Capítulo 3

97 3 0
                                    

Primer víctima: Jordan Floyd, la típica rubia popular que le gusta humillar a los "ordinarios", toda mi secundaria me ponía notas en mi casillero con insultos: iba de "perdedor" a "pendejo", de "idiota" a "puto". Pero ahora a ver de que es capaz el "pendejo".

Vive en una colonia de típicos ricos, con casas lujosas y automóviles del año, vive con su novio. Pobre tipo, está viviendo con una total puta que lo único que hace es buscar con quien estar las noches.

Tienen las luces prendidas, señal de que están despiertos. Me bajo de mi camioneta y empiezo mi plan. 7:20, todavía es temprano, me paro frente a la puerta y utilizo el aparato para desactivar el sistema de seguridad, en 5 segundos ya está desactivado y sin hacer sonido alguno. Entro a la casa discretamente, típica casa de ricos: una sala con muebles de piel lujosos, un candelabro en el centro, al fondo la entrada al jardín, al lado la cocina y unas escaleras que daban hacia el segundo piso, ahí deben estar. Subí las escaleras de forma calmada y silenciosa; fui directamente a la habitación donde estaba ella y su novio.

Entré y grité:

- ¡No hagan ningún movimiento o los mato!

- ¡No le hagas daño! - Dijo el novio de Jordan - mátame a mi, pero a ella déjala en paz.

- No idiota - le pegué - a quien quiero es a la zorra de tu novia. - Jalo a Jordan y la tiro al suelo, luego le disparo con el arma de sedantes y queda dormida.

- ¡Maldito asesino! - Dijo su novio.

- ¡Cállate cabrón! Como amas tanto a tu novia te vas con ella. - Le disparé y quedó dormido.

Los jalé y los puse en la parte de atrás de la camioneta.

Primera víctima listo, ahora voy por la segunda.

Mi PurgaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora