Secuestradores

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Narrador

Faltaban diez minutos para las doce del mediodía, que era la hora que habían fijado los secuestradores para hablar con el señor Vipond.

A las doce y dos minutos el teléfono sonó.

- Dos minutos tarde señor Vipond.

- Perdona, estaba reunido. - contestó el señor Vipond desde su despacho.

- ¿Qué novedades tienes para mí?

- No muchas, de momento parece que todos quieren colaborar salvo el señor Jenner. Pero no te preocupes que ya le voy a convencer. - respondió el señor Vipond.

- Más le vale señor Vipond sería una pena que nuestro trato se rompiera. Creo que no hace falta que le recuerde que la vida de su hija está en juego. - le recordó Garrix el secuestrador jefe y sin más cortó la llamada.

- ¡Joder! - bufó el señor Vipond mientras pensaba como convencer a Tom Jenner.

Por otro lado Garrix que era bastante astuto ya estaba pensando cuál sería el siguiente paso.

- ¡Monchi! - gritó.

- ¿Ya está todo hecho? - preguntó e) secuestrador más joven.

- No, hay un capullo de los padres que no quiere colaborar. Vipond dice que va a conseguir que colabore, pero no le tengo mucha confianza a esa cucaracha. Tenemos que tener un plan b por las dudas.

- ¿Tienes algo pensado? - preguntó Monchi.

- Por supuesto. - respondió Garrix con una sonrisa siniestra en la cara.

Mientras los chicos en playa uva se enfrentaban a un problema distinto, cada día que pasaba estaban más desfallecidos y la comida escaseaba.

Louis

Hoy estoy sin fuerzas.

Estamos todo el grupo sentado mirando el mar y creo que estamos todos más o menos igual.

Es cerca del mediodía y ya estamos todos bastantes hambrientos cuando Niall empieza a gritar como loco y haciendo señas hacia el mar.

Al principio nos quedamos descolocados pero al mirar mar adentro veo una pequeña embarcación viniendo a la isla, enseguida nos levantamos y empezamos a gritar y a hacer señas también.

A medida que la barca se iba acercando a la orilla de la playa, pude ver a dos hombres en ella. Una vez llegaron a tierra nos acercamos todos y fue ahí cuando vimos quienes eran esos dos hombres. Eran los mismos que nos habían dejado tirados en esta misma isla.

Narrador

El grupo entero no podía creer lo que estaba viendo, los dos hombres que bajaban de la barca, volvían en busca de los chicos tal vez para matarlos o vaya a saber Dios para qué.

- Volvemos a vernos chicos. - habló Garrix - Esperaba otro tipo de bienvenida la verdad, una un poco más efusiva por vuestra parte.

Harry se acercó furioso a ellos pero Liam logró detenerlo.

- Ya lleváis aquí quince días y todavía estáis vivos menuda sorpresa. - habló Garrix.

- ¿A qué habéis venido, a matarnos? - espetó Harry bastante furioso mientras Liam lo seguía agarrando para evitar que se fuera encima de los secuestradores.

- Sería una buena opción no lo niego, pero tranquilo, todavía no ha llegado tu hora. De momento quiero ir a dar un paseo con la señorita Catherine.

- ¡Ni hablar! - exclamó Louis - Tendrás que matarme primero.

- Tranquilos chicos, sólo es un paseo. No hace falta hacerse el valiente, sobre todo porque no sirve de nada ya que como alguno vuelva a querer hacerse el valiente le pego un tiro en la cabeza. - los amenazó Garrix mientras los apuntaba con la pistola.

- Señorita Catherine la barca le está esperando. - dijo Monchi mientras hacía una especie de reverencia burlesca.

- Ve Catherine. Tranquila que todo irá bien. - intentó tranquilizar Liam a Catherine que temblaba de miedo.

Catherine no tuvo otro remedio que irse con los secuestradores en la barca. Durante lo que duró el trayecto no pudo evitar soltar alguna que otra lágrima, pues se encontraba muerta de miedo no se fiaba para nada de los dos tipos.

Al llegar otra vez al refugio en donde se encontraban los secuestradores y desde donde realizaban todos sus planes, se metieron con Catherine en una habitación pequeña. Desde allí volvieron a ponerse en contacto con el señor Vipond.

- Señor Vipond tenemos a su hija. Ya sabe lo que tiene que hacer si no quiere que la matemos, pero como nos hemos dado cuenta de que al parecer no se entera de como es la situación realmente, pasaremos a usar otras técnicas para que entienda finalmente.

- ¿Qué piensan hacer con ella? Ya les he dicho que estoy cooperando y que van a tener lo que quieren. Por favor no le hagan nada. - respondió enseguida el señor Vipond.

- Le doy veinticuatro horas más para que reúna todo el dinero, es la última prórroga que le doy. Si mañana no tiene el dinero su hija será la primera en sufrir las consecuencias. - y dicho esto colgó el teléfono.

Catherine ahora era incapaz de detener sus lágrimas, Monchi la llevó a otra habitación y la dejó encerrada allí mientras se reunía con Garrix.

- ¿Crees que ha funcionado? - preguntó Monchi.

- Por supuesto que sí. - afirmó Garrix - Ahora sólo hay que esperar.

Playa Uva - (One Direction)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora