tono apagado cuando me ve, como odio verla así. Tenia los ojitos rojos y cristalizados, como si hubiera estado llorando, unas ojeras que se asomaban por abajo de sus ojos y sus mejillas rosadas.

- Lupe...hola- intento sonreír pero solo me sale una mueca- veni sentate- palmeo el banco

Ella se sienta y me mira, pero aveces dirija su vista al suelo y así sucesivamente.

- M-me...me metiste los cuernos no?- ahora sus ojos mieles estaban cristalizados

- Meterte los cuernos Lu? No somos nada y nunca lo fuimos, nose si recordase que alguna vez te pedí de ser mi novia- se quedo en silencio y sus lágrimas comenzaron a caer por sus mejillas, rompiendome por dentro pero tenia que ser realista, en realidad no éramos nada

- Te di todo de mi Tomas, te entregué mi intimidad, te di mi corazón, te di mi amor y cariño y solo me pagas...besándote o teniendo relaciones con otra chica? Enserio Tomas?- pregunta quebrada en llanto, no podía sentirme más culpable de esto

- Te prometo fidelidad Lupe, si querés seguir conmigo te prometo y te juro que voy a hacerte fiel- suplico secando sus lágrimas pero me empuja las manos

- No me toques, de solo pensar que me usaste para acostarte conmigo me hace tenerte asco, repugnancia Tomas, eso te tengo, asco y repugnancia- cada palabra salía con un filo que parecía darme apuñaladas

- No te use para sacarme las ganas, ni siquiera te use Lupita...- niega con la cabeza interrumpiendome

- No me llames más así, mejor ni me llames- se levanta- olvidate de mi, como yo voy a intentar olvidarme de vos. Ya me resultaba extraño que el pibe más canchero de el curso le diera bola a la chica santa que era virgen, solo te faltaba yo para completar tu tablero seguramente- se seca sus lágrimas y sale corriendo, dejándome solo en la plaza con mis pensamientos y lagrimas corriendo por mis mejillas.

Estaba neutro, no tenía expresión facial, dentro de todo ya me lo venía venir en realidad pero obviamente de pensar que no la tengo más a mi lado, que la perdí por una calentura me mata y me come por dentro. Solo me limité a sacar un porro, prenderlo y empezar a fumarlo.

- Esa era la tal Lupita?- una chica rubia se sienta a mi lado y sonrio de costado al notar que es Rosario

- Si, se enojó muchísimo- niego con la cabeza y le extiendo el porro, el cual ella acepta

- Por que cogiste conmigo?- asiento y ella ríe exhalando el humo- ahora me siento culpable boludo, vos fuiste el que me encaraste y yo no sabia que tenías wacha.

- No te sientas mal, no éramos nada pero es una persona demasiado sensible y era la santa de el curso, así que penso que éramos algo serio; algo con fidelidad- suspiro y me paso las manos por la cara frustrado

- Entonces sigue en pie lo de la salida en este finde?- pregunta devolviendome el porro con una sonrisa

- En algo hay que ahogar las penas ¿no?- río- si, obvio que voy.

✨✨✨

Acá tienen su bardo