"-Lo que sea"

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Dedicado a ValeeFerreyra: Gracias por todo amiga ;)

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Esta es la parte  en la que cuento mi historia de vida.

Llegue a este Orfanato a pocos días de nacer, alguien, no se si era mi madre o algún familiar mío, me dejo en un moisés en la puerta de entrada de este Orfanato, con un cartel que decía:

Julie, ese es su nombre.

He vivido aquí desde que tengo memoria hasta el día de hoy, tengo dieciséis años y me iré a los dieciocho, cuando sea mayor de edad.
No se que hare, porque solo salgo a hacer compras para todos los niños del Orfanato, si es que las señoras que hacen eso... no vienen. Solo para eso. No voy a la escuela, sino que estudio aquí, hay una señora muy amable que nos enseña a todos los niños de este Orfanato.

Nunca vi a algún familiar mío, nadie, nunca, jamás me ha reclamado. Yo no se que hare, si algún día alguien viene y me dice que es mi madre o mi padre y que vayamos a casa. Yo no sabría como reaccionar.

Primero le daría las gracias por haberme dejado en este asqueroso Orfanato. Donde te dan una prenda de ropa cada mes, donde luchas por comida, donde no puedes salir y lo único que haces al día es estudiar o hacer mandados al dueño.

Tampoco nadie me adopto, la gente que viene, solo viene a adoptar a bebes. Cuando yo tan solo tenía tres años, quisieron adoptarme, pero una beba nueva que era mucho mas linda que yo se llevo a los que posiblemente podrían llegar a ser mis padres adoptivos.

Luego de eso, nadie  quiso adoptarme, yo me sentaba en un rincón al ver pasar a niños con su nueva familia. Y ahora, tengo dieciséis años, ¿Quién quiere adoptar a una adolescente?

Nadie.

Este Orfanato no es como en las películas, no hay monjas, no es todo feliz y no, no se reza.

Es todo lo contrario.

Este Orfanato lo opera un señor malhumorado, egoísta, individualista, egocéntrico, que odia a los niños y al parecer a el mismo. Solo lo pone feliz el dinero. Por cierto, roba, los fondos que van al Orfanato se los queda el. Y no lo comparte, por eso mismo, individualista y egoísta.

Solo pensaba en el, no le importaba si un niño estaba enfermo o no.

Como cuando una vez me caí y me corte con un vidrio, el solo me dio una venda. Y ya, ni le importe.

En este Orfanato hay señoras que limpian y cocinan y nos ayudan, si no fuera por ellas, probablemente estaríamos muertos todos los huérfanos.

En este momento, estoy sentada en mi cama, en la habitación de mujeres adolescentes que la compartía con Paige y Lorena, mis dos mejores amigas.

A Lorena la conozco desde que tengo tres años, cuando la dejaron a ella, ella no entendía nada y lloraba todos los días, a las noches sigue llorando, yo la consuelo diciendo que todo esta bien y que ya esta pero ella sigue llorando. Es muy amable y buena persona, a los niños los ayuda siempre, es carismática e indefensa, es muy frágil. Sus ojos son claros, siempre me llama la atención de ellos, su cabello es largo y moreno.

Y Paige era muy graciosa, ella le sacaba lo positivo a un problema negativo, es decir, que buscaba lo bueno de lo malo, ella también ayudaba con los más niños, le encantaban, le recuerdan a su hermano, que lo adoptaron cuando ella tenía siete y el dos y eso dejo un vacío enorme en ella. Todas las noches a cada uno de los niños les leía un cuento, porque ella a su hermano le hacia lo mismo. Sus ojos son de un marrón claro y su cabello es castaño.

JulieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora